Un Albergue para un Emperador

XVIII

Laia permanecía inmóvil mientras que otros esbirros de Elián habitantes de las montañas Turbon en Huesca donde antes fueron ajusticiadas unas brujas, estos eran descendientes de aquellas mujeres quemadas por aquello buscaban venganza ya que fuerob exiliados a no bajar al pueblo Laspaúles de donde venía el despótico alguacil Larson que rehuía de esa gentuza como así la llamaba. No soportaba su hedor, según el mismo decía. Se torno tirano de Laspaúles y caprichoso al cual se le obedecían sus órdenes sin chistar. Seir, Shax, Vapula, Vine arreglaron la indumentaria de Laia sería su futura puta princesa.con sombrero, guantes, un vestido de colores brillantes.

-Se dice que la reina lleva colores brillantes para asegurarle al público, que a veces la espera por horas, la posibilidad de verla en medio de la multitud. Le comenta entusiasta Seir a Laia

-Todo esto no me importa, sabes, todo esta querella es preparada por Elián "el traidor" se volció como Judas Iscariote.

 

Seir no hizo el menor caso a la palabrería de Laia. Continuo.

 

-"A ella le encanta el color y sabe que se destacará". Este mundo es al revés, ¿sabes? Las personas promedio piensan que la gente triste se viste de negro y es taciturna, pero al contrario de las predicciones el mal se viste de color. Nos gusta ser vistos, admirados, respetados. Insiste Seir

 

Pusieron a Laia en un trono a base de madera, maniatada, perturbada. Todos pudieron observarla, incluido Acfred, Betsy, el alguacil, el Reverendo, Milos, Aisha y algunos oficiales. Mientras que otros dispersos se enfrentaban con los perros hambrientos.

 

-Señor, no podemos terminar de bajar a los heridos, se nos atraviesan unos perros negros muy feroces, nos están atacando. Alguacil Larson.

-Lo escucho oficial Rodríguez, tenemos otra situación aqúi mismo. Tendrán que luchar solos.

-¡Señor, señor, nos atacan! Grita horrorizado Rodríguez

 

Se corta la comunicación entre las dos partes.

 

-¡Oficial Rodríguez, Rodriguez! ¿Me escucha?

 

Nadie responde ya.

 

-¡Guarden silencio, han pasado una vida hablando! ¿No les basta? Levanta la voz Elián, saliendo por detrás de Laia. No se apure alguacil Larson, sus buenos oficiales han muerto. Son mi sacrificio.

-¿De qué habla este loco? Vocifera para todos el alguacil Larson. Bájese de ahí, esto ha terminado, está detenido por secuestro y posible pena de incendio e incendio forestal, causando la muerte de muchas personas. 

-De un suicidio colectivo o en masa, no iba a vivir en un albergue toda mi vida es para mí un factor aterrador y por ende tal acto me puede reportar algún tipo de beneficio. Tener a Laia. 

-No estamos enfrentando a una secta Reverendo, ¿a eso se dedicaba usted aquí? Dice altanero Larson

-No permito que le hable así al Reverendo se atreve a levantar la voz Milos, que en ese momento parecía el más apto para tomar la voz. Acfred solo miraba a Laia sufriente y desconsolado. Ahí tiene la prueba alguacil, Elián es el culpable de todo. En ese momento aparecieron sus secuaces.

 

-Todos nosotros nos hacemos llamar los Caballeros de St. Francis comenzando a entonar LA DECIMONOVENA LLAVE (enoquiano) Madariatza das perifa LIL cahisa micaolazoda saanire caosago od fifisa balzodizodarasa Iaida. Nonuca gohulime: Micama adoianu MADA faoda beliorebe, soba ooaona cahisa luciftias peripesol, das aberaasasa nonucafe netaaibe caosaji od tilabe adapehaheta damepelozoda, tooata nonucafe jimicalazodoma larasada tofeejilo marebe yareyo IDOIGO, od torezodulape yaodafe gohola, Caosaga, tabaoreda saanire, od caharisateosa yorepoila tiobela busadire, tilabe noalanu paida oresaba, od dodaremeni zodayolana. Elazodape tilaba paremeji peripesatza, od ta qurelesata booapisa. Lanibame oucaho sayomepe, od caharisateosa ajitoltorenu, mireca qu tiobela lela. Tonu paomebeda dizodalamo asa pianu, od caharisateosa aji-la-tore-torenu parache a sayomepe. Coredazodizoda dodapala od fifalazoda, lasa manada, od faregita bamesa omaosa. Conisabera od auaotza tonuji oresa; catabela noasami tabejesa leuitahemonuji. Vanucahi omepetilabe oresa! Bagile? Moooabe OL coredazodizoda. El capimao 207 itzomatzipe, od cacocasabe gosaa. Bajilenu pii tianuta a babalanuda, od faoregita teloca uo uime. Madariatza, torezodu !!! Oadariatza orocaha aboaperi! Tabaori periazoda aretabasa! Adarepanu coresata dobitza! Yolacame periazodi arecoazodiore, od quasabe qotinuji! Ripire paaotzata sagacore! Umela od peredazodare cacareji Aoiveae coremepeta! Torezodu! Zodacare od Zodameranu, asapeta sibesi butamona das surezodasa Tia balatanu. Odo cicale Qaa, od Ozodazodama pelapeli IADANAMADA!

-Si no han entendido se los repetiré con más calma (se expresa Elián):

 

Oh vosotros que habit·is en el aire primigenio, que en los rincones de la Tierra sois poderosos, y ejecut·is los designios del poderoso. A vos se os ha dicho: Contemplad el rostro de Sat·n! el principio de todo consuelo, cuyos ojos son la claridad de las estrellas; lo que os ha autorizado para gobernar la Tierra, y su indecible variedad; otorg·ndoos el conocimiento para disponer de todas las cosas de acuerdo a la providencia de AquÈl que se sienta en el Trono Infernal, y que en el principio se levantÛ diciendo: Sea gobernada la Tierra por sus habitantes, y que en ella haya divisiÛn; la gloria de sus partes; y que haya divisiÛn en ella; y que su gloria pueda ser bebida y servida en sÌ misma. Que su maldiciÛn vaya a la par con la satisfacciÛn de sus deseos, y que, como doncella, les sirva. Que las estaciones se confundan entre sÌ, y que sobre ella, o en su interior, ninguna criatura sea la misma. Que todos sus n˙meros difieran de su calidad; y que no haya una criatura igual a otra. Que las criaturas razonables de la Tierra, y los Hombres, se confundan y enfrenten 208 unos a otros; y que olviden su lugar de residencia. Que el trabajo del Hombre, y toda su pompa, sea mutilado. Que sus construcciones se conviertan en cuevas de las bestias del campo! Confunde su entendimiento con oscuridad! øPor quÈ? Me arrepiento de haber hecho al Hombre. Que su naturaleza sea conocida a veces, y que otras veces permanezca oculta; `porque ella es el lecho de una ramera, y la morada de Lucifer el Rey °Abre de par en par las puertas del Infierno! °Que te sirvan los cielos inferiores! °Gobierna a quienes gobiernan! °ArrÛjalos a medida que no te sirvan m·s. Atrae todo lo que te fortalezca, y destruye lo podrido! que ning˙n lugar permanezca en su sitio. AÒade y disminuye hasta que cuentes las estrellas. Lev·ntate. MuÈvete! y aparece ante el convenio de Su boca, con la que …l nos ha prometido Su justicia. Abrid los misterios de vuestra creaciÛn y hacednos partÌcipes de la SABIDURÕA PURA! Brindado por el Angel Nalvage. Culmina Elián




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.