Somos solo Amigos

Mala suerte

~ • 𝓔 • ~

Pasaron los días, nos reuníamos consecutivamente para ver temas pendientes del proyecto. Según Jacob la gerencia de su empresa quería que absolutamente todos estuviéramos envueltos en este. Así que trabajamos, día y noche, el equipo completo hasta el día final.

—No podemos, hay una diferencia entre la contabilidad y los estados financieros presentados a las entidades públicas — Dijo Charlie, uno de mis subordinados que se encontraba trabajando en el proyecto.

—Déjame lo reviso, debió ser un error al proyectar la información — Le dijo Samantha, subordinada de Rusell.

Mientras mi equipo trabajaba en el proyecto, yo revisaba otros pendientes, como la presentación y el 'speech' para la junta directiva. Todo debía salir perfecto. Bueno, para eso nos contrataban.

—La reunión será el viernes en la mañana, a las 10 en punto. — Me dijo Jake mientras me mostraba la agenda en su portátil.

—Excelente —Le contesté. Entonces le mostré unas gráficas de la posible rentabilidad futura.

—Eso es muy alentador. Debo confesar que estoy un poco nervioso, porque, si esto saliera mal, la culpa sería mía y solo mía.

—¿Cómo? ¿Por qué? — Me ganó la curiosidad y le pregunté.

— Fue mi idea meter parte de las ganancias de la empresa en la bolsa, yo fui quien quise esto y quien insistió en que se hiciera y si todo saliera mal... simplemente no podría perdonármelo. —terminó de decir.

— Bueno a fin de cuentas es solo dinero. No seas tan duro contigo...

—Lo sé Elizabeth, pero muchas personas dependen de eso. Una empresa no es solo una empresa y ya, es la fuente de ingresos de muchas personas y sus familias. Si alguien se viera perjudicado. Jamás podría perdonármelo.

Tenía razón. Nunca lo había pensado de esa forma, claro, porque yo hago parte de esas personas en el sistema, pero ser la cabeza de ello, debía ser una responsabilidad muy grande, si se ve desde esa perspectiva.

Me sorprendió que pensara así, usualmente, la gente en esos cargos cree que dinero es dinero y nada mas. ¿De donde salió este hombre ?

— Hey Elizabeth, no sabía que andabas por aquí. — Me dijo Nicholas quien al percatarse de mi presencia entró rápidamente en la sala de juntas y se acercó a saludarme mientras colocaba su mano en mi espalda.

— Hola, Nick ¿Cómo estas? — Me levanté para saludarlo y entonces me abrazó fuerte. Fue un abrazo demasiado incómodo y fuera de lugar a mi parecer.

Seguido de esto Jacob se levantó de la silla.

— Nick... — Le dijo.

— Viejo Jake, que tal va ese proyecto — Le dijo mientras se le acercaba y le daba una palmadita en la espalda.

— Mejor de lo que quisieras — Le contestó. Se veía bastante serio.

— Ya era de suponer, tengo ansias de ver el resultado final — Terminó de decirle a Jacob. Entonces se puso enfrente mío — Hey linda, ¿Quieres ir a tomar un café conmigo? — Me susurró.

Su comentario me dio mucha gracia. En serio que manera de flirtear.

— Nick estamos ocupados — Le dijo Jacob secamente y extendiendo una mano entre nosotros.

— Viejo...— Iba diciendo Nicholas, pero Jacob lo interrumpió, le agarró del brazo y se lo llevó hacia una esquina.

En verdad no se de que iba todo eso, de reojo los veía como discutir, pero no supe mas y por supuesto el café se fue al olvido.
 

Llegó el día de la presentación con la junta directiva. Llegué temprano a mi oficina para finiquitar algunas cosas. Estaba muy contenta porque era el primer proyecto en el que me darían reconocimiento por manejarlo como Asociada, aunque no lo fuera y eso servía a mi carrera en Cartiers & Couls .

Ya eran eso de las 9 de la mañana así que empecé a recoger mis cosas para irme, guardé el portátil y tomé el celular, pero me crucé con Diego quien iba entrando a la oficina.

—Hola Elizabeth, necesito que me des los archivos, yo daré la presentación en Rusell. —

Yo quedé helada. Que iba a dar... ¿que? ¿ Pero si ni siquiera quería saber nada de este proyecto?

—Ahh y si tenias algún 'speech' o algo para decir, necesito que también me lo des, necesito que esto me salga perfecto.

Mi día se vino abajo inmediatamente.

—¿Entonces vas a ir?— Musité.

—Pues claro, quien mas podría presentarlo si no soy yo. — Dijo con un tono arrogante, casi gritando.

No tenía mas alternativa que darle lo que había preparado.

— Ah y por cierto, de haber sabido que era Rusell claramente no lo hubiera dejado en manos tuyas, ahora espero que nada de lo que hayas hecho haya quedado mal — A mi nada me quedaba mal, pensé. Ya estaba molesta.

—Así que para la próxima, estos proyectos importantes me los dejas a mi ¿Ok? — Terminó de decir.

—Ok — Contesté. — Ya tenemos que irnos, se hace tarde para la junta.

—Bueno, vamos me vas explicando en el auto.

Pedimos un taxi. Diego abrió la puerta y entró de una.

Me acomodé a su lado con el portátil y mi bolso.

—Bueno cuéntame. Rápido que tengo afán — Me decía casi a gritos.

Empecé a explicarle el proyecto de inicio a fin. Mientras le hablaba se me iba acercando y me rozaba las piernas. Me sentía tan incomoda.

No decía nada, pero lo veía observando de más mis piernas. Me daba asco. — Preciso hoy me había puesto una falda... que molestia— Pensé. Traté de acomodar el portátil para que no se viera nada, ya que reprochárselo solo iniciaría una discusión de nunca acabar donde yo sería la perdedora.

El chofer se detuvo, ya habíamos llegado. Cerré el portátil, abrí la puerta y salí apresuradamente del taxi.

Entramos a las oficinas de Rusell y tomamos el ascensor hasta el piso de la sala de juntas.

Nos recibió Jacob.

—Elizabeth, un gusto tenerte aquí — Me dijo y luego procedió a besarme en la mejilla.

Diego estiró la mano para saludarlo.




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