Descontrol - Recuerdos del pasado-

CAPITULO 17

-Revisado-

CAPITULO 17

EL  DESPERTAR

*seis días después*

*Pov Aise*

Van seis días desde que me he quedado encerrada aquí en el piso nueve, ¿la razón?, ellos no se pueden enterar aun de que yo estoy aquí, hasta el día de mañana, pero algo me sigue comiendo la cabeza, ¿la razón? Ilena, su manera en la que se acerca a Mateo, la obsesión enfermiza de decir que es suyo, me duele la cabeza de pensar que en estos seis días a ella le importe una mierda si él está casado o no, Mateo ha venido todos los días para informarme de como los  dos se encuentran, de sus  movidas pero no puedo preguntarle por Ilena, se el riesgo de que terminemos peleando y se atrasara el plan inicial, y ninguno de los dos quiere eso.

*Horas después*

Ocupo salir un poco al patio, necesito aire por  lo que se vendrá, iba caminando cuando antes de bajar las escaleras Ilena salió corriendo hacia un lugar, voltee por instinto a  ver a qué lugar había ido y ahí lo vi, vi a Mateo y a Ilena besándose en la boca, él iba a quitarla pero me vio de reojo y continuo el beso, mis ojos se sentían con lágrimas ya que nunca había visto con mis propios ojos a Mateo seguirle el juego a nadie o por lo menos no en mi cara, corrí de nuevo escaleras arriba

-No dejen que el Coronel Bright entre al noveno piso- dije  dándole la orden a los presos antes de cerrar mi puerta, sentí como mis lágrimas caían y como empezaba a temblar, sentí mi cuerpo que no me respondía y sentí la necesidad de dejar de sentir, empecé a pegarme en repetidas ocasiones en la pared hasta que vi sangre en ella, mis pensamientos se aclararon y solo recuerdo como mis ojos fueron perdiendo fuerza

*Una hora después*

Me desperté desorientada y con dolor en la frente, cuando mire de reojo vi al coronel Bright viéndome furioso y yo lo mire aún más furiosa, no podía creer que hiciera eso en mi cara

-¿Por qué mierda hiciste eso?— dijo enojado viéndome—

-No te interesa— dije—

-Aise…-dijo con advertencia y lo mire fulminándolo con la mirada—

-No digas mi nombre en esa sucia boca— dije entre dientes y bastante molesta—

-¿Qué ocurre?— dijo acercándose pero me hice para atrás antes de que el llegara a mi lado—

-ALEJATE—dije tomando con fuerza mi pecho con mi mano, dolía—

-Dime que sucede ¿Por qué estas así?— dijo y mis lágrimas empezaron a salir—

-Me traicionaste— dije con la voz rota y él se tensó—

-Aise fue… -dijo pero lo interrumpí—

-Quise dejar de sentir— dije y él se acercó rápidamente  a mi cama y me tomo por loa hombros—NO, NO, DEJAME, NO QUIERO TUS SUCIAS MANOS, ALEJATE DE MÍ— gritaba intentado soltarme sin ninguna fuerza—

-Prometiste no volver a hacerlo—dijo y yo deje de moverme—Dijiste que tenías esos ataques controlados— dijo mirándome a los ojos— ¿QUE MIERDA PASO SI LOS TENIAS CONTROLADOS?—dijo gritándome y yo empecé a temblar—no, perdón—dijo viendo que estaba temblando y me abrazo, cosa que yo me salte de su abrazo—-

-Vete— dije pero él me tomo del rostro y me beso, me aparte de él y le di una cachetada—No quiero tu asquerosa boca, te perdí, todo perdí, no quiero verte— dije llorando y el volvió a besarme pero ahora no lo aparte—

-Nunca me vas a perder—dijo Mateo abrazándome fuertemente con un beso tranquilo y lleno de emociones—

-Mientes— dije aun sollozando y el pego su frente con la mía—

-Si te mintiera me matarías – dijo sonriendo al igual que yo— Le continúe el beso por ti, nuestro juego aún no termina – dijo recordándome nuestro juego y ahí comprendí lo que tenía que hacer—

-Tomare venganza— dije y el me miro enojado—

-No— dijo dándome una orden—

-Debemos de tener balance— dije sonriendo maliciosa mente y el me tomo de la cara y me estampo un beso, pero nada parecido al que había hecho anteriormente, este era carnoso, apasionado y demandante—

-¿Crees que  alguien más pudiera besar así?—dijo y  reí negando con la cabeza—

-¿Por qué no lo probamos?— dije lambiéndome los labios y el me mordió el labio inferior—El juego aún no termina— dije recordándoselo y el comprendió—

-Estaré listo para descuartizar a quien se atreva a besar los labios de mi esposa— dijo afirmándolo y sonreí— ¿Estas lista ?— dijo y me tendió la mano—

-Ya  mañana es el día—dije y el asintió—

*Al día siguiente*

Son las 8 de la mañana y mi día ahora será más que perfecto, todo acabara hoy, pero algo que no le dije  a Mateo es que me vengare hoy, estoy cansada y quiero irme de este lugar, me necesitan fuera y yo ocupo vengarme antes de salir. A lo lejos pude ver al teniente Héctor, vi como el Coronel iba  a mi lado pero yo lo esquive yendo directamente con el teniente Héctor, tome sus manos y las puse en mi cadera, tome su rostro con ambas manos y lo bese, intente disfrutarlo lo más que pude pero antes de que siquiera pudiera lograr 6 segundos él fue apartado, voltee rápidamente y lo vi tirando en el piso.

-Vuelves a tocarla y te mato— dijo Mateo y yo sonreí a mis adentros, Mateo fue a la mano del teniente y la piso con la bota de cuero, él estaba agonizando pero igual el Coronel no se cansaba, decidí enojarlo más y baje a la altura del teniente Héctor y continúe el beso para después decidirme de darme media vuelta para ir en busca de mi venganza personal, pero antes de que pudiera, unas manos me pusieron en su hombro, así subiéndome como costal de papas

- Vámonos de aquí— dijo demandante y de reojo vi al teniente con los dedos adoloridos—

-Pero que agresivo, solo fue un beso— dije en sus hombros y el me miro mal—

-Un beso que si lo vuelve a hacer le costara la vida— dijo fríamente Mateo—

-Que mal, con lo bien que besa— dije intentando provocarlo—

-Voy a romperle los dedos uno por uno arrancándoselo por completo para después seguir con los dientes y arrancarle la boca— dijo Mateo—



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En el texto hay: familia, obsesion, obsecion peligroso

Editado: 08.01.2023

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