16. Tranquilidad en forma de flores

16. Tranquilidad en forma de flores 
 

Mi lista de ítems termina hoy ...

Eso me lleva a una gran certeza, el tiempo esta llegando a su fin. Para los 4 meses hace falta una semana, una semana que no se como la afrontaré, me levanto de la cama y así espelucada y con las babas en la mejilla me observo en el espejo, la palidez cada día es peor, pero ese día debía sonreír, me lo debía por todos esos años que me sentía triste y sola, por esos días donde me negué sonreír.

Camino hacia el baño y me demoro más que todos los días, quería disfrutar todo y eso incluía una ducha con agua caliente, cuando sentí que mis manos ya eran como uvas pasas salí del baño y procedí a buscar con que vestirme.

Busque y busque en mi maleta que ponerme, encontré un jean desgastado, mejor dicho, viejo y lo coloque en la cama, me decidí por una camiseta de flores multicolores y mi chaqueta habitual, después de arreglarme un poco camino hacia la cocina y lo primero que veo es a cebolla, desayunando un tazón completo de croquetas gatunas, al pasar por su lado deja de comer y me ronronea, puedo pensar que me dijo "buenos días"

- Buenos días, ¿Constanza para donde vamos tan temprano? – me sorprendo al notar a Sergio ahí cerca de cebolla y con su infaltable café –

- Buenos días ... pues para ninguna parte ahora en la mañana, pero quizás mas tarde salgamos a finalizar mi lista – me sonrió y él me entrega una taza de café –

- Verdad que sí, falta un ítem, ¿me recuerdas cuál es? – camina hasta el sofá y  lo sigo hasta allá –

- Regalar flores – asiente –

- Sí, tengo el dato de una floristería cerca, ¿es la flor de nardo? ¿verdad? – asiento –

- Así es, esa flor transmite paz y tranquilidad

Lo observo hablar con varias floristerías y ninguna tiene un ramo de Nardos, recuerdo que hay una por el norte de Bogotá que siempre tienen en existencia, le hago señas a Sergio para que corte la llamada, ya que le están ofreciendo girasoles, cuando lo hace se queda con cara de circunstancia

- La chica que me estaba atendiendo me dice que llegan la próxima semana, yo pienso que podríamos esperar – me quedo callada y no, no puedo esperar hasta la semana que viene, así que relajo mi rostro o trato de hacerlo –

- No, yo conozco un lugar en el norte que siempre hay Nardos, ¿yo no te comenté que trabajé ahí por un tiempo? - asiente –

- Si, me comentaste y cuéntame ¿Por qué dejaste de trabajar ahí? – me sonrió y siento a cebolla en mi regazo y lo empiezo a acariciar –

- ¿Quieres que te diga la verdad o lo que le digo a todo el mundo? – se sonríe con malicia –

- Quiero las dos versiones – me carcajeo –

- Yo le digo a todo el mundo que fue por que se me acabo el contrato, pero la verdad verdadera fue que ... teníamos un cliente habitual, siempre regalaba rosas rojas, pero esos arreglos iban para direcciones diferentes y pues ... confundí las tarjetas

- Espérate ahí, Constanza – se carcajea - ese cliente tenía una amante o algo así

- Sí, lo que hacia era que enviaba ramos de flores a la esposa y a la amante, lo que se diferenciaba eran las tarjetas y confundí todo y pues el resultado fue ... que me echaron ya que el señor llego furibundo a la floristería ya que la tarjeta de la amante le llego a la esposa – nos carcajeamos –

- Eres un caso Constanza

- Lo peor es que no me quieren ni ver en la floristería, así que te toca hacer el pedido a ti

- Enseguida llamamos

Logramos comunicarnos con la floristería y como lo había dicho si había nardos, algo costosos; 2 horas después llego el mensajero de la floristería, me escondí por que el me hizo mucho bullying después del incidente.

Las observé y olí hasta más no poder, es un ramo de 12 flores, eso quiere decir que debo escoger bien esas personas.

Nos decidimos por ir a una plaza del centro de la ciudad, porque el grosor de las personas es abundante en esa zona, desde que salimos de la casa hasta que llegamos no pare de pensar que les iba a decir al momento de entregarles la flor.

Tan pronto bajamos del auto empecé a ver a las personas, iban y venían sumidos en sus pensamientos, empezamos a caminar y nos adentramos a la plaza, ver tantos rostros me abrumó intente retroceder y me tope con el pecho de Sergio al voltearme a verlo me sonríe y con un movimiento de cabeza me insta a seguir

Recordé que hoy me dije que debía sonreír así que con una sonrisa en los labios empecé a caminar por la plaza, Sergio se quedo en un punto donde me veía, según él está modo "protector", noto que me hace señas hacia una pareja de ancianos camino hacia ellos y con una sonrisa en los labios me acerco y les digo "Que viva el amor" la señora me sorprende y me regala la sonrisa mas sincera y bella que hasta ese momento había visto.

Después veo una chica con cara de frustración, quizás perdió su empleo o la dejo el novio, así que me acerco hacia ella y le digo "todo pasara, vendrán días mejores" su respuesta fue una amplia sonrisa

Sigo caminado y me llama la atención una pareja, en realidad ellos resaltan en la plaza, por que ambos son de tez blanca y él chico tiene los ojos azules mas hermosos que he visto y ella una chica hermosa, vienen caminando en mi dirección, la mirada de ambos es de tristeza como si les hubieran dado una mala noticia, así que me encamino hacia ellos y les digo

- Que bella pareja ... - les entrego una flor de Nardo – Luz a su vida

- ¡Gracias! – me contestaron al tiempo e inmediatamente su mirada se ilumino –

Les sonrió y sigo buscando parejas, cuando ya he caminado bastante me volteo a ver por donde van y me topo con ellos que están viéndome, sonreímos y seguimos nuestros caminos

Ya entrada la noche termine de entregar la última flor de nardo, estoy exhausta y de camino a la casa lo hice en total silencio, al llegar nos recibe un ronroneador experto, lo tome en brazos y me lleve hasta el sofá