—Bueno les parece si pasamos a la mesa a almorzar—Menciono Katherine.
—Vayan ustedes, yo tengo asuntos pendientes que hacer—Comento Nicholas.
—No te desgastes mucho—Comento la reina dándole un pico en la mejilla.
—Tranquila madre—Menciono el príncipe.
—Cuando me encuentre con Jeffrey le diré que te lleve el almuerzo al despacho—Comento la reina.
Me mordí el labio por dentro, la tenía se demoraría un rato encontrarlo, yo mejor no esperaría verlo por un rato, porque dudó que salga tan rápido de esa habitación.
—Disfruta la comida, nos veremos más tarde—Dijo mirándome a los ojos.
¿Será que me lo está diciendo a mi?, Hasta la pregunta es tonta, pero que más podía hacer, así que solo asentí levemente porque mi lengua estaba enredada en mi garganta y no quería salir.
El príncipe hizo una media sonrisa divertido y camino de regreso por el pasillo, dejándome completamente rodeada por su familia, aunque no me sentía incómoda, solo estaba incómoda si recordaba lo que había visto hace un momento.
El almuerzo estaba transcurriendo con normalidad, la reina seguía esperando que Jeffrey viniera para decirle que fuera a llevarle el almuerzo a Harry, pero el no aparecía y como hacerlo sí estaba ocupado con el mismísimo Harry en una de las habitaciones haciendo quien sabe que cosas.
—Buenas tardes, familia—Artículo Harry acomodándose la corbata mientras entraba.
—Hijo, pensé que estabas muy ocupado—Dijo su madre viendo como se sentaba.
—Sí, pero preferí dejar de un lado mi trabajo para cenar con mi familia y mi futura cuñada, ¿Verdad, Tania?
Yo desvié la mirada bastante avergonzada, se estaba burlando de mi, porque el sabía que los trámites del divorcio no se demorarían en empezar y el se estaba encargando, además esa boda no se realizará, solo es una cuartada para justificar las imágenes que existían del príncipe y mías, aunque el rey me había dicho que podía hacer que esa boda se hiciera, pero la única manera es enamorando al príncipe y yo no sabía cómo hacerlo, pero si fracasaba en el intento la que terminaría enamorada sería yo, mucho más de lo enganchada que ya estaba con el, así que no sabía si era lo correcto o no.
—Mentiroso—Comento Jena y el solo sonrió.
En ese momento entro Jeffrey robándose la mirada de Harry y yo no pude evitar sonrojar con solo pensar en lo que posiblemente estaban haciendo. El se paró enfrente de la reina.
—Su majestad me dijeron que me necesitaba—Comento.
Se veía que estaba alterado, Harry tenía una sonrisa de victoria en la cara mientras su hermana solo lo miraba con reproche, el resto estaba completamente ausente de lo que pasaba, ¿Podía ser que ella supiera lo de su hermano y Jeffrey?, Podía ser, puede que todos lo sepan, como puede que solo pocos lo sepan.
—Jeffrey por favor, mira si le llevaron el almuerzo a mi marido a su despacho y si también a mi otro hijo le llego—Jeffrey asintió.
—Con su permiso, su majestad—Comento.
El se dio la vuelta y salió rápidamente sin decir ninguna palabra, Harry no le quitó la mirada hasta que ya no lo pude ver más y podía saber que se estaba divirtiendo mucho con la situación.
—¿Me pareció o se acaba de bañar?—Artículo Harry.
—Tal vez, déjalo, si quería darse un baño lo pudo hacer—Respondió Jena sería.
—¿Donde estaría? —Pregunto la reina.
—Bañándose madre, no vio que estaba mojado—Respondió.
Yo lo miré un poco incrédula y Harry me vio, no podía creer que se estaba burlando de lo que tal vez el hizo, porque si se había demorado un poco y respecto a lo que vi dudó que sea para mirar papeles.
—Bueno, come, la comida se enfriará—Comento la reina.
El asintió y todos seguimos comiendo hasta que pareció que se acordó de algo y comenzó a hacer nuevas, mientras trataba lo que tenía en la boca.
—Tania, analizando tu expediente, pues... ¿Por qué te despidió tu jefe?
Casi me atragantó cuando escuché su pregunta, no podía tocar otro tema, menos, inmoral, porque si era cierto que ese día el me despidió por cabrón, por viejo verde, pero, ¿Sería necesario contar ese pequeño incidente?, Puede que ya sepa lo que pasó o puede que mi despido sea muy extraño, pero el se intentó aprovechar aunque yo no lo deje y termine desempleada y mal pagada.
—Algo sin importancia—Respondi encogiéndome de hombros para quitarle importancia.
—Pero bueno si es verdad que llevar toda una semana tarde al trabajo y seducirlo es algo mínimo, depende del tiempo.
¿En serio pudo eso?, Si es verdad que a veces llegaba tarde, pero no fue por eso que me despidió, claramente no lo fue.
—En parte es mentira—Dije sin mirarlo.
—¿Cuál fue el motivo?—La voz de Nicholas me sorprendió.
Levanté la cabeza y lo vi en la gran puerta con cara sería, no sabía cuánto tiempo llevaba ahí parado, pero tal vez lo suficientemente para pensar que soy una impuntual y tal vez trabajar no sea lo mío.
—Sí, ¿Por qué lo hizo?—La voz de la reina llamó mi atención, pero fue por poco tiempo, porque luego regrese mi mirada a esos ojos grisáceos.
—Porque no me quise acostar con el—Susurre en castellano.
—¡¿Por qué?!—Grito casi todo la mesa, mi príncipe tenía semblante serio y la reina no decía nada.
Ahora sí me sentía un poco apenada, no me gusta revelar muchas cosas y contar que mi jefe me pidió sexo a cambio de mi trabajo.
—Será imbe...
—¡Katherine!—Grito la reina al ver lo que estaba a punto de decir su hija.
—Perdón, madre—Susurro Katherine avergonzada.
—¡Nicholas!, Hijo decidiste venir a comer con nosotros—La reina cambio de tema rápidamente.
—No, madre, veía a ver si Tania ya había terminado de comer para hablar con ella—Comento.
—¡Oh!, Llévatela, no hay problema, Tania ya termino, ¿Verdad?
Yo miré mi plato y me había comido solo la mitad, no sabía qué decir, pero sentí un pequeño golpe en mi pie y miré a la reina que me hacía señas de que fuerza.
Editado: 31.05.2024