Adolescencia entre muertos

Capitulo 16: El Campamento y la comunidad

 

Estaba durmiendo tranquilo sobre la cálida piel de Pato, cuando Carbiondi entró por la puerta, abrió las cortinas y grito:

-Vamos flacos, dale que nos tenemos que ir, no tenemos todo el día. Guarden sus cosas gays para el campamento.

-Cállate boludo, que seguro Dini te recibirá cogía todas las noches, te agarraba del pelo largo que tenías y te hacía gemir y morder la almohada toda la noche, puto.- respondió Pato, riéndose y tirándole una almohada.

- Ah, ¿sí?- respondió, mientras que con la almohada que le habían reboleado, se tiraba sobre Patricio y le empezaba a hacer lucha jugando. Yo, instantes antes que se tira, giré para un costado y me caí de la cama, pero estaba tan tentado que ni siquiera me dolió. Me levanté y comencé a caminar rengueando hacia la ventana, para ver si me podía orientar.

-¿Ves que tengo razón? Seguro le rompiste el orto para que camine así, especialmente vos qué sos negro JAJAJAJJAJAJAJA- dijo Carbiondi a Pato, quien empezó a pegarle piñas en el estómago con una almohada entre medio.

-Me corté, pajero. - respondí, mostrando el corte en la pierna.

- A ver, mostrame. Dijo Pato, y yo me acerqué para que me revisara.- Ah mierda, ¿sos boludo vos?¿Hace cuánto tenés esto?¿No te desinfectaste?

-Me lo hice ayer, antes que me encontraran, y solo tenía mi cuchillo, nada más.

-Pero que chota hiciste para cortarte así. Además, ¿qué hacías dejando vueltas solo a esa hora?

-Aaaaaa mucho quilombo explicarlo así nomás, les cuento en el camino. Pero ¿a dónde se supone que "vamos"?

-Al campamento. Ya lo vas a ver, pero muevan el orto, en 30' salimos. Vamos que quiero llegar y que siga siendo de día. - dijo Carbiondi y salió de la habitación.

En eso, Pato salió por 1 minuto y volvió a entrar con una mochila. La abrió, sacó una botella con un poco de líquido y dijo:

- Mira, esto es para ahora, cuando lleguemos te lo vamos a desinfectar bien, pero esto es algo temporal- dijo, tirando el líquido en mi herida, cosa que ardió tanto que sentía que tenía al infierno adentro de mi pierna, pero no dije ni pío, para no quedar como un chillón/quejoso frente a él, que estaba usando sus medicamentos (cosa que era complicada de conseguir en la actualidad) en mí.

 

Luego de esto, le pregunté cómo se ponían  las "máscaras", ya que me daban impresión y, además, se me hacía que eran frágiles.

Él me explicó que se ponía desde arriba y adelante hacia abajo y atrás, con mucho cuidado y, acomodando los agujeros de la nariz y los ojos para poder respirar y ver bien.

Luego, alguna segunda persona, debía atar con un cordón, a través de los  pequeños hoyos que habían en la nuca de la máscara.

Otra cosa que me recomendó era atarse el pelo antes o cortárselo al ras para que pudiese ponerse la máscara sin complicación alguna. Esa era también la razón de porque Carbiondi se había cortado el pelo de esa manera mientras no estábamos.

Ordenamos nuestras cosas, con ayuda de Pato me puse la máscara, cerramos la puerta y salimos a la calle.

Afortunadamente, no había ningún gul cerca, por lo que empezamos caminando a un ritmo normal. Antes de salir, me habían explicado que cuando estuviésemos cerca de los caminantes, teníamos que caminar rengueando y a menor velocidad, no hacer ruidos ni menos hablar. Según ellos, la única manera era susurrar, por lo que tenía que estar muy atento a cualquier sonido.

Caminamos cuadras y cuadras en silencio, hasta que rompí el hielo con una pregunta:

-Eu Pato, ¿cómo fue que lo encontraste a Maxi?

“- Viste que yo me fui a la noche-madrugada, no? Bueno, el tema es que cuando salí y comencé a alejarme del colegio, a aproximadamente 5 cuadras, escuché a alguien hablando. Me acerqué a una ventana de una de las casas abandonadas y la ví. Era una chica, pálida, con pelo corto que llegaba a su hombro. Iba a interrumpirla para preguntarle quién era y si necesitaba algo, o si había visto a un chico rubio por alrededor, pero cuando me acerqué, noté que estaba hablando por un radio-comunicador, y tenía a 2 chicas más en el suelo, a las que no sabía si estaban dormidas o muertas.

-Mañana voy a entrar con Lucas y con Aixa. Por más que no te agrade, necesito que hagas de cuenta que sos el novio de Aixa y que estás muuuuy enamorado. A Aixa le dije que vos estabas loco por ella y que querías que venga. Y bueno, Lucas es simplemente para completar el papel de inocentes jeje. Cuando lleguemos, quiero que nos abras, o en su defecto, que nos abra otra persona. ¿Okay Hernán? ¿Y el pibe que me abrió la otra vez?... Sisi, el de anteojos ¿Que le pasó?- dijo, y se escuchó un murmullo. No pude escucharlo, estaba lejos, pero podía ver como su cara se transformaba.

- Que HDP... Esta vez no se va a zafar... Bueno Hernán... Te dejo, tengo que hacer algo...

Dijo, y dándose media vuelta, disparo hacia la ventana en la que estaba. Le erró por centímetros de distancia.

-Y vos qué queres, topo?- dijo, pero yo comencé a correr en la calle. Ella salió de la casa en un abrir y cerrar de ojos y comenzó a disparar, pero ninguna de las balas me pegaron. Cuando la ví atrás, ella estaba hablando por su radio-comunicador y me sonreía, como si me esperara la muerte asegurada por agentes de su mafia. Yo corrí sin descanso, empecé a doblar en las cuadras, a tomar diagonales, y con el mayor de los miedos y cansancio, me alejé lo más que pude del colegio. En el camino, me crucé algunos caminantes, pero los esquivaba o tomaba distancia de ellos, o por lo menos lo hice hasta que uno que estaba parado a mitad de la calle, con la capucha de una campera, me gritó antes que me alejara:

-OCAMPO, ¿SOS VOS?

Lo miré fijamente e hice un gesto de afirmación.

Entonces, se acercó lentamente hacia mí. Yo estaba con un cuchillo en mano, pero al final no fue necesario. El caminante se quitó la capucha y comenzó a sacarse la piel de la cara. Entonces lo ví. Era Maxi, que estaba planeando volver a la escuela. También lo acompañaba el chico este morocho... Mmmmm... Alejo creo que se llamaba. Él estaba escondido mirando lo que pasaba, pero bueno, al final no pasó nada.



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En el texto hay: zombies, argentina, monte grande

Editado: 05.06.2021

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