Recuerdo #7
- Amor apúrate que ya vamos tarde – trato de apurar a Tamara
- ¡No me digas que me apure cuando tú no sabes lo difícil que puede llegar a ser caminar con esta enorme panza! – me dice con una mirada desafiante una vez está a mi lado.
- Perdón amor, tienes razón no lo sé y debe ser difícil caminar con dos personitas en tu barriga – le digo mientras coloco mis manos en su barriga y me agacho a darle un beso – Pero es que estoy emocionado y ¡ya quiero saber si hoy si se dejan ver para saber si son niños o niñas o niño y niña! – le digo una vez me levanto y la abrazo.
- Cariño pareces un niño que está a punto de recibir su regalo de navidad – me dice depositando un beso en mis labios para después cerrar la puerta de la casa y encaminarse hacia el carro.
Una vez nos montamos al carro, nos dirigimos hacia el hospital, cuando llegamos al piso donde siempre le hacen los chequeos esperamos a que el doctor Stevenson nos llame.
- Bueno hoy les tengo una muy buena noticia – nos dice el doctor mientras sigue moviendo el transductor por la barriga de Tami – Hoy sus hijos si están permitiendo ver que son.
Apenas dice eso siento como empiezo a sudar de los nervios y la emoción de saber que ya no falta mucho para que mis hijos nazcan.
- ¿En serio doctor? ¿Van a ser dos niños o dos niñas? – pregunto emocionado, cuando escucho la risa de Tamara la volteo a mirar - ¿Qué? - pregunto un tanto extrañado por su reacción.
- Nada amor, sólo que me encanta la expresión que veo en tus ojos – dice y se le derrama un lagrima la cual limpio con cuidado – Bueno Ethan, ¿nos podrías decir que son antes de que aquí el niño presente se ponga a llorar como un bebe que le quitan su paleta? – pregunta con tono de picardía mientras me mira y vocaliza un te amo sin dejar de mirarme.
- Pues es un niño y una niña – dice Ethan mientras nos mira Tamara y a mí y yo no puedo evitar darle un abrazo de euforia al doctor por mi alegría al tiempo que escucho una sonora carcajada de Tamara.
Una vez llegamos a la casa después de la ecografía, ayudo a Tamara a sentarse en el sofá y me siento al lado de ella con mi portátil en mi regazo mientras busco nombres de bebé.
- Bueno amor es hora de escoger los nombres de nuestros hijos – le digo con una enorme sonrisa – ¿Ya has pensado en alguno?
- La verdad es que si – me mira y puedo ver un brillo de emoción en sus ojos – Aunque hay un nombre que descarte desde el principio porque no me gusta – me dice mientras sonríe pícaramente.
- ¿En serio?, ¿cuál es?
- Colton, es que ese nombre tan feo si ... - no puede terminar de hablar cuando ya le estoy haciendo cosquillas – Ya, no más, me rindo – logra decir entre risas y decido parar y no seguir torturándola.
- Pero ¿si has pensado en alguno amor?
- La verdad es que si, ¿qué te parece Zachary y Caitlyn? – pregunta a lo que yo arrugo la frente - No te gustan, y que tal Ryan y Ariadna.
- No me parece mal, me gusta Ariadna y qué te parece si le colocamos Adam y así quedan con la misma inicial – le digo sonriente.
- Me gusta tu idea – dice y la beso.
El resto de la tarde decidimos ver películas.