Al final del té Nikolai fue nuevamente a su habitación para buscar sus cosas, salió del palacio y caminó hasta las grandes puertas viendo todas las personasde, las fotografías de los paparazzis que no descansaban al parecer y también los gritos de la gente cosa que nunca se podría acostumbrar.
—Alteza real esta seguro que quiere ir afuera con toda esa multitud —Cuestionó uno de los guardias.
—Ellos están aquí porque quieren vernos ¿no? Además mis hermanos están acostumbrados a salir y hasta el rey y la reina, entonces quien soy yo para que sea el único en no hacerlo, además tengo demasiado tiempo sin hacerlo —Debia hablar alto ya que, los bullicios de la gente eran altos.
—Bien alteza real —Se resignó el guardia, este llamo a otros más seguridad para que salieran junto al príncipe.
—Deja mi auto en la esquina —Dijo al encargado de sacar sus autos cuando él los necesitaba, había regresado temprano de una pequeña reunión con su abogado, su suerte fue llegar a la hora del té, este espero que abrieran las puertas y condujo el auto hasta la esquina dicha por el joven, Nikolai había empezado a caminar en el mismo momento de salir el carro, las personas empezaron a acercarse al joven para saludarlo.
—Alteza real bueno días —Escuchaba casi de todas las personas con las que se topaba, tocaban su cabello, su hombros, sus manos y algunas señoras mayores tocaban su rostro.
—Buenos días —Contestaba a todas las personas que lo saludaban, en eso se tardó algunas dos horas, el recorrido en si no era largo pero la multitud que lo detenía era demasiada y no tenía el corazón para ignorar las que seguían adelante, llego a su auto y los seguridad esperaron que se haya puesto el broche y haya prendido el carro.
Nikolai llegó al palacio de Glücksburg llevandose la sorpresa de encontrar a tres de sus hermanos de los cuales no habían visto en el té real, caminó hacía ellos a paso lento mirando cada una de sus acciones.
—¿Eres algún tipo de detective Nikolai? —Cuestionó Alexander mientras trataba las páginas de un libro.
—No sé, tu dime —Nikolai miró a su otros dos hermano el cual estaban fumando—. No sabía que estaban aquí y no, no quiero investigar que están asiendo no es de mi incumbencia.
El claxon de un auto sonó afuera y se escuchó algunas voces—Tío Antonio llegó —Comentó Alexander pasándole el libro a Jonathan se levantó del asiento y fue a recibir afuera a su tío
—No es nada malo lo que haremos —Dijo Miguel después de soltar otra bocanada de humo.
—¿Donde estaban mis tíos? —Preguntó Nikolai volteandose a ver su tío entrar con la familia, traía una ropa especial—. Estaban pescando sin mí. Saben que me gusta pescar pero no me gusta ir solo.
—Hola Nikolai, no sabia si querías ir, últimamente estás ocupado.
—Sí pero yo dejo cualquier trabajo por eso lo sabes tío.
—Estoy de acuerdo en eso, entonces para la próxima estarás invitado.
—Yo quiero ir también, hace mucho no lo hago, a papá solo le gusta disparar.
—A tu papá y a tu tío Henry le gusta disparar, a tu tía cazar y a mi pescar, sí; somos hermanos, pero no nos gusta lo mismo.
—Vaya que se nota eso —Respondió Jonathan apagando el cigarrillo.
—¡El príncipe que quiere poner atención a última hora, cuando fue el más desinteresado de todos! —Nikolai se volteo al escuchar la noticia que salía del radio, Miguel soltó una carcajada mirando a Nikolai.
—Estoy seguro que deben estar hablando de ti —Comento Miguel, Después de decir aquello camino hacia su tío saludandolo, Nikolai se habia quedado atónito, no entendía cual era el problema de este periodista, si salía era malo, si no salía también sinceramente ya no sabía que hacer.
—Este día estuvo repartiendo las migajas de amabilidad que le quedaba después de gastarla con todos sus amigos empresarios, tenía como cinco años que no salía a pies del palacio y hoy se digno, total estafa.
—Santos cielos ese hombre te odia —Comento su tío, apago el radio y se sentó en una silla del mueble tomando un cigarrillo.
—No lo entiendo —Comentó Nikolai con sinceridad, no era que estaba dolido por aquella critica, no le prestaba atención cuando se trataba de su persona o por lo menos poco, pero lo que no entendía que era lo que exactamente ellos querían de él.
—No le hagas caso a la noticias Nikolais, ustedes están en el ojo de ella y saben que con el paso más corto que den lo van a hablar ya sea para bien o para mal, pero lo van a hablar —Esta vez hablo la esposa de su tío después de bajar de la habitación al parecer había escuchado la nota en su habitación, Jonathan no era que tenía una consideración efectiva a su hermano menor e intentaba no echarle la culpa por algunas situaciones, pero en realidad los periodistas que hablaban de él nunca decían cosas buenas aunque estaba seguro que la critica sobre su estado empresarial no la merecía en lo absoluto, como empresario se podría decir que era un hombre casi perfecto o perfecto enteramente pero como persona no era muy buena que digamos, aunque Nikolai pensaba que era bueno, resulta que no para la vista de muchos, porque ser caritativo no te daba la corona celestial que era lo que pensaba Nikolai.
—Pero eso siempre sucede, Nikolai mueve un pie lo critican, Nikolai hace esto lo critican, han visto las farándula últimamente, dicen que Nikolai está con Francesca para sentirse más poderoso —Comentó Alexander con el ceño fruncido.
—¿Piensas que no se lo merece? —Preguntó Miguel cuando terminó de calar la última parte del cigarrillo.
—Yo me considero una persona noble, amable, con buen corazón —Dijo en su defensa sentándose en el mueble frente a su tío.
—Yo creo que bueno un poco —Comentó Alexander.
—Patrañas! Pues déjame decirte que las personas piensan que eres narcisista, egoísta y ambicioso bueno eso es lo más pequeño que han dicho de ti, agrégale desinteresado y antisocial —Interrumpió Jonathan poniendo el libro en la mesa.
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Editado: 10.08.2022