XIV

Ya en casa de Jana, el Reverendo se expresó respecto a su problema.

-Jana, recurro a ti viejo amigo porque una de mis pupilas Laia Jenkins fue raptada por el piromaniaco de Elián Jáuregui otro de mis ex pupilos. La tiene al parecer en alguna cueva de la montaña pero no sabemos cual sea. Tú que conoces la región tan bien, deseamos que nos ayudes.

-La montaña está llena de cuevas Jones, sería muy difícil, además las cuevas de la región están llenas de murciélagos que las hacen inhabitables. Comenta Jana

Por fuera de la cabaña comenzaron a soplar unos vientos gélidos, mortuorios.

-¿Escuchas eso Jones, ustedes muchachos? Les comenta imperturbable Jana

-La verdad no, comentan los dos chicos

-¿A qué te refieres Jana? Sé concreto, comenta enfático el Reverendo

-Esto me suena muy extraño Jones, esos vientos son presagio maligno, hay una historia en la montaña Turbon que trata sobre un monstruo volador que aparece cada 400 años para reclamar sacrificios humanos un alma virgen y mártir, como ofrenda y sea su salvoconducto entre la tierra y el infierno.

-¿En verdad crees esas historias paganas Jana? Reitera el Reverendo

-Soy un escéptico pero he visto muchas cosas en la montaña que me hacen pensar en algunas señales.

-Cuéntenos más señor Jana, por favor. Alega Aisha

-Este monstruo volador vuela por las noches extactamente en este momento que comienza a anochecer comiendo todo lo que se atraviese en su camino, tiene preferencia por los chicos jóvenes, es una especie de demonio sodomita. Pero por el día toma la apariencia de un hombre normal se hace llamar Kellen V. Su nombre significa ‘el que derriba’. Trae la desdicha a los hogares; en este caso el Emperador es identificado como un ladrón detestable. Equivale a la figura del vampiro.

La campana por fuera de la cabaña sonó.

-¿Esperas al alguien más Jana? Pregunta alarmado el Reverendo

-Para nada, soy un viejo ermitaño. Nadie me ha visitado en algunas semanas más que los pueblerinos que vienen conmigo cuando desean alguna cura a sus dolencias. Lejos de eso se mantienen lejos de mí como si fuera la roña misma. Responde Jana ¿Podrías asomarte hijo, a ver quien es? A Milos

-Está bien señor. Acierta a responder este

Milos se asoma alcanza a divisar a un hombre en el cuerpo de un joven muy apuesto.

-Es un joven inefable. Acierta a responder Milos

-"El diablo volvió". Es Kellen V. Responde desconcertado Jana

-¿Estás seguro Jana? Visiblemente perturbado elñ Reverendo

Sus conocimientos cristianos se vieron confundidos en ese preciso instante, sabía que el Diablo existía pero no que pudiera verlo en ese instante, sacó su rosario, ya que ellos no portan Rosario."El diablo es representado como un enorme dragón, pero sus compañeros rebeldes y decaídos son iguales a los ángeles que los derribaron: tienen alas, vestiduras largas, cabellos rizados, lo único que les falta es la aureola", describe la periodista y escritora italiana Paola Giovetti en su libro "L'Angelo Caduto" (El ángel caído). "Es solo a partir del siglo XI que comienza a aparecer como un monstruo dotado de cola, orejas animalescas, barba y pies de chivo y cuernos, adquiriendo también alas de murciélago".

En ese momento el Reverendo Jones tuvo un deja vu, recordó el momento en el que él tuvo un contacto con el satanismo antes de volverse a la religión, estaba inconforme con su vida, tuvo dos o tres intentos de suicidio y mató a su compañero escolar del cual salió libre por falta de pruebas. Después de un tiempo comenzó a tener pesadillas horribles y se dio cuenta de que se estaba volviendo bastante trastornado. Los padres de Jones se dieron cuenta tardíamente que su hijo podría estar posesionado por el Diablo. Lo que lo llevó a vagar por dos años, hasta que encontró con la ayuda de un padre local, la salvación en Cristo. Mientras el padre por mí rezaba tuve una sensación de paz en mi cuerpo. Luego, el hombre dijo que aunque yo pensaba que no había esperanza en mi vida, Dios tenía un plan para mí y que Satanás era un mentiroso. Allí dijo, una voz dentro de mí: "vas a terminar tus exámenes y luego vas a morir". Jana salió al encuentro de Kellen V.

-¿Quién eres muchacho? ¿Qué se ofrece acá lejos en la montaña? Pregunta incisivo Jana

-Me he perdido señor, soy un viajero extraviado y vendedor de quesos exquisitos que podrá acompañar con manjares y vinos. Soy Kellen V.

-¿Kellen V.? ¿De dónde tomas ese nombre muchacho?

-Me lo puso mi padre que me abandonó por preferir a mi otro hermano y me descendió hasta las calles.

-¿Osas engañarme muchacho? ¿Podrías mostrarme los quesos?

-¡Claro señor! Son de la mejor calidad... son frescos todavía

En efecto Kellen V. traía quesos llamativos a la vista. Jana siguió su juego deseaba descubrir si el Diablo mismo se había postrado en su casa con alguna artimaña que seguramente no iba dirigida hacía él un viejo cruel y vidente o algún chico zascandil.

-Tomé el queso señor y pruébelo. Reitera Kellen

-No es necesario chico, en este momento no necesito quesos. Afirma enérgico Jana

-Solo tómelo y sienta su textura, dele una pequeña probada, no hay compromiso de compra.

Ni el mismo Jana pudo resistirse a los encantos y astutas argucias de Kellen, en efecto tomó el queso, pero por un momento dudó y no lo probó.

-¿Qué pasa señor? ¿No lo probará?

-No necesito hacerlo, es mejor que te vayas Kellen V.

-¿A qué debo esa descortesía hacia conmigo señor? ¿Hice algo malo?

-No nada solo vete. Responde nervioso Jana

-Me echa así como así, sin ofrecerme un vaso de agua, una tarra de café. Que mal educado se torna usted. Responde furioso Kellen

-¿Quién eres Kellen?