Una tarde de lluvia

Capítulo 3

- ¡Celeste! ¡Celeste!
Grita Jessica desesperada, Celeste sale de su habitación
- ¿Qué sucede madre?
Pregunta bajando las escaleras
- Tu hermana.. Diane.. ¡Diane se suicidó!
Jessica rompe en llanto y Celeste la abraza
- Querida madre, te pido que no lo grites, han pasado ya 2 años.
Celeste la suelta y sale de la casa, se encamina a dónde debe ir, y sin ser nada nuevo pasa por el Sutter Bridge. Cómo eres costumbre, se detiene, recarga sus brazos en el frío barandal metálico y suspira.

- Querida Dianne ¿Sabías que ahora nuestra madre está más loca? Si continuo viva algún día terminaré como ella ¿Lo sabías? Será que tú ya estabas loca, y por eso te fuiste sin siquiera decir adiós..

Se aparta del barandal y sigue caminando, no pasó nada relevante después..

Regresa al lugar al que llama "Casa", entra y el ambiente se siente pesado, no hay ni un ruido, y Jessica no está a la vista.

- No otra vez..
Dice Celeste y va rápidamente al baño, la puerta tiene seguro, ella decide tomar un cuchillo y forzar la cerradura hasta que abre. Finalmente se escucha algo, las gotas cayendo rápidamente de la ducha, Celeste recorre la cortina y ve a Jessica en el suelo con las mangas de su suéter manchadas en rojo junto con una navaja al lado, quién sabe cuanto tiempo habría estado así. Celeste saca su celular para llamar a una ambulancia y empieza a dudar.. "¿Realmente debería hacer algo para salvarla otra vez? Quiere morir, debería dejarla que lo haga ¿No?" Se dice a si misma y sale del baño. Pasando 15 minutos regresa y se acerca a Jessica para revisar su pulso, este ya no existe, Celeste saca su celular y llama a una ambulancia, pasan otros 15 minutos y llega una ambulancia, Celeste abre la puerta.

- Es por aquí
Dice con "preocupación" y guía a los dos médicos que llegaron al baño, ellos entran.
- Ayúdenla, por favor
Ruega mientras se acercan a revisar el pulso, pronto se ve pesadez en la cara de ambos médicos, el que se había agachado se levanta y le dirige una mirada triste a Celeste.
- Lo siento..
Dice
- ¿Qué.. Qué pasa?
- No podemos hacer nada
Celeste logra que salgan lágrimas de sus ojos. Se llevan el cuerpo sin vida de Jessica, al pasar junto a Celeste ella siente como si algo la aplastara "Relájate, no hiciste nada malo" se dice en su mente.
La casa pasó a ser de Celeste ya que esta era mayor de edad, al igual que las pocas cosas que poseía Jessica.. "¿Por qué debería tener las pertenencias de una persona a la cual mate?" se pregunta, falto a clases 2 semanas. 

Vuelve a ir a clases, entra al salón y se sienta en donde siempre, Keyla se acerca

- ¡Buenos días Celeste!
Saluda
- Hola
Contesta Celeste
- Supe lo que paso, lo siento mucho..
Celeste asiente y Keyla sin saber que decir va a su asiento. Realmente a lo único que fue Celeste a clases era perder el tiempo, pues cada segundo estuvo perdida en su propio mundo, en sus pensamientos. "Eres increíble Celeste, una culpa más, una muerte más con la que cargar sobre tus hombros, ¿Vas a por la quinta?"

1.- 11 años, Madeline, mejor amiga de Celeste, muerte por atropellamiento.
2.- 15 años, Josh, padre de Celeste, accidente mientras conducía.
3.-  16 años, Diane, hermana menor de Celeste, suicidio.
4.- 18 años, Jessica, madre de Celeste, suicidio.
 

1: Celeste se culpa de haber distraído a Madeline, si no lo hubiera hecho Madeline habría seguido avanzando y aquel auto jamás la hubiera siquiera rozado.
2: Celeste empieza a molestar a Diane, el padre por querer separarla deja de ver el camino y choca con otro auto, no llevaba puesto el cinturón así que salió volando, no logran salvarlo.


Celesta sigue el camino de regreso al domicilio donde vivía, llega al Sutter Bridge, empieza a disminuir el paso, sosteniendo el barandal se pone lentamente de rodillas en el suelo, esto debido a que de la nada se sintió mareada. Pasa el mareo y se levanta, respira hondo y dirige su mirada al cielo, después recarga lo brazos en el barandal y suspira.

- Diane.. ¿Supiste lo que pasó? Si me ves desde algún lugar debes estar muy molesta conmigo ¿No es así? Pude hacer algo y no lo hice hasta que ella se fue de aquí, exactamente lo mismo que me paso contigo.. aún no logro entender por qué fue que decidiste acabar contigo misma.. ¿Será que realmente no tenías ninguna razón?
Celeste se para sobre el barandal
- Desde aquí.. es hermoso ver hacia abajo, y sentir el viento..- Cierra sus ojos y respira profundamente- tal vez..- abre los ojos- ¿Era para que estuviésemos todos juntos? No tendría problemas en saltar ahora mismo, ya no hay nada que deba cuidar.. Volaría segundos antes de irme..
Suspira nuevamente y abre los brazos

- ¿Celeste?
Celeste baja los brazos y voltea, quien la llama es Keyla
- Hola
Saluda Celeste y sonríe
- ¿Qué haces? Baja de ahí, es peligroso
- ¿Me estás diciendo que esto es peligroso?
Pregunta Celeste y pone un pie adelante, quedando con un solo pie en el barandal.
- Celeste, no hagas ninguna estupidez. No puedo comprender por lo que estés pasando, pero si me lo permites podría ayudarte.
- ¿Tienes el superpoder de regresar el tiempo?
- N-no
- Que lástima
Celeste se deja caer, pero no impacta contra el suelo, en cambio alguien la sostiene de la muñeca, ese alguien era Keyla que trataba de mantenerse fuerte para no dejar caer a Celeste. Keyla comienza a gritar pidiendo ayuda.
- Imbécil suéltame, ni siquiera somos amigas para que te preocupes por mi 
Dice Celeste forcejeando con su mano libre, Keyla niega con la cabeza.
- No te voy a soltar a menos que mis manos se desprendan de mi cuerpo.
Le dice sosteniendo más fuerte.. "Ya veremos"
- Suéltame o ayúdame a subir, me lastimas. 
Dice Celeste, Keyla hace su mayor esfuerzo para levantarla, Celeste con su mano libre se sostiene fuertemente del barandal y se levanta hasta cruzar el barandal, entonces Keyla la toma de los hombros.
- ¿Te encuentras bien? Te acompaño a tu casa
Celeste asiente con la cabeza, Keyla la suelta y comienzan a caminar, no pasa mucho cuando Celeste corre hacia el lado contrario para subirse al barandal nuevamente, cuando Keyla logra reaccionar e intenta agarrarla nuevamente ya es tarde, Celeste ya está cayendo.
Así el último integrante de una pequeña familia también ha fallecido, y lo único que quedó fue aquella libretita en la que solía escribir.      




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