Winny, el gato feliz

『Capítulo 5』

Mi nombre... ¿cómo surgió?
La historia es la siguiente.

La mujer de cabello ondulado estaba pensando en un nombre para mí mientras preparaba una sopa en la cocina. Una cocina que, para mí, parecía inmensa. Desde el suelo la observaba moverse entre los ingredientes. En ese momento, ella decía:

—¿Cómo te llamaremos? —murmuró, mientras tomaba unas zanahorias lavadas.

Las cortaba en cuadros sobre una tabla de madera.

—¿Qué nombre te gustaría? —me miró, como esperando una respuesta.

Yo la observaba, pero más por curiosidad sobre las zanahorias. ¿Me daría un poco? ¿Serían sabrosas?

—Naranja —dijo el humano de menos edad, después de darle un sorbo a un vaso de café.

—No, no... algo más corto —respondió la mujer, pensativa.

—Orange —comentó el hombre nuevo, que también estaba allí.

—Dije que no. Debe tener un nombre corto, de dos sílabas, y que termine con "y" —afirmó la mujer con seguridad.

Entonces, la chica más joven se acercó a mí. Me levantó del suelo y me sostuvo entre sus manos, abrazándome con cuidado. Sus dedos acariciaron mi pata izquierda, mientras sonreía.

—¿Winny? ¿Qué tal Winny? —dijo, mirándome con dulzura.

La mujer ondulada y el chico del café se miraron entre sí. Las zanahorias seguían quietas sobre el mesón. Hubo un breve silencio.

—Tiene la "y"... también las dos sílabas. ¿No les parece hermoso? —insistió la joven—. ¿A que sí? —me preguntó, mirándome directamente.

—Winny.

—Winny —repitió la mujer, esta vez con una sonrisa.

Winny.
Aquella pequeña reunión en la cocina fue el momento en que se eligió mi nombre.

Winny, de dos sílabas y con "y" al final.

Así que, estimado lector, he de decirte que en este capítulo... ya tengo nombre.
Mucho gusto contigo.
Me llamo Winny. Soy un gato. Y esta es mi historia.




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