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Desperté en un cuarto que claramente no era el mío, estaba entre sabanas y tenía puesto ropa de dormir que evidentemente tampoco era mía. Me senté en la cama y en ese momento el mundo empezó a dar vueltas en mi cabeza. Iba a vomitar. Pero no sabía dónde había un baño.
Me levanté de un tirón, vi una puerta a mi lado izquierdo, entré rápidamente, era el baño.
Empecé a vomitar.
Me sentía realmente mal, mi cabeza daba vueltas, estaba confundida y sofocada a la vez. No sabía donde estaba ni que había pasado. Lo último que recordaba era haberle dicho a Jacob que me esperase para tomar un taxi a casa.
En medio de mi vomitada alguien entró de golpe. Era él. O por lo menos eso percibía de su silueta borrosa. Se agachó rápidamente y me recogió el cabello.
— ¿Estas bien? – No le respondí, apenas si le reconocía, me sentía muy mal.
Me quedé mirando la taza del baño. Parecía que vomitaba pura agua. Intenté levantarme pero mi propio peso me podía. Vi que alguien mas entraba a la habitación. Supuse que era la hermana de Jacob.
— Que paso Jake, ¿Elizabeth, cómo estas? — Me preguntó con un tono de preocupación.
—Elizabeth, ¿estas bien? — Me dijo Jacob suavemente.
Lo mire tratando de enfocar su rostro, parece que funcionaba. No pude levantarme así que me resigné y me recosté en la pared del baño.
— ¿Qué fue lo que paso ? — Murmuré.
Jacob bajó la mirada.
— Creo que iré a prepararte un té — Dijo Michelle. — Jake por fa llévala a la cama, dudo que el frio le siente bien. — Terminó de decir. Parecía ser algo imponente.
—Ven, te ayudo a levantar. — Musitó Jacob.
Me tomó por la cintura. Mi cabeza seguía dando vueltas y a donde mirara veía borroso.
Me ayudo a caminar hasta la cama.
Me senté y me miré las manos. Tenia moretones. Entonces lo recordé todo.
Ese maldito trató de sobrepasarse conmigo. ¿ Cómo me pude exponer así? ¿ Como podía ser tan tonta, aún con todo lo que me ha pasado?
La sangre se me subió a la cara. y empezaron a bajar lágrimas por todo mi rostro.
— Espera no, tranquila — Me suplicó Jacob. Lo miré. Tenía cara de preocupación. Se veía afligido.
Se acercó a mi y me abrazó suavemente. Me quedé ahí. entre sus brazos. Definitivamente en todos los aspectos, ese no había sido mi día en lo absoluto.
Cuando por fin me calmé Jacob acercó su mano a mi mejilla para secar mis lágrimas. Yo la tomé. Y cuando la miré noté que tenía los nudillos con moretones aún peores que los míos. Me sentí tan culpable, en realidad estaba actuando como una estúpida adolescente.
— Lo lamento mucho Jake... — Murmuré.
— No te preocupes, estas bien y eso es lo que de verdad importa — Me dijo sin titubear en una sola palabra.
Me separé un poco para acomodarme en la cama. Tenía un dolor de cabeza insoportable.
—¿ Que horas son? — Pregunté a la vez que me tocaba la frente.
— Son las 5 de la mañana Elizabeth. — Me dijo Michelle que volvía con el "Té".
Jacob se levantó de la cama y salió del cuarto mientras se espelucaba el cabello como tratando de olvidar algo. Seguido de eso Michelle se sentó a mi lado.
—¿Cómo te encuentras Elizabeth?. — Me preguntó suavemente, también llevaba una expresión afligida.
—Estoy bien. — Le contesté — Michelle... Yo quiero agradecerte por no dejarme ahí, es decir, cualquier otra persona solo se va y no se que hubiera pasado si hubiese sido de esa manera...
Ella bajó la mirada.
— No Elizabeth... en realidad te debo una disculpa, yo... pensé que te irías con ese tipo, no sé. — Me dijo — Es decir, estuviste con el toda la noche... Y si no fuera por Jake, no se que es lo que te hubiera podido pasar... Así que en verdad, siento mucho haberte juzgado.
Me quedé pensando un rato.
— Entiendo. El haberme metido con ese idiota fue un gran error de mi parte. — Musité.
— ¿Pero que fue lo que pasó exactamente? Es decir, se te veía disfrutando de la noche con él — Me dijo curiosa.
— Mmmm—No sabia si decirle, usualmente no cuento nada a nadie.
— Vamos dime, es decir, todo fue muy confuso.. — Seguía diciendo mientras agarraba fuertemente las cobijas.
— Bueno, la noche iba bien, yo la estaba pasando bien, pero luego este tipo empezó como todos con su testosterona, me dijo que fuera a su depa y nos divirtiéramos, ya sabes. Pero yo le dije que eso no era lo que estaba buscando.
— Ya veo, se sintió rechazado por ti... — Me contestó a la vez que me observaba detenidamente.
— Si. Supongo que herí su orgullo y en menos de media hora me convertí en la obsesión de la noche, que estúpida, no se como se me ocurrió hacer eso... No sé como se me ocurrió siquiera darle alas.
— ¿Bueno entiendo pero y entonces porque lo besaste? — Me dijo confundida
— No sé. No se en que estaba pensando — Le dije. Ella me miró aún mas confundida. — Ya sabes.. era una noche loca, uno hace... locuras...
Nos reímos juntas.
En esas vi a Jacob asomarse por la puerta de la habitación.
— Bueno, supongo que mañana seguiremos, ahora es mejor que duermas, Esta bastante tarde — Me dijo Michelle percatándose que el estaba ahí.
—Perdona no sabia que era tan tarde.. Me siento muy apenada por todo lo que paso.. — le dije y miré de reojo a Jacob.
Entonces me levante rápidamente y dejé la almohada que estaba abrazando en la cama.
— Yo.. puedo dormir en la sala, no quiero causar incomodidad —
Tanto ella como el se sorprendieron. Jacob se acercó rápidamente.
— No, no incomodas, es decir. En la sala hay un sofá cama, y ya estaba durmiendo allí, no te preocupes — Me dijo mientras cogía mi mano suavemente.
Me quedé observándolo, por fin podía enfocarlo bien. Sus ojos no se veían como de costumbre, estaban casi grises, como tristes. Tenía la idea de que eran azules como el mar. Creo que me equivoqué.
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Editado: 16.02.2024