Treinta días de soledad.

Día decimonono : ''Narcisos''

Narcisos.

Fe.

 

 

Te alejas a gachas, abandonando el rumbo que el sol te obsequia.

Pobre musa que contempla el amanecer mientras se desgasta

que solo espera a que el día se agote con ojos esperanzados.

Hay narcisos que susurran con melancolía tu despedida,

con tristeza se refugian en la inseguridad que te acobarda.


 

No pierdes el valor, no te corroe el murmuro del viento.

Extiendes tus alas al horizonte y despejas el cielo,

pero no te marchas, regresas,

cohibidos los pilares de tu pecho no preguntan

el porqué de tu retorno, lo toman en silencio y son avasallados por tus dudas.


 

Esperanza surge en tu aliento,

fe que te vuelve traidor y héroe de tus propias creencias.

No te desprendas de lo que idealizas,

más aun te vuelcas y te vuelves oportuno.

Hay narcisos que claman al benevolente aire tu fragancia.

Te vuelcass y te vuelves oportuno.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.