Una Reina Para El Principe

Capítulo 40

 

Mientras nos acercábamos  se podía ver tres figuras masculinas afuera de la catedral, cada segundo que pasaba pude identificar a cada uno de ellos: mi padre, el rey y mi Nicholas.

—Impaciente—Susurro Harry cuando el carruaje se estacionó.

El padre de Nicholas le dio un golpecito a él en el hombro y Nicholas  se acercó, el cochero abrió la puerta y el estiro la mano para que me bajara.

En eso la pequeña se acercó y saltó encima de Nicholas, él la agarró y miró extrañado a todos lados.

Harry y yo nos reímos un poco.

—Príncipe—Dijo la nena abrazándolo.

Yo me levanté y me pare en la puerta, Nicholas me miró de arriba abajo y yo sonreí un poco, me estiro la mano y yo se la acepte bajando lentamente.

—Te ves muy hermosa, amor—Menciono dándome un beso en los nudillos.

—Dejen tanta meloseria—Comento Harry bajándose.

Harry le quitó la niña a Nicholas y se fue con ella para la iglesia

—Ven, entre más rápido entremos, más rápido serás solo mía—Artículo.

Yo asentí y el me llevo hasta la puerta, luego le entrego mi mano a mi padre y entro en la catedral.

—Te ves hermosa—Comento mi padre.

—Gracias—Susurre

En ese momento comenzó a sonar la música nupcial, así que decidimos entrar, iba de un lado agarrada por mi padre y del otro lado agarrada por el rey.

La ceremonia fue un poco extensa, pero cuando se terminó, por fin me había convertido en la verdadera esposa del Nicholas, ya que Harry me había confesado que nosotros nunca estuvimos casados y que todo había sido un plan de él.

Sellamos en matrimonio con un suave beso, con un beso que hace dos semanas no tenía y que me encantaba sentir, cuando nos separamos el rey se posicionó en el podio.

—Todos los presentes y a todo el reino, gracias por asistir al matrimonio de mi hijo Nicholas y de mi querida nuera, Tania, ahora tengo una anuncio muy importante que hacer antes que mi hijo se vaya a su luna de miel—Comento el rey—. He decidido retirarme de mi cargo.

Todos los presentes se miraron sorprendidos.

Así que ese era el anuncio que el había mencionado

Mire a Nicholas y el me acaricia cara logrando que sonreirá y pegará un poco a él.

—El siguiente en el trono, sería mi hijo Harry, pero el decidió renunciar al trono hace varios meses que le mencioné sobre el tema, así que mi siguiente sucesor es mi hijo Nicholas.

Todos voltearon a ver a Nicholas, el miro al rey fijamente y solo asintió.

—Después de mi luna de miel, por favor—Susurro.

—La coronación será después, mientras tanto  seguiré en el trono, hasta que se efectúe dicha coronación.

Nicholas me agarró de la mano y empezamos a salir de la iglesia, cuando llegamos a la puerta cayeron un montón de pétalos de rosas, nos subimos al carruaje y nos despedimos de todos, empezando lo que sería nuestra luna de miel como su verdadera esposa.

Vi que donde estaba sentado Harry antes había una nota, la agarré y la miré.

Si mi hermano insiste en usar condón, se los he roto todos, así llegará el próximo heredero pronto.

Sonreí y me recostó a Nicholas mientras andábamos de camino al aeropuerto.

—Ahora no te compartiré con nadie, eres solo mía—Susurro dándome un beso.

Me sentía un poco mal, desde hace tres días que interrumpimos nuestra luna de miel, porque Harry sufrió una sobredosis por cosas que él no ha querido mencionar, pero hoy era el momento, yo quería saber cuál fue el motivo, pero lo que llevo al tanto de porque se metió a eso, tiene que ver con John, además desde que regrese, no le he visto ni siguiera y eso es algo muy raro, así que Harry tendrá que contarme lo que sucedió mientras nosotros no estábamos. Con paso firme camine hasta la habitación donde Harry dormía, tenía que tener claro, lo que iba a preguntar, no podía hacer mis preguntas si había más personas en la habitación, para hacer lo que hacer, necesitaba privacidad, fuera como fuera.

Cuando entre en la habitación, afortunadamente no había nadie aparte de Harry, apenas me vio me dedico una pequeña sonrisa, yo me acerque hasta donde estaba y me plante frente a su cama.

—Buenos días, querida mía, ¿Qué se te ofrece?

—Harry, ¿quiero saber que te paso?

El solo soltó un suspiro y me hizo una seña para que me sentara en la cama, yo le hice caso y me senté en su cama, lo mire fijamente y detalle cada cosa, no sabía cómo había pasado, ni siguiera sabia porque estaba tan demacrado, tenía unas ojeras muy grandes, sus ojos estaban hinchados y su piel estaba demasiado pálida, no tenía color, se veía acabado.

—Perdóname por arruinarte tu luna de miel, Tania —Susurro.

—Tranquilo...

En ese momento unas inmensas arcadas me invadieron por completo, me levanté de la cama y fui directo al baño de Harry.

—Tania

Fue lo único que alcance a escuchar antes de ponerme a vomitar en la tasa del baño, luego de un rato me levante y baje la llave del baño, me lave la boca y salí sintiéndome un poco mejor.

—Lo siento, creo que algo me cayó mal —Susurre sentándome otra vez en la cama.

—¿Te encuentras bien?, ¿Tienes algo? —Me pregunto Harry.

—No, tranquilo, yo estoy bien, solo fue algo que me cayó mal, nada más, lo que, si quiero saber, es porque lo hiciste, antes de irnos, me prometiste que dejarías de drogarte, que lo harías por John, pero, ¿no entiendo que paso en estos dos meses?

En ese momento Harry agacho a mirada y apretó sus manos, no sabía que había pasado, pero de seguro no fue algo bueno cuando él está así.

—El padre de John se enteró de lo nuestro... John me dejo, su padre casi lo mata a golpes, el se fue y dijo que nunca volvería, no quería vivir sin el, así que me introduje más en el mundo de las drogas, pero no controle todo y aquí estoy, no tengo ganas de vivir, no quiero ver a mi madre sufrir, ni menos a mis hermanos.



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En el texto hay: comedia, romance, plebeyos

Editado: 31.05.2024

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