Capítulo 5: Fox

—¿Qué hiciste qué? ¿Te has vuelto loco? No hay duda de que eres hijo de mamá. La criticas y eres igual.

—No es para tanto. Nada más quiero conocerla un poco mejor y saber que será buena madre para mi hijo. No planeo salir con ella, ni involucrarme con el bebé. Es solo que cuando supe que es soltera, me entró la duda de que como iba a hacerlo sola y si su trabajo le daba lo suficiente para vivir y tener al bebé bien.

—Imagino que sí o no se hubiese embarazado. Fox, es una mala idea que te involucres con ella a pesar de no tener intención de hacer nada.

—Oye, ella es diseñadora gráfica y yo necesito una.

—Ni siquiera tienes el lugar definido, ni nada.

—En eso estoy ahora porque mañana debo presentarle algo y no puedo decir que no tengo nada. Casi entré en pánico. Primero iba a intentar coquetear con ella para lograr acercarme más, tener una o dos citas para conocerla mejor y, en cuanto me asegurara que todo estaba bien, me retiraba, pero se mostró firme en no querer nada conmigo y no parecía dar su brazo a torcer. Se me vino a la cabeza hablarle de diseño.

—Es una pésima idea.

—Dogan, sé un buen hermano y apóyame. No he podido decirle nada a Alfie porque no quiero que nadie sepa sobre el embarazo. No hablo con mamá, así que tú eres el único con quien puedo desahogarme.

—Solo ve con cuidado y no te involucres más de la cuenta o vas a terminar mal.

—No lo haré. Si la contrato, me ayudará con lo que necesito y no tomará mucho tiempo. Para cuando termine el trabajo yo sabré que ella es buena madre y desapareceré.

—¿Estás seguro de que no te quieres involucrar?

—No puedo. Ella eligió ser madre soltera y yo no decidí ser padre. No la dejé embarazada por accidente.

—¿Y qué pasa si descubres que no será buena madre?

Muerdo el labio inferior. No había pensado en eso.

—No lo sé. Hasta ahora me causó una buena impresión y algo me dice que será buena madre. Nada más quiero confirmarlo.

—Solo digo que puedes conocerla y si te gusta, podrías intentar salir con ella. Después de todo, eres el padre de su hijo, aunque ella no sepa nada.

Cierro los ojos y me relajo en el sofá.

—No estoy preparado para ser padre y sabes que yo arruino todas las relaciones que he tenido. Tengo la capacidad de enamorar a las mujeres y no la de enamorarme de ellas.

—Pienso que no apareció la indicada. Tal vez la madre de tu bebé lo es.

—No todos somos románticos como tú, Dogan.

—No soy romántico, según mi novia, pero no pierdo la esperanza en que encuentres a tu mujer ideal.

—Nada de eso, solo necesito asegurarme de que el bebé estará bien y eso es todo.

—Como quieras. Te dejo porque aquí es tarde y necesito dormir.

Cuelga y estiro la cabeza hacia atrás.

No esperaba que Lexy Collins fuera tan guapa y soltera. Me gustó que me enfrentara y se mantuviera firme mientras hablaba conmigo.

Le gustan las carreras de auto y no parece ser de las que dicen eso solo por interés en un corredor como ha pasado con otras.

Es independiente, profesional y tiene carácter. De momento me agrada como madre de mi hijo, aunque no sepa que lo es.

A mis padres les caería bien, pues ellos valoran a las personas independientes y trabajadoras, no a los trepadores.

A mamá no le agrada la novia de Dogan. Papá opina que es una arribista que busca un esposo importante y con dinero que la mantenga. Mamá piensa igual que él y que el trabajo de recepcionista es solo una tapadera para fingir ser independiente y lo dejará en cuanto se case con alguien que esté dispuesto a mantenerla.

Yo no la conozco, no tuve la oportunidad porque en los seis meses que lleva saliendo con Dogan y no la he visto. Y no tengo idea si Dogan piensan igual que nuestros padres y le da igual o está cegado por ella. El tiempo lo dirá.

Dogan vino al aniversario de nuestros padres seis meses atrás y vino solo. No la trajo porque a nuestros padres no les agrada y no quiso crearle malestar a nadie, pues mamá no es de las mujeres hipócritas que finge que alguien le agrada.

Mamá y papá no insisten con Dogan porque sabe que él hace las cosas a su manera e insistirle con algo, es peor, genera el efecto contrario, así que ahí andan.

Y yo aquí con la cabeza hecha un lío buscando conocer a la madre de mi bebé e intentando hacer algo con mi vida para no aburrirme.

La idea del centro de Karts se me ocurrió cuando visité uno en Los Ángeles y me pareció una idea genial agregarle los simuladores, aunque no sé donde conseguiría los simuladores y no deben ser económicos. Tampoco deseo derrochar dinero solo por tenerlo y meterme en algo que no me dé ganancias.

Tengo que hablar con papá que es el experto en esto, pero no puedo hacerlo sin armar un plan de negocios antes.

Tal vez sea buena idea pensar en un nombre y armar la identidad corporativa primero, luego buscar precios de los go karts, los simuladores, encontrar un lugar y poner toda la información en papel para que papá la estudie y me diga si sería un buen negocio o debería descartarlo o podría modificar algo para hacerlo rentable.