Capitulo 9.

Han pasado más de quince días y Emely no se ha inmutado a escribirle a Dani, para ella es algo normal, las personas se cansan de su carácter tarde o temprano.

Danilo no la conoce del todo, pero solo ella y los que están a su alrededor son testigos de su mal genio, además varios vecinos en ocasiones han llamado a la policía por las borracheras de Emely.

La alarma suena y la Emely mal humorada como de costumbre se despierta ¿En algún momento habrá algún cambio? ¿Llegará a ser feliz algún día?

Realiza su rutina matutina y luego se dirige al trabajo.

ㅡ Deberías comprarte un auto ㅡ habla uno de los gemelos a sus espaldas

ㅡ ¿Quieres hacer los honores de comprarmelo? ㅡcontesta de mala gana.

Sin esperarlo le planta una tremenda cachetada en su mejilla izquierda.ㅡ Aprende a tener modales mal educadaㅡ Después de esto desapareció por los pasillos de la casa.

Lo que nunca su padre se ha atrevido a hacer, su hermano lo acaba de ejecutar.

Los familiares de Emely en ocasiones se olvidan de su presencia. Lo cual ella ha lo largo de su vida a tomado rumbo diferentes, ellos siempre quieren que siga la misma monotonía, sin embargo ella se hace en pie y sigue sus instintos.

Sonó un gran portazo, las lágrimas que tanto había guardado durante años, que ha reprimido aquellas de dolor y amargura caen a mares por sus mejillas.

Emely sin darse cuenta quedó dormida. Una vibración de su teléfono hace que despierte, al abrir sus ojos vino como una película en su mente de golpe todo lo que sucedió en la mañana. Y tal vez sera su jefe que le llama para preguntar ¿por qué? Ha faltado a su puesto hoy. A su izquierda el reloj arriba de la mesa de noche marca las 7:00 h de la noche.

ㅡ¿Quien diablos será? ㅡdice un poco adormilada.

Varias veces Em se tallo los ojos y uno que otro bostezo soltó.

ㅡ Hola, ¿Cómo estás?ㅡ escribe Dani.

¿Que como estaba? Pensó al ver el mensaje en la pantalla blanca, rebuscó palabras para no dar a notar como realmente se siente.

¿Deberia confíar? Se cuestiona otra vez,debería confíar en alguien conoció hace apenas varios días.

Pero está persona extraña, ha logrado lo que nunca nadie ha hecho, ni su propia familia.

Este chico en los pocos días que llevan conociéndose, se ha preocupado por Emely. Ha demostrado el interés en el bienestar de la misma. Algo que a Emely le ha hecho falta muchos años, su familia le da lo mismo si come o no, sin embargó, este chico se preocupa por lo más mínimo con ella. Emely no sabe como reaccionar, le da lo mismo ya que es la costumbre. Lo normal en ella es que nadie le importa como está ni como se siente, se ha acostumbrado a no tener amistades porque todas a la larga o corta se marchan.

ㅡ Bien y tú? ㅡ contesto.

Procedió a hacer algo loco, le marco al signo de llamada. Nunca se le había ocurrido hacer esto, pero ya que no pierde nada intentando algo nuevo.

Suena 1...2...3... Veces al tercer timbre se escucha su voz, la voz de Danilo, en ese momento por primera vez sintió una paz que la embargo, escuchar esa voz le calmó un poco la tormenta que hay dentro de ella.

ㅡHo...Holaㅡ dice con un poco absorta y sorprendida.

ㅡTienes una voz angelicalㅡdice Danilo.

Emely a pesar de tener una familia amorosa y cariñosa, sin embargó con ella no es lo mismo. Dentro de ella acampa una tormenta.

Tantos años ha llevado calmarla, nadie la entiende, pero tras escuchar esa voz de Dani sintió paz y calma.

Pasaron las horas como un santiamén, cuando Em empezo a ver la hora en su reloj marca las 4:30 h de la madrugada.

ㅡ¡Rayos, Dani lo siento! Se me hará tarde para dormir una pequeña siesta.ㅡ dice Emely.

ㅡNo te preocupes, gracias por el rato lo necesitaba, por más momentos escuchando tu voz ㅡ contesta tras el micrófono.

Emely con buen ánimo corta la llamada. Se duerme un rato, a las 6:00 suena su alarma.

Con alegría y felicidad, como nunca antes visto realiza sus quehaceres matutino.

Los demás integrantes de la casa se miraron entre sí con el ceño totalmente fruncido, pero uno de los gemelos aún tenía un poco latente el enojo del día anterior.

ㅡ¿Estás bien hija?ㅡpregunta clariel, su madre, ella es parte también de la amargura que Emely vive día a día, nunca le ha aconsejado como madre, una que otra vez de pequeña, sin embargó clariel cree que Emely hace todo por puro capricho y niñerias.

ㅡ Si, perfectamente ㅡ contesta seca y continúa con lo suyo.

La noche anterior no les escucho llegar debido a lo ocurrido, pero no le da cabida a aquel pensamiento, como hoy está de buen humor lo deja pasar.

Al llegar al trabajo tomó su puesto,quitó la placa de "no disponible" cada llamada, cada persona que se acercó a su puesto le trato de una manera pacífica y presentable.

Todos en la empresa la miran de manera extraña y confusa. Unos que otros comenzaron a murmurar.

ㅡ Emely, ¿Cómo estás? Solo quería invitarte a tomar algo con los chicos ¿Vienes?ㅡ dice su compañero Jonathan un poco dudoso.

ㅡEstá bien, solo me mandan la locación.ㅡ contesta.

El chico al escuchar su respuesta se queda atónitoㅡ de... Acuerdo ㅡ tartamudea.

ㅡ ¡perfecto! ㅡ contesta ella con un pequeño atisbo de una sonrisa.

Emely volvió a lo suyo pero un llamado de la oficina de su jefe le pone la piel de gallina.

ㅡ¿Me llamo?ㅡpregunta nerviosa y sin pensar las palabras que salen de sus labios.

ㅡSi, quiero que usted dirija un grupo nuevo que viene del exterior, quiero las mejores atenciones para ellos.

ㅡPero...ㅡ pronuncia en un pequeño susurro.

ㅡ Nada de peros, usted es la encargada, conoce la empresa y nuestros mejores servicios a clientes ㅡ dice fuerte y firme.

A Emely solo le quedó escuchar y aceptar todo lo que su jefe le indica, está nervios en aquella silla de hierro.

Lorelight~