Aprendiendo Amar

*Capítulo 32*

Lana

-¡Pueden callarse todas!- siento mis oídos estallar de la algarabía.

-¿Quién crees que se tome peor la noticia, Adrián, tu abuela o Lalo?- ruedo los ojos ante la pregunta de Raty, tratando de salir.

-¡Oye! Abuela jajajaja-

-Ja ja ja espero que se rían igual después que le mencione a Cata, de cierta salida el fin de semana pasada con cierto francés-

-¡¿QUÉ?!- Amanda grita, intercambiando mirada entre Maggie y Raty.

Aprovecho el momento de escapar y alejarme de tantas ideas absurdas, camino lo mas sigilosa posible a la salida.

-¡Ahh que bella se ve embarazada!- me congelo en el lugar, sintiendo el suelo moverse ante las palabras de Doña Nana.

-Niña Lana ¿dónde va? No se puede ir sin felicitarla, mire que belleza-

-¿Cómo, cómo… dices?- me regaño mentalmente por la inseguridad en mi voz.

-Ahh si, niña venga para que la felicite- se acerca y siento como su mano se apoya en mi espalda empujándome.

-Ehh creo que se ha equivocado yo no…-

-Ahh como que me equivoque mire- se detiene bruscamente señalándome el piso y siento que el alma vuelve a mi cuerpo.

-Ohh pero si es Max, ¿otra vez esta embarazada?- me agacho al ver la rechoncha perra.

-Es Máxima y sí, en esta casa todas se embarazan ¿no crees?- Dorian me mira haciendo la pregunta, pero no se porque, siento que tiene otro contexto.

-Ehh si claro bueh.. me tengo que ir, felicidades serán nuevamente abuelo-

Camino evitando ser interceptada por alguien, mientras cruzo el jardín frontal, para alcanzar la puerta que conecta ambas casa.

-Señorita Lana, ¡felicidades!-

-¡Otro!- exclamo viendo a Julián muy alegre, llegando a mi lado.

-Muchas felicidades- repite y siento una daga clavarse en medio del pecho y no me deja respirar.

-¿Qué ha dicho?-

-Oh disculpe, me imagino todos la abran felicitado-

-¡Psh! pero ¿qué le pasa a todo el mundo hoy?, no hay, no existe un be…-

-¿Umbe?- frunce el ceño extrañado -no, no, yo me refiero a los ENJOIA'T… pero pensé que estaría contenta con eso de que la joyería se alzó con el primer lugar de los premios… pero anda como extraña-

-Ahh era eso… Ehh bueno, Mmm, hare extensas tus felicitaciones, mm si me permite-

-Por supuesto, pase adelante- dice entregándome un sobre con información.

-Es lo que estaba en el buzón, más que todo es publicidad- explica al ver mi cara de subtítulos descriptivos.

Agradezco y me despido con la mano, al cruzar la puerta, no escucho a nadie, me recuesto en medio del sofá.

-Lana tú, repito yo, no estamos… nada, absolutamente nada, Dios tú me conoces, no hablamos mucho… ok, ok nunca, pero venga que yo no puedo, no te pido señales ni nada, pero ya aleja toda esas cosa a mi alrededor, amén- sacudo la cabeza para sacarme esas ideas -un poco de trabajo y listo-

Saco de mi bolso la Tablet la cual al abrir el correo me consigo con una invitación, al abrirla una cantidad de globos y confetis digitales estallan en la pantalla, con un gran Felicidades… ha sido invitada a mi baby shower.

-Pero ¿qué mier…-

-Ahh que lindo- salto del sofá soltando la Tablet -ya hizo las invitaciones al baby shower de Ezequiel Santiago-

-Pero…. ¿cómo rayos entraste? ¿Por qué el sistema no me aviso que había una invasora-

-Jajajaja que graciosa abuelita Lana, no te molesta que te diga abuela?- confronto a Maggie mirándola fijamente.

-No, sé que no te molesta para nada, entonces ya compramos la ropa, decoramos el cuarto-

-Maggie sal- trata de refutar pero la intercepto- si eres o no tan amable, retirare para poder hacer una nueva configuración del sistema de seguridad-

-¡OHHHH!, no hables así mira que mi tío después se condiciona conmigo y me odia- ruedo los ojos señalando la puerta.

-Bueno, bueno, igual tengo que ir a comprar unos zapaticos y un traje de marinerito- señalo nuevamente la salida y debe ser mi cara, porque no se queja al salir.

-Ahh por cierto abuelita, no deberías pedirle esas cosas a Dios, recuerda que aquí se hace lo que el quiere y seguramente ya te esta dando señales que tú no quieres ver-

-Psh señales, hahahaha, una invitación no es señal- un escalofríos recorre el cuerpo, por lo que dejo a un lado la Tablet y comienzo hacer zapping.

-Será que es la única publicada que hay?- inquiero molesta, al solo ver publicidades de pañales, fórmulas lácteas y juegos interactivos para bebés.

-Un paseo, si eso voy hacer- me levanto decidida a que el caminar despejará mi mente.

Salgo de la casa dejando todo tipo de pantallas, no quiero que ningún invitación o publicidad, se atraviese; comienzo a caminar saliendo de la calle de casa y llego a un parque que no había visto. Cierro los ojos al sentir la brisa, cuando siento que algo golpea mi pie y oh sorpresa es la pelota de un niño.

-Ten cuidado con esto- le lanzo el balón para evitar que se acerque.

-Gracias- dice una voz de mujer a mi derecha que habla con el niño -mi Ezequiel es un amor, ¿verdad?- suspira pesadamente viendo al niño correr detrás de las pelota nuevamente -Ezequiel es una bendición, bueno los hijos lo son, pero bueno… usted lo debe saber mejor que yo, se le ve en el rostro que es una buena madre-

-Ohh no, no, no tengo hijos- respondo rápidamente antes que comience.

-Ahh entonces será una mama excelente, ¿verdad Patricia?- hace la pregunta mirado a su izquierda, donde sale un mujer algo… bastante bajita y dos niños, cada uno en su flanco.

-Querida claro que sí, yo nunca me equivoco es un don…- susurra lo último.

-¿En serio?- reclamo mirando al cielo sintiendo como soy el medio de un sándwich de mujeres.

-Esta muy lindo el cielo… mm ¿de cuántos meses tienes? ¿ya compraste la ropita?-

-No, señoras están equivocadas, ambas yo no estoy embarazada- la risa de oreja a oreja que tenían se borró, pero más como en decepción que otra cosa.



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En el texto hay: humor, amorsecreto, diferenciadeedad

Editado: 10.09.2024

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