Héctor me propuso matrimonio, se arrodillo en la arena y acepte, creo que solo se vive una vez así que acepte, hoy me encuentro frente al gran espejo que tiene la suite mirándome con un vestido corto y bonito color blanco y acomodándome un pequeño tocado floral que tengo en mi cabeza, antes de que entrara a la suite él me dijo que un juez nos iba a casar en la misma playa en la que anoche me propuso matrimonio y que llegaríamos juntos
Unos toques hacen que sonría, tomo mi celular y mi pequeño ramo de rosas y abro la puerta donde me deja ver a un Héctor sonriente y guapo con un short y una camisa no tan formal, como nos casaremos solo nosotros dos no decidimos casarnos como de costumbre, grandes vestidos y velos y Trajes negros
– ¿Lista para pasar de ser la señorita Williams a ser la señora Montañez?
–Por supuesto –Contesto y salimos de la suite y del hotel, cuando llegamos a la playa ya se encontraba un juez sonriéndonos
– ¿Están listos? –Pregunta y los dos decimos que si al mismo tiempo
La ceremonia paso rápido, en todo momento estuvimos atentos a todo lo que decía el juez, nos pusimos nuestros anillos y después dijimos nuestros votos matrimoniales, al final el juez dijo –Yo los declaro marido y mujer, señor Montañez, puede besar a la señora Montañez –Y rápidamente Héctor me beso
–En cuanto salimos de ahí Héctor decidió que ya era hora de irnos así que fuimos y tomamos las maletas para después subirnos a su avión y viajar a Rio de Janeiro lo se lo se puros viajes pero a partir de hoy serian viajes como marido y mujer
–Ya casi llegamos –Dice Héctor sentado a un lado de mi –Creo que ya he dormido mucho –Respondo
–Después de que lleguemos comenzaremos a recorrer todo Brasil y cuando terminemos podremos regresar a Canadá porque estoy dejando mucho trabajo y tus pacientes te han de extrañar
–Está bien esposo mío –Digo y le doy un beso
–Me gusta cómo se escucha –Responde y me da otro beso
Aterrizamos y nos hospedamos en un hotel, salimos y comenzamos el turismo, es muy agradable el conocer todo esto, me encanto su comida, su gente y su cultura
Después de semanas de estar en Brasil por fin estamos viajando de vuelta a casa, llegando me iría con Héctor a su casa ya que viviremos juntos, según lo que me ha dicho las cosas que habían en mi departamento ya están en su casa
–Hogar dulce hogar, bienvenida a tu nueva casa amor –Me da paso para que entre y admire en donde viviré, es muy grande y muy bonita, todo está muy moderno
–No sé si recuerdes a mi nana –Dice y me giro a verlo – ¿Esta aquí? –Pregunto algo emocionada
–No, pero pronto llegara –Responde y me emociona saber que estará aquí –Tus cosas ya están en la habitación principal, puedes hacer lo que quieras aquí, tu auto está en la cochera y si estas cansada puedes ir a descansar un rato
– ¿Tu no descansaras? –Le pregunto –No, tengo que empezar con todo el trabajo que deje, en la noche que este la cena y si aún no despiertas te llevare la cena –Se acerca y me da un beso en los labios y uno en la frente
–Ve a descansar –Hago caso a lo que dice y voy al cuarto, me quedo unos minutos admirando todo el espacio y cuando por fin me acuesto en la cama ciento cuan suave es, me pongo boca bajo y me quedo profundamente dormida
[…]
–Buenos días doctora ¿Cómo se la paso en sus vacaciones? –Me pregunta Nick al verme llegar –Bastante bien Nick ¿Me extrañaste? –Asiente sonriendo
–Buen Día Andrea –Dice Ramsés pasando por un lado de mi –Buenos Días a todos –Respondo y entro a mi consultorio
–Dime ¿Alguna novedad? –Pregunto sentándome y mirando los reportes que tengo
–Por ahora no doctora, con permiso –Dice y sale ¿A dónde va? –Tomo mi celular y miro que tengo mensajes de Héctor
*¿Cómo se encuentra mi mujer?* –Sonrió inmediatamente –*Oye a lo mejor estas trabajando pero en verdad me preocupa que no me contestes*
*Cuando llegues a ver los mensajes contéstame y evítame la pena de ir hasta el hospital*
Pongo en responder y comienzo a escribir
*Héctor apenas acabo de llegar al hospital ¿Yo puedo llamarte mi hombre?* –Su respuesta no tarda en llegar
* ¿Apenas? Y claro que me puedes decir así, tu puedes decirme como quieras esposa mía*
*Esposo jaja se siente raro escribirte así, No tiene ni una hora desde que salí de casa*
*Te acostumbraras amor, ya veras, estoy más tranquilo ahora que me contestaste los mensajes, te dejo tengo una reunión, ya te extraño*
*Yo te extraño más, nos vemos al rato*
Deje el celular y entro Ramsés – ¿Me necesitaba? –Pregunto al entrar al consultorio
–No –Respondo mirándolo y el frunce el ceño –No estoy para jueguitos –Se iba ir pero Nick llega y no lo permite