Su Obsesión Conmigo [2]

Capítulo 3 Te quiero

[Lucy]

Jueves 11:35 hs.

¡Me quiero matar! Okey.. no, pero no puede ser que nada me quede, Jonathan debe de estar perdiendo la paciencia conmigo, ahora voy de camino a la biblioteca ambos tenemos tiempo libre.

Llego a la biblioteca, lo veo cerca de la puerta con un libro en su mano. Si tenemos nuestros números, fue muy entretenido pasar tiempo con él ¿quién lo diría?. Me acerco más a Jona... corrección al profesor West.

—Dos más dos es cuatro— lo hice sonreír.

—Señorita Davis necesitará mucho más que esa información para aprobar.

—Vaya Jonathan West se activó en modo aburrido, me va a costar acostumbrarme.

—Señorita Davis lo importante aquí es que finalmente logre salir de la secundaria.. graduada siendo más específico ¿bien?.

—Entiendo profesor— dije mirando al suelo.

Olvidaba lo desagradable que es siendo profesor, levanté la mirada el profesor me estaba mirando.

—¿Lista?.

—Sí.

Con el profesor nos fuimos a una mesa, nos sentamos, el adorable profesor me dejó tarea la cuál creo que la hice mal. Debo decir que me encanta lo prolijo que es cuando miraba comparaba sus ejercicios con los míos. Lo miro, se ve muy serio y concentrado.

—¿Y bien?— pregunto acercándome más.

—Los tres primeros están bien sólo ordena mejor los números ¿quieres? Te puedo restar puntos por eso, el resto está mal y el último ni siquiera está completamente resuelto.

—Perdone profesor es que ya era algo tarde y ya no podía concentrarme— su mirada la fija en mi ahora, aunque luego miraba a su alrededor.

—Vas mejor de lo que esperaba Lucy, debo admitir que no pensaba que resolverías alguno correctamente, pero lo hiciste.

—Por usted profesor, es el mejor al momento de explicarme, el problema soy yo, me olvido o pierdo la concentración.

El profesor hizo mi cabello hacía atrás en eso su mano se posó en mi nuca, se acercaba lentamente a mi uniendo sus labios con los míos.

[Jonathan]

Tomé sus labios con los míos, llevo años queriendo hacer esto con Lucy y es mejor de lo que imaginé, tan dulces, carnosos, tan encantadores. Lucy me alejó cubrió su boca con su mano mirando a todas partes. No hay nadie aquí.

—Profesor...—

—Lucy ya no podía pasar ni un minuto más conteniéndome.

—Profesor ¿esto está..—

—¿Bien? Si tú también quieres desde luego que si.

El timbre tocó, Lucy se levantó guardando sus cosas en su mochila, la tomé de la cintura ella es tan bajita que tengo que subirla un poco cosa que hice para volver a besarla.

—Um profesor..— dejo de besarla por falta de aire—.Profesor bajeme por favor, tenemos clases ahora.. nos pueden ver.

—¿Tu tío te dirá algo? Él acostumbra llegar tarde a sus clases por cierto y yo no tengo clases si no una reunión nada importante por eso estamos solos en la biblioteca Lucy.

—Profesor esto es extraño y difícil de creer para mi.

—¿No quieres?— vuelvo a besarla ésta vez con más intensidad. Lucy me aparta.

—¿Me permite pensarlo? Aún estoy algo... necesito pensar en todo esto.

—Sí, Lucy, piénsalo.

La dejo encima de la mesa, no puedo detenerme mucho menos quiero, mis manos acarician sus piernas la suavidad de su piel es perfecta, sus manos toman las mías.

—Profesor ya pasó mucho tiempo.

—Bien, Lucy, anda ve.

Me hago a un lado, Lucy se bajó de la mesa, se estaba yendo.

—Lucy.

Tomé su mochila, ella se giró, voy hasta ahí.

—Cuanta prisa, no me tengas miedo, casi te vas corriendo olvidando tu mochila.

—Perdón— tomó su mochila pero no se la entrego.

—¿Me das un beso?.

—Profesor— dijo suplicante.

—Vamos Lucy no te veré por el resto del día.

—Está bien.

Le dio un corto beso a mis labios. Le sonreí, ella me devolvió la sonrisa y se fue. Tomé mi maletín, voy hacía la junta.

—Buenos días—mi voz salió ronca, me respondieron igual por lo bajo. 

Me quedé de pie mirando mi reloj cada cinco minutos. Lucy ya debe haberse ido, salían temprano hoy. Quiero hablar con ella ya quiero saber que decidió. Le señalé al director la hora, está alargando mucho la reunión, me dio un asentimiento.. concluyó la reunión, me fui sin más a mi casa, me di una ducha rápida y me acosté en la cama, tomando mi celular, no puedo dejar de mirar sus fotos todo el tiempo, necesito al menos de todo mi tiempo libre para mirarla una y otra vez. La voy a llamar.

—¿Profesor?.

—Lucy que lindo escucharte.

—Lo mismo digo ¿pasa algo?.

—Nada a parte de extrañarte ¿qué haces?.

—¿Me extraña? Es muy pronto y nos veremos todos los días de lunes a viernes..—

Mi mano que estaba reposada en mi abdomen bajó removiendo la toalla que estaba enrollada en mi cintura, Lucy no para de hablar, el simple hecho de estar escuchandola me puso así, tocarme es inevitable y dejé de concentrarme en lo que decía.

—¿A qué hora podemos vernos Lucy?.

—No lo sé ¿hoy también tengo que practicar?.

—Sí, Lucy, es importante que al menos consigas un seis en el trabajo del lunes.

—¿Tanto para sólo un seis? ¿será tan difícil?.

—Lucy, como mucho los mejores estudiantes que tuvo ese colegio aprobaron conmigo con ocho, imagínate nada más, tú eres casi el peor promedio debes esforzarte más.

—Jonathan, perdí cualquier esperanza de obtener un seis en éste preciso momento.

—Tú tienes algo a favor, no te rindas, a diferencia de ellos tú tienes clases extras.

—Eso es algo.. está bien tú dime estoy libre.

—Entonces ven a mi casa a las siete.

—¿A su casa?.

—Sí, Lucy, puedo ayudarte mientras corrija exámenes, no hay tiempo que perder lo sabes ¿cierto?.

—Sí, Jonathan..—

Muerdo mi labio inferior, me hará venirme ésta niña, me despedí de Lucy, terminé la llamada, sonrío, ésto me tiene emocionado.

Seguro aceptará estar conmigo, nos besamos y eso, sé que le gusto, quiero hacer de todo con ella, pensar que debo controlarme e ir despacio con ella, no sé si pueda ser tan paciente.



#568 en Novela contemporánea

En el texto hay: obsesion, odio, suspenso

Editado: 24.05.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.