Prólogo.

☆゜・゜ ゜SHARON・゜★

—¡Espera, no te marches así, no me dejes aquí! ¡Déjame  explicarte todo!—Papá corrió tras de Aurora, y cerró tras él la puerta, no logré alcanzarlos así que intenté mirar por la ventana lo que sucedía.

Mi papá era un hombre muy bueno, no se había dado cuenta que la bruja de Pia era muy mala, pero Aurora sí, y me dijo que no debíamos confiar en ella, ella era mala. Y fue mucho más mala cuando llego a besar a mi papá en frente de Aurora y dijo que tendria un bebe de mi papá, ella no me quería, siempre decía que yo era una niña llorona y que por mi culpa mamá había muerto, era mentirosa y no la quería cerca de nosotros.

Cuando logre mirar por la ventana pude verlos, Aurora lloraba mientras golpeaba el pecho de papá y este simplemente la abrazaba con una cara triste, ellos se querían, no podía dejar que Aurora se fuera, ella era la persona que estaba buscando, ella era mi futura mamá, me queria a mi, y queria tambien a mi papá, me cuidaba cuando me enfermaba, me llevaba al parque y cantaba una canción para mi en los días lluviosos.

Corrí hasta mi habitación y busqué la caja que había estado formando desde días atrás, era mi regalo de navidad para ellos, pero ahora, iba a usarla para hacerlos felices. Entré a la habitación de papá y busqué el anillo que tenía guardado en su cajón y corrí de nuevo a la ventana.

Acerqué la silla hasta que me diera la altura necesaria para saltar por ella y con caja en mano hice mi acrobacia. Me caí un poco mal, me dolió el brazo, pero eso no importó, cuando me levanté del piso ninguno de los dos estaba en el pasillo. 

Mire a mis pies mi pequeña caja desarmada, había caído sobre ella y había roto mi regalo. Me dejé caer de rodillas mirando mi regalo, todo estaba mal, ella se iba a ir y no podría tener una mamá. 

—¿Por qué? —pregunte llorando.

—¿Qué pasa mi cielo? —Aurora y papá llegaron a mi lado, ambos tenían cara de preocupados y también estaban llorando.

—Se rompió.

—¿Que se rompió cariño? —abracé a Aurora y dejé que mis lágrimas cayeran en su ropa.

—Rompi mi regalo y ahora no te vas a quedar.

—¿Por qué piensas eso?

—Por qué la bruja dijo mentiras y tu ya no quieres a mi papá, y tampoco a mi.

—Cielo, yo te amo a ti, y a tu papá también —limpie mis lágrimas con una mano, —déjame ver tu regalo cariño.

—Es que está roto.

—No importa linda, cualquier cosa que venga de tus manos será un tesoro para mí —sonreí y nerviosa tomé la caja de regalo y el anillo de papá.

—Papi, ¿Puedo hacerlo? —pregunté mirando a papá, este me regaló una media sonrisa y me asintió con la cabeza.

—Hazlo florecita. —Me giré y me quedé mirando fijamente a Aurora con el regalo apretado en mis manos. Solté el aire de forma brusca y solté las palabras que llevaba tiempo queriendo decir.

—¡Vecina, ¿Quiere ser mi mamá?!