Cap. 15 Hermanos

Aunque para Donatello había sido obvia la alteración que había generado en los presentes lo que acababa de decir, Nick recuperó con rapidez el dominio de sí.

• ¿Y eso tendría que interesarme por algún motivo? – preguntó
• ¡Ya basta Nico! – exclamó él – Tengo pocas dudas de que Bella esté…

No lograrían enterarse del resto, porque Jesse se había puesto de pie con extraorinaria velocidad y le había soltado un puñetazo en la mandíbula al desprevenido Donatello enviándolo hacia atrás y haciendo que se tirase el café encima. Nick se había movido con rapidez sujetando a Jesse aunque ella no parecía tener intenciones de seguir golpeando a Donatello.

• Te lo advertí – dijo ella mirándolo con ira

Donatello se enderezó al tiempo que se llevaba una mano a la boca pues un fino hilo de sangre se escurría por la comisura de ésta debido a que se había mordido la lengua.

• Me alegra que al menos no tuvieses unas tijeras en la mano, Bella

Con aquel comentario quedaría demostrado que este sujeto adolecía de un mínimo de cordura, y tanto Charlie como Jack, que eran los que estaban viendo a Jesse, pensaron que lo afortunado era que no hubiese tenido una automática o el necio aquel ya sería historia. Nick condujo a Jesse hasta su habitación, y una vez allí la miró en forma admonitoria.

• Enana…
• No me digas nada, le advertí que no me llamase de ese modo – lo interrumpió ella
• Bien, pero ahora te quedarás aquí hasta que me deshaga de él
• Algo que desde luego, no podrás hacer

Nick juntó las cejas pero no agregó nada más sino que abandonó la habitación. Sin embargo, cuando salió no vio a su hermano así que miró   a Jack en forma interrogativa y éste señaló hacia la cocina, de modo que se encaminó hacia ésta y cuando entró, vio a Charlie alcanzánole un paño mojado a Donatello.

• Fuera de mi casa
• No me iré hasta que… – pero no alcanzó a terminar cuando una automática apuntaba a su cabeza
• Eh, eh – dijo Charlie interponiéndose – vamos a calmarnos
• Lo único que vamos a hacer es echar a este infeliz – dijo Nick
• Nico, solo intento ayudar
• Pues no veo cómo – dijo Jack que había seguido a Nick – porque tu mismo dijiste que ya no podías, y según recuerdo nunca te interesó nadie

Donatello miró a Jack en quien no se había fijado mucho ni cuando se habían visto en el hospital ni esa noche.

• ¿Te conozco? – le preguntó en un tono poco amistoso y que expresaba que en su opinión no tenía derecho a meterse
• Seguro que no, porque como dije, nunca te interesó nadie que no fueras tú mismo, signore Casanova

Posiblemente el genio Aliano estaba a punto de hacer aparición, pero Donatello fue lanzado al pasado en forma violenta al escuchar a Jack. Como ya se dijo, de los tres hijos de Giovanni, quien más se parecía físicamente a éste era Donatello, y si bien nunca se había comportado con tanto descaro como su padre, las chicas lo habían perseguido desde que estaba en el jardín de niños, pero cuando fue un poco mayor y aunque no alcanzaba las marcas de Federico ni de su progenitor, en su caso quienes comenzaron a perseguirlo fueron aparte de las chicas de su edad, también las no tan jóvenes entre quienes estaba la madre de Jack, razón por la cual y siendo que Jack lo había notado, le había hecho una advertencia.

• Aunque tú y yo sabemos que mi madre es una zorra, te sugiero mantenerte alejado de ella, porque el tipo con el que vive tiene poca paciencia y muy mal carácter, signore Casanova

Donatello no había tenido nigún interés en la mencionada mujer y jamás le prestó atención, pero a partir de aquel día Jack no lo llamó de otra forma, así que desde que lo había escuchado hacía un momento, Donatello tenía los ojos muy abiertos pues con el comentario había llegado el reconocimiento.

• ¿Jarko?
• Servidor – dijo él con una sonrisa torcida

Donatello se insultó mentalmente, porque una de las pocas cosas que sabía era que cuando su hermano había desaparecido lo había hecho en compañía de sus dos amigos, así que si Carlo estaba allí, naturalmente Jarko también y él había sido muy necio al no imaginarlo.

• Ahora fuera de aquí – repitió Nick
• ¿Me estás echando de tu casa o de tu vida, Nico?

Charlie pensó que aquello había sido un golpe bajo, porque una de las cosas que más había atormentado a Nick en su infancia y aun durante una buena parte de su adolescencia, era el pensar que su familia lo había excluido de su vida y sería justamente lo que diría a continuación.

• Sería tarde para eso, porque ustedes me echaron a mí antes
• Sé que no fui la clase de hermano que esperabas o que merecías, pero en realidad en nuestra familia nadie fue lo que se suponía debía ser. Nuestra madre pareció… perderse cuando vinimos aquí, nuestras hermanas con la posible excepción de Giuliana nunca nos quisieron o nos vieron como hermanos, y el padre que nos tocó lo único que parecía querer en la vida era que sus hijos lo obedeciesen de forma ciega aunque equivocó el método, porque en lugar de darnos amor lo que nos dio fueron órdenes y palizas para obedecerlas, de manera que nadie te echó Nico, porque en realidad nunca tuvimos una familia de la cual ser echados – hizo una pausa y dio un paso hacia Nick – Lo anterior no justifica mi comportamiento y nada va a cambiar los hechos, pero sigues siendo mi hermano y solo te estoy pidiendo una oportunidad de ser lo que no fui antes
• El tipo no es ni siquiera agradable – escucharon que decía Jesse quien había llegado en forma sigilosa y estaba al lado de Jack que seguía de pie al lado de la puerta – pero tiene razón en eso de que sigue siendo tu hermano y…
• Y el tuyo – la interrumpió él
• Cállate policía, porque yo no interrumpí tu bonito discurso – le dijo ella con sus linda maneras y luego miró a Nick – Tú mismo me dijiste que este no era tan malo como el otro, así que no pierdes nada con darle la fulana oportunidad y si se pone pesado pues ya sabes, siempre podemos lanzarlo por el balcón – finalizó trepándose al mesón