Un Chico Llamado Amor

DIECISEIS

— ¿Eso te pregunto? —Penny trenza mi cabello sentada detrás de mí.

—Sí. —Cierro los ojos—. No sé que hacer.

Estoy en el parque con Penny, la llamé al salir de mi casa y le pregunté si quería salir un rato, ella aceptó. Pensé que vendría con Estrella Fugaz pero me avisó que su hermano está en casa y él cuidaría de su perro mientras tanto, Penny sugirió que invitáramos a Jared también.

Hacía que estamos esperando por él, mientras tanto, le cuento a Penny lo que pasó con Max. Odié dejar a Jenny así pero no tenía opción, no quería seguir sintiéndome sofocada con Max cerca de mí.

—No puedo creerlo —dice ella tomándome por los hombros—. Aprovecha los pocos minutos que tiene contigo para hacer esas cosas.

Me giro para verla una vez que terminó con mi cabello. —Me siento muy mal, no quiero que Jenny se sienta traicionada.

—Pero no es tu culpa, estás haciendo todo lo que puedes —me alegra que Penny sea mi amiga, con ella puedo hablar sobre esto que está sucediendo con Max.

Frente a nosotras, a varios metros están sentados unos chicos de nuestra edad. Creo que son de la escuela, están pasándose una bolsa de comida rápida y sacando papas fritas de ahí, uno de ellos comienza a reír por algo.

Mira Lily —señala hacia un lado y regreso mi atención a Penny—. Ahí viene Jared.

Jared se acerca, lleva un sudadero rojo y sonríe cuando nos ve. —Hola a ambas, ¿A qué se debe esta reunión?

—Chico —Penny se levanta y coloca su brazo sobre su hombro—. Te necesitamos, tienes que imponerte.

— ¿Imponerme? —pregunta él—. ¿De qué hablas?

Penny me mira. —Es momento que intervengas, tienes que fingir ser novio de Lily así Max se aleja de ella para siempre, pero mostrarte como un novio de verdad, él cree que está haciéndolo para darle celos.

—Un momento, ¿de verdad piensa que es para que sienta celos? —asiento y se ve sorprendido—. Tienen que darme los detalles.

Penny arruga su frente. —Los detalles son que Max es un idiota, está fastidiando a nuestra pequeña Lily y tú tienes el control ahora, ve y déjale en claro que Lily y tu son almas gemelas.

Jared se sonroja inmediatamente. — ¿Yo?

Me levanto también. —No, no hagas eso —rasco mi cuello—. Está bien, supongo, solo intentaré alejarme más y, luego, no sé.

—No, Lily —Penny suspira—. Max claramente quiere que te enamores de él, si sigues soltera él seguirá molestándote. No parece entender que no quieres salir con él, tenemos que tomar medidas desesperadas.

Jared baja la mirada y me siento muy apenada. —No tienes que hacerlo —afirmo—. Ya hemos ido demasiado lejos, tan solo mentir una vez fue suficiente, Max tiene que parar por sí mismo.

—No lo hará —Penny contesta—. Mira Lily, mi hermana mayor estaba en una situación similar, había un chico que no dejaba de fastidiarla y hasta que consiguió un novio él se alejó —relata—. Yo sé que no es lo correcto pero Max es raro, es lo mejor que se me ocurre ahora.

Pero Max tiene que detenerse en algún momento, ¿no? Se aburrirá de perseguirme y su atención se irá con alguien más.

— ¿Crees que aun esté en tu casa? —Penny pregunta.

Me encojo de hombros. —No tengo idea.

—Vamos ahí —sonríe cuando propone ella—. Si estas con Jared él no puede acercarse.

Señalo al pobre chico. —Acaba de llegar y quieres que nos vayamos otra vez.

Jared sonríe. —No importa, es bueno caminar.

Señalo hacia atrás con mi cabeza. —Traje el auto, no tenemos que caminar.

Penny me toma de la mano y con la otra a Jared. —Perfecto, vamos a invadir tu casa y si Max no está ahí, no importa, nos enseñaras tus libros.

Por alguna razón no me molesta la idea de mostrarles mis libros. Penny realmente está leyendo el libro que le sugerí al igual que Jared, eso me agrada. Normalmente no me gusta que las personas, incluyendo mi familia, entren a mi habitación pero con ellos se siente todo diferente.

—Bien, vamos —suspiro y los dirijo a mi auto.

Los dos entran y se sientan atrás, mientras vamos de regreso a mi casa Penny le señala a Jared todo lo que él tiene que hacer, básicamente mostrarse “un poco más agresivo” de lo que es. Dudo que eso pueda suceder, Jared no parece ser un chico agresivo.

Llegamos y el auto de Max sigue ahí pero no el de Jenny, supongo que ya se fue. Mi corazón se detiene por un instante, me siento culpable por dejar a Jenny de un lado cada vez que me siento incomoda con Max. Solo desearía que él se alejara de mi vida.

Bajamos una vez que me estaciono y caminamos hasta la entrada, abro la puerta y no escucho a nadie. —Creo que están atrás —señalo.

Penny cierra la puerta por mí. —Vamos allá, hay que marcar territorio —ella toma la mano de Jared y la acerca a la mía—. Vamos niño, tienes que actuar como si estuvieras protegiendo el amor de Lily.

Yo niego. —No digas eso —alejo mi mano de él, no quiero incomodarlo con todo esto—. Lo siento Jared.

Pero él estira su mano y deja la palma hacia arriba. —No me molesta, podemos hacerlo si tú quieres.

No sé si es una buena idea seguir con todo esto, involucrar más a Jared en mis problemas con Max. —Um, ¿seguro?

—Que lindos —Penny ríe—. Me encantan, son mi pareja heterosexual favorita.

Jared ríe y yo exhalo.

—Entonces —Jared mueve su mano—. ¿Vamos?

Asiento y bajo el rostro, estoy segura que me he sonrojado. Tomo su mano y lo primero que noto es la suavidad de su piel. Hace un rato era Max quien tenía sus manos con las mías pero yo solo quería alejarme de él, esta vez me siento diferente.

Esta vez no me disgusta que mi mano esté sosteniendo otra mano.

Penny nos empuja por detrás y llegamos hasta la puerta para el patio trasero, ya los podemos ver a través del cristal, Max y Oliver están jugando con Macaroon. Le lanzan una pelota mientras están sentados sobre el pasto.

Oliver está sonriendo y eso me hace sonreír a mí. Por mucho que me desagrade Max estoy agradecida que él pasa tiempo con mi hermano, no tiene muchos amigos realmente así que durante las tardes él las pasaba a solas.




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