Dieciséis años sin Jhon

VII

En el avión aproveché para dormir un poco, pero no me sacaba de la... ¡¡el chip!! Olvidé tomar el chip que estaba en casa, llamé a Luke, digo, Jake para decirle, después de todo él era quién nos iba a cuidar.

-Jake, despierta- le dije. Aún faltaban unas horas para poder llegar.
-¿Qué sucede, cariño?
-Bueno, en casa dejé algo muy valioso, ¿crees que podríamos recuperarlo?
-¿Qué dejaste en casa, Annie?- me preguntó cauteloso.
-El chip por el que buscaban a Jhon, estaba escondido entre las paredes.
-Creí que eso ya no existía- respondió sorprendido. 
-Pues, si existe.
-Cuando lleguemos a Argentina resolveremos eso.

Me di vuelta y me puse a mirar por la ventana, era increíble la manera en la que nos acercábamos aún más al cielo.

Sólo pensaba en Jhon y en lo que dirían mis hijos cuando lo conocieran. Aunque a veces pienso que quizá ellos no lo acepten bien, al saber que estuvo tantos años vivo y no nos dio ni una señal de vida. De hecho, si creen eso, sería normal. Quiero decir, sé que él tenía problemas, pero una carta con algún sobre nombre, no lo se. 
Es raro enterarte que el padre de tus hijos esta vivo hace dieciséis años y nunca fue capaz de hablar con ellos o conmigo. Si fuera mi padre, también reaccionaría mal. Pero vamos, yo aún lo amo y podría perdonarle eso y más.
Seguí pensando y pensando hasta que me dormí.

-Mamá, llegamos- dijo Katy.

Me desperté lentamente y vi que ya casi no quedaba nadie en el avión. Me levanté y bajamos.

~~~

Que feo era Buenos Aires, estaba mucho mejor Costa Rica, donde vivíamos era más tranquilo. Nos cruzamos con montones de gente que hablaba algo diferente a los costarricenses.
Jake paró un taxi y le dio la dirección de donde nos quedaríamos.

Era un apartamento bastante grande, estaba amueblado y tenía las paredes pintadas de blanco, nada del otro mundo, pero era bastante lindo.

Tendríamos que volver a empezar, tal y como pasó en Costa Rica. 
Kate y James fueron con sus maletas y eligieron su habitación. Jake y yo deberíamos compartir la cama, no es algo que me agrade mucho, pero no hay otra opción.

-Queremos que nos cuenten porque tuvimos que irnos así- dijo James y Katy asintió, apoyando lo que decía su hermano.
-Mi nombre verdadero no es Luke, soy Jake Wayland. Agente encubierto del FBI.- Katy y James se miraron y guardaron silencio esperando a que contara más. -Hace dieciséis años, cuando su padre iba en ese maldito avión, antes de llamar a su madre, me llamó a mi. Me explicó toda la situación y me rogó que por favor los protegiera. Me resultó raro que Jhon estuviera metido en esas cosas. Pero aún más, que me pidiera ayuda a mi. La historia real, es que su padre era mi compañero, -¿por qué yo no sabía eso?- siempre íbamos juntos, pero una vez cometí un error. Estábamos por atrapar al tipo que ahora nos busca, recuerdo que él me había dicho que lo esperara fuera del edificio. Y yo no quería hacerlo, estaba cansado de que siempre se llevara las felicitaciones cuando el trabajo era de los dos. Así que entré, y lo vi prácticamente negociando con Bernie. Así que reaccione como cualquiera en ese momento, lo tomé por traidor y salí en busca de los dos. Los apunté con el arma, pero Bernie reaccionó antes que yo y me disparó. -levantó su remera y ahí estaba la cicatriz de su herida-. Jhon lo dejó ir, y prefirió atenderme a mi, me contó toda la historia y supe que en realidad ellos no estaban negociando, sino que él se había infiltrado como encubierto en las filas de Bernie.- tomó aire y esperó a que dijéramos algo.
-Continúa, por favor- dijo Katy.
-Jamás me lo perdonó, y la verdad no lo culpo. Pero un tiempo después me llama para que los proteja y la verdad es que es un gran avance, quizá algún día logre perdonarme. 
-Hermosísima historia, pero quiero saber porqué estamos aquí- dijo James.
-James, no seas grosero- dije. 
-Este tipo Bernie, era el que había mandado a matar a su padre en aquél avión, obviamente no fue él. Sino que mandó a su hijo Max, creyendo que Jhon sería blanco fácil. Como su padre pertenecía al FBI, lo dejaron subir al avión con un arma. 
-¿Mi padre era mafioso?- dijo James.
-No, Bernie lo mando a matar por haberlo traicionado.
-¿Y qué pasó luego?- dije.
-Jhon mató al hijo de Bernie, y ahora él quiere vengarse de la misma manera.
-¿Estas diciendo que nos quieren matar?- habló Katy.
-Lamento decirles que sí. Por eso los traje aquí, aunque quizá no estemos por mucho tiempo.
-¿Dónde está Jhon?- me animé a preguntar.
-Lo veremos en un tiempo. Aún no podemos.
-¿Por qué?- preguntó James.
-Porque no estamos seguros todavía. Tenemos que escondernos por un tiempo. Ustedes no podrán ir a la escuela, yo les daré clases.
-Pero, ¿qué pasa con nuestro futuro? Quería ir a la Universidad- se atrevió a decir Katy, que estaba bastante asustada.
-Si nos arriesgamos, quizá nunca haya futuro. Es su decisión.- cerró finalmente la charla Jake.

 



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En el texto hay: viaje, argentina, accion

Editado: 24.07.2019

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