Cap.-1

–Ándale amiga vamos un rato a bailar, dicen que este antro esta de maravilla –Mi amiga Celeste no ha dejado de tratar de convencerme para ir a un antro que hace poco han inaugurado –Celesteeee por Dios sabes que dentro de poco nos vamos a graduar y tenemos que estudiar para los exámenes finales y aparte las practicas –

–Lo se Andy lo sé pero, te la has pasado estudiando, desde que comenzaste tus estudios en medicina no has salido a fiestas o cosas parecidas, vamos andaleee –Me toma de la mano y comienza hacer pucheros, al final acepto ya que me tenía harta

–No quiero probar alcohol, estoy bien así –Frunce el ceño Celeste –Vamos amiga, diviértete un poco, prometo cuidarte –Ruedo los ojos y tomo lo que me ofreció, cuando pase el trago mi garganta ardía y ella solo comenzó aplaudir, ella me tomo de las manos y me llevo a la pista –Amiga no se bailar –No importa, tu solo déjate llevar por la música –Dice mientras comienza a moverse, yo miro a los lados y trato de copiar los pasos de las chicas que están bailando, de pronto comienzo agarrarle el ritmo y solita comienzo a moverme

–Bien amiga, ya agarraste el ritmo –Sigo moviéndome y siento unas manos rodeándome la cintura, me iba separar pero de pronto la persona que me estaba abrazando me suelta y me tapa los ojos, se acerca más y me hablo en mi oído

–Te extrañe como no tienes idea amor –Agarro las manos que me cubrían los ojos y me las quito poco a poco, después volteo y le sonrió –Steven –Me abalanzo a él y lo abrazo fuerte –Vaya sí que me extrañaste bonita –Me separo de él y lo miro directamente a los ojos –No tienes idea de cuánto –El me abraza de nuevo y me pega a su cuerpo –En eso comienzo a voltear a todos lados

–Tranquila, él no sabe dónde estoy –Hago como que me relajo pero la verdad es que me decepciono, después de que me entere de que Héctor se había marchado de Canadá comencé a investigar sobre su paradero pero jamás di con el

–Vamos Andy baila como lo estabas asiendo –Me volteo dándole la espalda y el me aprieta un poco el cuerpo con sus brazos – ¿Te apetecería salir un rato? –Asiento y me toma de la mano, poco a poco salimos del  antro

–Vaya sí que has cambiado, debo confesarte que estaba algo dudoso del sí eras tú –Sonrió ante su comentario – ¿Puedo preguntarte algo? –Asiento – ¿Qué paso con tu amiga, con Katelyn? –Ella está en Rusia, está estudiando Comercio Internacional

– ¿Y tú porque te viniste hasta acá? –Encojo los hombros –No lo sé, solo necesitaba un cambio de aire –Él se acerca a mí, me toma de las mejillas y me da un largo y dulce beso…

***   

–Doctora Williams se le solicita en el consultorio número 1–Vaya que solicitada ando hoy, Ramsés mi enfermero llega a mi lado y me entrega la carpeta con el nuevo caso –Ilumíname –Digo cuando tomo la carpeta –Hombre de 37 años de edad  acaba de ingresar por un dolor de cabeza agudo, el hombre es estúpidamente rico y el Doctor Anderson no quiso hacerse responsable así que es todo suyo –El me hace una seña de que el paciente está en el consultorio, tomo un respiro y antes de entrar me entre una llamada

Dime –Escucho como comienza a reírse –Así me contestas amor –Sonrió y le hago una seña a Ramsés para que entre –Dime amor ¿Qué se te ofrece? –Así está mejor –Dice –Bueno te hablaba porque quería saber si estarás ocupada esta noche –Iba contestar pero continua hablando –Quiero invitarte a cenar ¿Qué dices? –Suspiro –Esta bien, acepto tu invitación, ahora te dejo porque tengo que atender a un paciente, adiós Te Quiero –Escucho como ríe –Yo también te quiero hermosa –Y cuelgo, me quedo unos  segundos sonriendo como tonta y decido entrar

–Pues ves que no era del todo grave –Salimos de consulta y ahora vamos a la cafetería, son las 4 de la tarde y no hemos parado de trabajar –Doctora quería hablarle de algo, vamos a la cafetería y le cuento ¿Qué le parece? –Asiento y vamos a la cafetería, al entrar tomo algo ligero ya que no he desayunado, nos sentamos en una mesa alejada y miro fijamente a Ramsés esperando a que me cuente

– ¿Y? –El me mira por unos segundos y asiente –Cierto, lo que pasa es que en el departamento y en el hospital se está rumorando que usted y yo tenemos una relación, ya que siempre estamos juntos, tanto en este hospital como en otros –El mira su comida y evita mi mirada

–Ey no deberías de sentir vergüenza digo, al fin al cabos los dos sabemos que solo somos amigos, si trabajamos juntos es porque me agrada trabajar contigo, me acople rápidamente a ti y no me gustaría el trabajar con otra persona, en cualquier momento el departamento nos mandara otra ayuda y la tratare al igual que a ti –Me mira directo a los ojos y asiente

–No le tomes importancia a los chismes, es más –Digo acercándome un poco a el –Hay que hacer justamente lo que siempre hacemos a ver que más inventan ¿Bueno? –El asiente dudoso – ¿Pasa algo? –El asiente –Lo que pasa es que yo no quiero meterla en problemas Doctora –Mira a los lados y comienzo a reírme