Una Dama Como Cenicienta

Capítulo XI

Ethan paseaba por las calles de Londres cuando diviso el carruaje de su prima fuera de una tienda de vestidos.

-Hola Naomi.
-Hola primo -dijo Naomi dándole un abrazo a su primo.
-¿Como te fue en tu viaje?
-Bien, mi amiga y yo paseamos por muchos lugares y traigo nuevos vestidos que son encantadores.
-Si traes nuevos vestidos, porque estas en esta tienda.
-Por qué antes del viaje había encargado unos y vengo a recogerlos.
-Bueno, pero no crees que ya tienes mucha ropa.
-Por supuesto que no primo. Por cierto ¿Traes carruaje?
-No, estaba por rentar uno.
-Porque no te vienes conmigo.
- ¿Hay espacio en el carruaje con todo el equipaje que llevas?
-Hay primo eres muy gracioso, por supuesto que hay espacio.

Al llegar a Salisbury, Naomi saludo con entusiasmo a sus padres y les platico todo lo que hizo en la casa de verano. Al día siguiente fue a visitar a sus amistades para conocer las ultimas noticias que se rumoraban por todos los nobles.

-Hola Naomi, que gusto verte 
-El gusto es mío Sophia, ya extrañaba la ciudad.
-Si, fue extraño que viajaras a último momento.
-Lo sé, pero mis padres querían que tonara unas vacaciones. 
-Está bien, ¿Quieres un poco de té?
-Claro. ¿Y qué ha pasado en estas dos semanas? -Dijo Naomi después de darle un sorbo a su té.
-No mucho en realidad, Amelia Johnson se casa con un mercader y se rumora que está embarazada.
-Vaya, eso sí que es una gran notica.
-Lo sé, parecía muy seria y estirada y con esto ni ha salido de su casa
-Pobre Amelia, la ha de estar pasando mal.
-Tal vez, pero creo que se lo merecía -dijo Sophia tomando un poco de su té.
-¿Y qué más ha pasado?
-A parte de lo que paso con Amelia, se rumora que un gran noble regresa después de muchos años de estar en el extranjero.
-Eso si es interesante, y ¿Sabes de quién se trata?
-No, pero mi padre dice que es pariente de la familia real.

***

Ariana regreso contenta a casa de su hermana y estaba entusiasmada por conocer a sus nuevos sobrinos.

-Ariana me alegro de tu regreso.
-También yo querida hermana, ya quiero conocer a tus pequeños.
-Me temo que será más tarde, en este momento los bebés duermen una siesta.
-Está bien, supongo que los conoceré más tarde, mientras te haré un pastel, ¿Estás de acuerdo?
-Claro, eso suena delicioso.
-Bueno, entonces en un rato nos vemos.

Ariana bajo a la cocina y en trayecto saludo a los trabajadores que servían a su hermana y su esposo, algunos se encontraban platicando ahí mismo y se alegraron de verle.

-Ya la extrañábamos por aquí señorita -dijo una de las cocineras.
-Si, sus hermanas son horribles -dijo una de las jóvenes que ayudaba a su hermana.
-Jessia eso no se dice -dijo Mía el ama de llaves.
-Perdón señorita.
-No te preocupes Jessia, se cómo son mis hermanas.
-Si, pero es forma de expresarse -volvió a decir el ama de llaves.
-Está bien -dijo Jessia avergonzada.
¿Y a qué ha bajado señorita Ariana?
-Vine a prepararle un pastel a mi hermana.
-Eso es muy lindo de su parte, pero una noble no debe cocinar, eso no es bien visto por la sociedad -dijo Mía.
-Si, pero a mí me gusta cocinar y quiero que sea un detalle para mi hermana.
-Está bien señorita, la dejamos para que le prepare el pastel a su hermana.
-Muchas gracias.

***

Ariana estaba encantada con sus sobrinos, le gustaba pasar tiempo con ellos y leer algunos cuentos a la hora de tomar una siesta, algunas veces le ayudaba a su hermana a dormirlos o bañarlos. Por sus tardes libres seguía bordando y tomaba clases de piano, si no hacía alguna de estas actividades pedía prestada una novela romántica a su hermana y salía al jardín a disponer de su lectura, en otras ocasiones les pedía a las cocineras que la dejaran hacer la comida. Disfrutaba mucho vivir en Witley Court.

***

Lady Michelle estaba a poco de dar a luz y su esposo cada vez era más cortante con ella, solía llegar y encerrarse en su despacho hasta la hora de la cena, extrañaba la casa de sus padres y la compañía de sus hermanas.

Debido a que era una dama de sociedad y estaba en reposo por su embarazo Lady Michelle se pasaba las tardes bordando y tejiendo para el bebé que venía en camino.
 



#31758 en Novela romántica
#20198 en Otros
#1485 en Novela histórica

En el texto hay: hermanas, baile, inglaterra

Editado: 09.03.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.