“Que bellos momentos fueron los que pasamos, mi querida y dulce amiga. Que aunque no podamos vernos, seguiré visitando el lugar donde solíamos jugar…y en el cuál fue la última vez que pude ver tu sonrisa”
Tener el valor para decir que no le temes a nada, es un acto con gran valentía y con un gran sentimiento de arrogancia algo que minutos después me arrepentiría de haberlo pensado. Cuando vi que algo se había parado a unos metros de distancia aquella “persona” que en realidad yo lo describiría como una silueta oscura de una persona que aparentemente tenía la misma estatura que yo, no me atrevía a pronunciar palabra alguna pues no sabía que decir, bueno yo intuía que era un sueño pero en ese momento dude cuando esta silueta hablo.
—Hola Cristal, cuanto tiempo…—hablo la silueta oscura con una voz llena de nostalgia—.
—Veo que te ha estado yendo bien, —dijo la silueta y añadió confusa—Que curioso, nunca te había visto tan sentimental y emocional. ¿Por qué el cambio? —.
Vaya…era la primera vez que en un sueño podía interactuar con alguien, aquello era increíble y a la vez escalofriante. Pero parece que la curiosidad y los nervios me llevaron a contestarle de vuelta.
—¿H-Hola?, ¿te conozco? —pregunte curiosa pero con voz temblorosa. —
—Oh…bueno que sorpresa, —dijo la silueta con asombro—¿Ni siquiera puedes reconocerte en tus propios sueños? —.
En ese momento abrí los ojos muy sorprendida por la pregunta de la silueta oscura, no podía si quiera creer en lo que acababa de decir y preguntar de una forma tan casual, como si no hubiera sido la primera vez, es solo un sueño hasta ella misma lo ha dicho.
—jaja…que buena broma! Vaya… ¿cómo es que sueño este tipo de cosas tan descabelladas? —exclame en tono de incredulidad absoluta mientras ponía mi mano entre mis cabellos. —
—¿Un sueño? —dijo esto mientras ponía su mano sobre su cabeza muy confusa—¡Oh! No era un sueño lo que quise decir, más bien es “en tus propios pensamientos” —.
—¿Mis propios pensamientos? —dije sorprendida y pensé para mí—No podía creer tal estupidez como los pensamientos, claramente esto era de aquellos sueños que parecen reales pero terminan siendo solo una fantasía—.
—No, no es un sueño Cristal son tus propios pensamientos, podríamos decirlo de forma simple que este lugar es “tu mundo” algo que está en tu mente y que has creado. —dijo la silueta señalándome—.
—¿Mi mundo? ¿Algo que he creado? —pregunte aturdida—Me estás diciendo que yo ¿invente este mundo (básicamente mi mente) así de oscuro y con un suelo cristalino que parece como si estuviera caminando sobre el agua? —pregunte en tono sarcástico—.
—Así es, es algo que fuiste creando poco a poco conforme lo que piensas, tus emociones, prácticamente este eres tú…—conto la silueta oscura—Pero me sorprende, este mundo que habías hecho tenía muchísima más luz y era un lugar bello, sin embargo al paso del tiempo y a causa de lo que has estado pasando así se ha vuelto. —
—¿Este lugar frío y oscuro… soy yo? —pregunte asombrada—.
—Desafortunadamente así es Cristal y todo es a causa de lo que tu misma has provocado—manifestó la silueta con voz irritada—.
—Gracias a que abres tu corazón a cada persona que se te cruza por el camino, siempre has sido tan…” amigable” y esto solo ha causado problemas…—hablo la silueta afligida—
—Si tan solo no hubieras salido a jugar ese día a ese parque a esa hora…! —exclamo la silueta con enojo—¡Ella todavía estaría junto a tu lado! Y tú no tuvieras que pasar todo este dolor que llevas, y solo tal vez…—dijo con voz temblorosa que a causa de la amargura que tenía no pudo continuar lo que iba decir. —
No pude responder ante los argumentos de mi yo del pasado, cada cosa que decía se sentía como flechas llenas de fuego que apuntaban directo a mí cuerpo, y yo solo podía sentir como me quemaban internamente. Tengo que admitir que tiene razón…si no fuera porque realmente soy una persona muy ingenua y amigable si es que me puedo describir de esa forma todavía…ella aún estaría a mi lado. Y esa es una de las razones por las cuales mis compañeros me odian, ella era mi antigua amiga con quién me lleve muy bien y era la única persona que llamaría como mi propia hermana pero también era una niña muy querida por todos mis compañeros en el salón, lo que hice no tiene perdón alguno y a causa de eso yo obtuve una gran consecuencia.
—Tienes toda la razón, si no fuera por mi estupidez ella todavía estaría junto a mí y mis compañeros no me mirarían con desprecio y rencor. —exprese con dolor—.
—Todo esto lo provocaste con tus decisiones, sin pensar en el resultado y ¡peor aún tratas de olvidarte de esto como si fuera algo que no te persigue cada noche que duermes! —grito la silueta con indignación—.
—¿Olvidarlo? Solo trato de seguir adelante con mi vida…—dije en voz baja—.
—¡¿Olvidarlo dices?! Claro! Así de fácil remplazas a la persona que te ayudo cuando pasabas malos momentos, te defendía y te enseño tantas cosas! —hablo la silueta con gran disgusto—.
De nuevo, tiene razón trato de reemplazarla…como si fuera cualquier cosa, tuve muchas amistades tratando de llenar ese vacío que sentía y así poder seguir viviendo, siempre pensé que los amigos era lo más importante en la vida. Y seguía pensándolo todavía y cuando vi a Sophie que ella no conocía quien era o quien fui, que hice y lo que era…creí que ella podía llenar aquel vacío que llevaba mucho tiempo vacío. Pero parece que ella se volvió más cercana de lo que esperaba, no esperaba para nada lo que ella hizo y me hizo feliz, volver a sentir aquella calidez que alguna vez sentí algunos años atrás. Solo pensar en eso hace que me odie a mí misma más de lo que ya me odio.