CAPÍTULO 8

Capítulo 8:

Nada sobre vampiros

Todos se están preparando para el carnaval de la escuela, así que estoy algo asustada, ya que no soy muy buena para la decoración. Micaela y María se están ocupando de todo.

Estoy contenta con eso, pero me hubiera gustado que Elizabeth estuviera aquí para ayudarnos. Eso es lo que ella hubiera querido. Sé que para Eli esto es muy importante, más que para todas.

—Katherine es igual a ti. Fue muy extraño tenerla frente a mí —dice Hope mientras termino de tachar las cosas que ya están listas para el feria.

La miro con seriedad y suelto una carcajada sonora.

—Es mi antepasado —respondo, pidiendo internamente que cambiemos de tema—. Por cierto, llevé la mesa estudiantil a la cafetería.

—Tu antepasado vampira —me recuerda—. Katherine y mi papá tuvieron una historia, ¿crees que si él vuelve...? Aún no puedo creer que se haya hecho pasar por Elena y por ti, ¿no les da miedo que este caminando por el pueblo haciéndose pasar por una de ustedes?

Debo confesar que ya había pensado en todo lo que me está diciendo Hope, pero... ¿Qué se supone que deba hacer? No tengo idea alguna.

—Sí, lo he pensado, pero no puedo solo pensar en que esté haciendo o no Katherine. No voy a dejar que se adueñe de mi vida —respondo y luego la miro con detenimiento—. ¿A qué te refieres con una historia?

—A una historia de odio y mmm... Ella tuvo algo con mi tío Elijah, así que debes tener cuidado. —Camino hasta donde los chicos están poniendo el lanzamiento de aros.

¿Quién es Elijah?

—Aquí están los premios. —Les entrego dos grandes bolsas negras con los diferentes peluches dentro.

Regreso a la caja separando las bolsas con los premios de cada juego.

—¿Pudiste hablar con tu papá desde que asesinó a Jeremy o intentó matar a Jeremy?

Dejo las bolsas y la miro.

—No, Hope, no he hablado con él y no lo haré. Y, por favor, dejemos de hablar de papá y todo lo que tenga que ver con vampiros —le pido.

Luego recuerdo que ella también es un vampiro, pero no me refiero a eso. Creo que ella me entiende, así que no tengo que aclarar nada al respecto, ¿o sí?

—Está bien, no hablaré más sobre nada que tenga que ver con los vampiros —promete, y yo sonrío.

¿Por qué no hay un momento de paz en este mundo?

Necesito que las cosas cambien para poder sentirme bien. ¿Eso es mucho pedir?

Mi padre casi asesina a Jer. Sé que en el pasado lo hizo, pero ¿por qué lo volvió a hacer ahora? Creí que esos problemas habían quedado en el pasado.

—Te quiero —le aseguro—. Ahora vamos a terminar de organizar todo esto para que Elizabeth se sienta orgullosa.

—Y que no nos asesine —agrega, y yo asiento—. Esa chica es muy complicada, pero me recuerda a Caroline.

—No sé cómo hace esto todo el tiempo. Es diferente ayudarla y hacer todo lo que me pide a organizar y ver que todo esté bien. —Suspiro con una pequeña sonrisa sobre mis labios—. Tienes razón, ella es muy similar.

—Te ayudaré —me tranquiliza Hope—. Yo repartiré los premios de las cajas de cada juego.

—Gracias. Yo iré a ver si ya han traído las sodas y si están todos los puestos de comida listos.

Tomo mi bolso y le entrego la lista a Hope donde dice dónde debe repartir los premios.

Camino dentro de la escuela para ir a la cafetería. Antes de llegar veo a Elena, Stefan y Jeremy hablando cerca de los casilleros. Camino hasta ellos.

—Hola —los saludo—. Jer quería saber si...

—Sí, sí, yo instalo los peces de colores, los trescientos peces —dice cansado.

Creo que después de repetirle toda la mañana si me podía ayudar con eso, lo harté.

—Gracias. —Sonrío, y él asiente antes de irse.

Volteo a ver a Elena y Stefan.

—¿Qué quieren que hagamos? —pregunta Elena.

—¿Pueden ayudarme a organizar las bebidas que deben estar en la cafetería? Yo voy a ver si los puestos de comida están listos para ponerlos —les pido y ellos asienten—. Gracias —digo antes de irme, pero mamá me detiene.

—¿Estás bien? —pregunta, y yo asiento.

—Hope me está ayudando con los premios y los juegos ya están casi listos. La rueda de la fortuna está casi instalada y solo falta la bebida y comida, pero ya está casi todo hecho.

—No me refería a eso, cariño.

La miro a los ojos.

Sé a lo que se refiere, pero no pienso decirle que me asusté al ver que mataban a mi tío. Eso está mal.

Mi papá mató a mi tío.

—Bueno, le pedí a Hope que no hablaríamos de nada que tenga que ver con los vampiros, así que lo mismo les pido a ustedes. Hoy solo somos unos simples estudiantes que tratan de organizar una feria para poder divertirse en la noche como todos —les pido y ellos asienten.

—Me parece muy bien, cariño, y eso es lo que vamos a hacer. —Sonríe Elena.

—Si recuerdan que yo soy un vampiro, ¿no? —pregunta Stefan, y yo río.

—Eres la excepción —le aclaro.

—¿Y Kol Mikaelson? —pregunta mamá con seriedad en su tono de voz.

—También está prohibido hablar de él. No me digan que Hope también es vampiro, lo sé. Ella es la excepción junto con Stefan.

—Me gusta la idea —dice Stefan.

Mamá y yo sonreímos.

—Bien, ahora me voy —digo antes de irme—. Tengo que reparar unas cosas y regreso.

—Está bien, cariño, mientras haremos lo que nos pediste —dice mamá—. Pero no te vayas y nos dejes trabajando solo a nosotros, ¿no?

Me detengo al escuchar lo que sale de sus labios y me cruzo de brazos sin poder creer lo que me dice.