Capítulo 3

Dos días después de mi llegada, de conversación breves y no muy cómodas, ya empezaba a conocer la estancia. Me agrado la cocinaera Cristal, quien si podías tener una conversación larga y estendida hasta que llegaba mi tía. Resulta que igual que yo no tenia a donde ir al llegar a este país hace cinco años y por coincidencia había chocado con mi tía en el pueblo quien para mi sorpresa le brindo ayuda.

También supe la razón por la que William, mi primo no se encontraba por aquí. Al parecer habían tenido una fuerte discusión con mi tia y se había marchado con su nueva novia.

El jardinero también resultó ser muy simpático, un hombre alto de cabello castaño con un poco de canas. Al igual que Cristal también se podía conversar con él. A él si no le pude sacar mucha información. El solo hacia su trabajo y no le interesaba los asuntos de la familia.

Por la mañana al bajar por las escaleras, me detuve de golpe. Sentado en el sofa de la entrada, parecia ser que estaba William con un libro en la mano y con la otra se bebia una taza de lo que supuse que era cafe.

Dios esta enorme y guapo.

Al notar mi precencia, saludo con un gesto de cabeza sin mas.

-Hola...- estaba diciendo cunado apareció mi tia.

-Oh querida ya has conocido a Lucas- es la primera vez que me dice querida desde que llegue aqui y se la ve tan contenta- Es el amigo de Wiliam, es como de la familia.

Al llegar ella a nosotros él se pone de pie y yo doy dos pasos atras, el chico era casi dos metros de alto. Su cabello castaño bien cortado y un fisico soñado como de entrenador o iba mucho al gimnacio.

- Hola Diana- la saluda con un beso en la megilla- es bueno volver a verte.

se da vuelta hacia mi y sonrie.

-Tu debes ser...la prima perdida de Wiliam- dijo él, mirandome con unos ojos claros que me obligaron a parpadear tres veces antes de contestar.

-Soy Ema, un gusto.- respondí.Me disculpo y me voy hacia la cocina.

Alli me encuentro con Cris, quien esta haciendo el desayuno. Mi curiosidad sale a flote y le pregunto a ella que sabe sobre el.

-Bueno no se mucho- contesta- se que son amigos de toda la vida y el se a tenido que ir a principio de año porque su madre habia fallecido.

-Oh, que lastima- murrmuro.

-Es un chico reservado, a mi parecr misterioso- se rie- nunca lo hemos visto con nadie.

-Si es amigo de Wiliam, no debe de ser muy simpatico.

-Que dices, Wiliam es un encanto. Lastima que no es entendido por tu tia.

-Bueno, no cuando yo lo conocí- respondi, luego lo pense y considere- bueno supongo que crecimos y cambiamos.

A los cinco minutos aparecio mi tia en la cocina, ya no llevaba la sonrisa de hace rato, volvia a ser ella.

-Cristal, preparame una taza de té verde- ordenó y me miro antes de hablar- haberte ido sin mas ha sido una falta de educación ante la visita.

-Perdón- me diculpe- senti que sobraba.

- De todos modos, Wiliam a llamado y prometio venir esta tarde con su...- se tomo un momento antes de seguir- su peculiar novia. He invitado a Lucas y cenaremos todos juntos para conocernos y presentarte.

- Se siente como si me estuvieras adoptando- reí

Bajo la taza y contesto sin mirarme.

-Espero hacer mas por ti de lo que tu madre ha hecho en estos años.

-Mi madre ha hecho mucho por mi- respondi con un tono un poco brusco.

-No lo suficiente- se limito a decir.

Nunca le habia preguntado a mi madre cual habia sido el motivo de habernos ido de este pueblo y porque no se llevaba muy bien con su tia. Al igual que tia Diana ella era breve en este tema cuando se le mencionaba. Habia algo que tarde o temprano iba a tener que saber. Tambien entendia que mi madre era una persoona muy liberal y por eso siempre chocaban sus caracteres. Tambien entendia que por eso mi vida no habia sido muy estable, pero siempre hizo lo que pudo conmigo como madre soltera, eso hacia que me sintiera sin obligación de reprocharle nada.

Tampoco podia enojarme con mi tia, no conocia su histria y porque parecia estar tan enojada con mi madre.

-No te agrada?- intente cambiar la conversación. Me miro confusa- La novia de Wiliam.

-No lose, aun no la conozco muy bien- tomo un sorbo de su té- para ser sincera no se de donde ha salido, nunca la he visto antes.

No pregunte mas, tendria que prepararme para esta noche conocer a mas gente de la que quiciera.