Capítulo 12

Frente al espejo se encontraba una chica que estaba segura de que era yo. Pero diferente. Con un matiz salvaje. Con una huella de seguridad.

La seguridad que me salía en instantes específicos y aunque este no era uno de ellos. Estaba feliz porque sabía que era natural. Porque en efecto estaba hermosa.

Con mi cabello color ébano trenzado en la parte derecha y el cabello suelto hacia la izquierda. Con mi maquillaje sublime pero a la vez notable ya que mis labios llevaban un color rojo pasión.

Entonces me acerqué al espejo de cuerpo completo y vi mi cuerpo reflejado con el hermoso vestido rojo corto que poseía ese gran escote triangular que hacía que mi cuerpo se viera curvilíneo de una forma que me gustó ya que me hacía sentir empoderada y segura de mi cuerpo.

Sonreí con gran emoción.

—Vengan aquí y denme un abrazo— se acercaron y formamos un gran abrazo de oso que me hizo sentir en casa ya que cuando todos estábamos juntos me sentía así.

Entonces al separarnos los miré y ellos estaban igual o incluso mejor que yo.

Nicoletta llevaba un vestido verde azul que le llegaba un poco por encima de las rodillas. Tenía un escote en forma de corazón que le hacía resaltar el color de sus ojos. Llevaba el pelo suelto y alocado. Cosa que le sentaba bien.

Entonces le sonreí satiafecha. Me encantaba su estilo

Luego observando a Dexa le asentí en señal de que estaba complacida ya que ella pese a que llevara ropa de Nicole, llevaba su estilo propio. El cabello recogido en una coleta alta acompañado de su habitual flequillo. Llevaba un pantalón de cuero negro al estilo rockero junto con unos tacones azules de doce centímetros y su blusa era del mismo azul oscuro, con encaje.

—¿A mi no me mirarás?— bromeó Ioan y yo le sonreí ante sus ocurrencias.

— Tonto. Luces muy genial y sexy— agregué entre risas aunque en efecto. Tenía razón ya que el chico se encontraba muy guapo con su camisa blanca que le moldeaba todo el torso y su pantalón de vestir que aunque le daba un aspecto formal a la vez le hacía ver informal y aquello era atrayente. Aunque yo no le veía de esa forma.

—¿Estamos listos?— preguntó Dexa entusiasmada mirándonos a todos con una emoción que estaba segura se debía a que ella al igual que yo, no había tenido mucho tiempo libre para disfrutar como era debido. Puesto que toda su vida siempre se había resumido a las leyes del palacio y ahora que estaba fuera de el podía tener un poco de tiempo para si misma.

—¡Nacimos listos!— gritamos todos emocionados por lo que se venía. Fiesta y un lugar donde no tendríamos que usar tapaderas ya que ahí estaríamos rodeados de personas a quienes no les importaba nuestra identidad.

(...)

Una vez llegamos al lugar. El chófer de los Ashford estacionó e Ioan bajó primero para darnos la mano a las chicas al bajar, como todo un caballero.

Cuando tocó mi turno le sonreí y le agradecí ya que en ese instante estuve a punto de caer pero el lo evitó.

Entonces miré hacia el frente y lancé un pequeño gritito de la emoción ya que frente a nosotros se encontraba el Karaoke-Bar "Royal" y aunque aun no había entrado sabía de lo exclusivo que era tan solo con ver hacia la larga fila que esperaba para entrar. Una fila llena de personas influyentes o al menos los hijos de estas personas.

De pronto mis amigas me tomaron de las manos y nos dirigimos a la entrada y nos colamos así como si nada—supongo que nuestras influencias ayudaban— haciendo que muchas personas despotricaran a nuestro alrededor molestos por nuestro "privilegio" ya que estaba segura de que en parte tenían razón. Ellos estaban esperando desde mucho antes.

Al entrar me quedo boquiabierta. El lugar es muy grande. Todo en neón y luces espectaculares en tonos verdes y azules. Se dividía en dos lugares ya que en uno estaba la amplia pista de baile y en el otro un karaoke donde la gente se encontraba cantando a todo pulmón y disfrutando de la noche.

Me sentía muy emocionada por probar todo lo que tenía que ofrecer este lugar ya que durante mucho tiempo no había entrado a un lugar como este.

Mis amigos, sin prestarle atención al mundo me guiaron hacia la zona del bar para pedirnos unas bebidas y aunque en un principio me negué al final terminé accediendo gracias a lo convincente que podía ser Dexa.

— ¡Te pediré una bebida misteriosa!— me anunció Ioan por encima de la música, más yo le miré sin entender nada. No obstante Nicole se percató de esto y procedió a explicarme.

—Todas las noches hay una bebida misteriosa que sabe genial. Es el alma de este lugar.

—¿ Qué contiene? — pregunté dudosa y ella solo se encogió de hombros indicándome que no tenía ni la más remota idea.

—Nadie sabe. ¡Solo sabemos que están buenísimas!— me explicaba Dexa con notable emoción. Así que decidí confiar en sus criterios y una vez nos dirigimos al apartado VIP donde se encontraban las mesas, me senté y acepté la bebida.

Era de un color azul oscuro un poco desteñido abajo y aunque era notable el sabor a alcohol se dejaba lucir un delicioso sabor afrutado.

— ¿A qué está buena?— preguntó Ioan quien también se encontraba concentrado en su bebida.

Así que con el delicioso sabor en la boca decidí seguir disfrutando. Lo que hizo que terminara por haberme bebido tres copas. Pero lo que nadie me había advertidido era lo fácil que podía embriagar esta bebida y para cuando me di cuenta ya era demasiado tarde pues de pronto observé como cambiaba el aire a mi alrededor y Harry hacía acto de presencia en el bar.

Entonces miro a Dexa,quien estaba distraída mirando a ninguna parte en especial, y le llamo con la mano frente a sus ojos.

Al observarme se me queda mirando sin entender el por qué la llamo. No obstante yo señalé hacia el punto donde estaba Harry pero al no encontrarse el ahí mi amiga no entendió.

El maldito se había ido a alguna parte.

Pero como yo era Ava Tracey, tenía unos tragos de más y a mi nada se me escapaba decidí levantarme a toda prisa. Cosa que hizo que mis amigos se alarmaran.