3 . Te Fuiste

"Un corazón que late no es necesariamente una prueba de vida para la ciencia, ni para la ley, pero la apreciación es diferente cuando afecta a la familia."

10 años atrás

"¿Que era de nosotras por aquel entonces?"

¿Que que hay de mis padres?

Ellos murieron, sí, lo que escuchaste. Fueron torturados friamente y lentamente los dos por dichas personas. Llevaban mascaras para que no pudieramos apreciar sus rostros.

A lo que iba.....

Mis padres fueron torturados por esos mal nacidos, ellos solo querían jugar sucio y hacernos daño, y como no, lo lograron. Aquellos tipos ni siquiera decían sus nombres verdaderos.

Lo pude deducir yo solita ya que tenían unos nombres raros, además no eran nombres como cualquiera.... ¿Nombres de plantas?. El caso es que podía escuchar que hablaban en otro idioma, y mi hermana y yo por aquel entonces eramos unas inexpertas ya que solo teníamos 7 años y no sabíamos inglés.

Nos sentaron a ambas en una silla, nos amarraron para no podernos mover, yo no quería mirar hacia adelante por que sabía lo que podía suceder. Ya con las bocas tapadas para que no lográramos gritar a los cuatro vientos que nos liberarán. Mi hermana y yo presenciamos como poco a poco nuestro mundo se venía a bajo, vimos sangre por todas partes, parecía aquello una masacre, solo que esta vez en vez de tantas personas eran dos. Pasados los minutos yacían los cuerpos sin vida en el suelo. Ya no intentaban defenderse, no gritaban, no los vi más volver a luchar por sus vidas, ya no se movían, no veía como sus pechos subían o bajaban a causa de sus respiraciones....

Pude ver como las pupilas de mis padres se iban haciendo cada vez mas grandes, se dilataban haciendo que su color de ojos casi fuera inexistente. Lloré y lloré, me giré y mire a mi hermana, permanecía quieta no se movía solo miraba al suelo donde se encontraban nuestros padres sin vida, no pestañeaba y temía que por presenciar aquello tuviera algún shock o pesadillas. Vi correr una lágrima por su mejilla después de otra y otra, quise estar a su lado, quise decirle que todo estaría bien, teníamos que estar ahora mucho más juntas para defendernos. Al instante nos soltaron y yo sin más me abalance hacia uno de ellos haciendo que por el gran impulso que tomé impactaramos en el suelo los dos.

De una buena paliza que me dió quedé en el suelo haciendo que perdiera la consciencia.

Me desperté y ella ya no estaba.

NO ESTABAAAAA.

-¡¡NOOOOOOOO, NOOOOO, TÚ NOOOOOO HERMANITAAAA!!!!- grité con los pulmones bien abiertos

Se la llevaron y  no pude ver a dónde, ni que le hicieron. Me cegué por la rabia.

Aquí os dejo con otro capítulo...

DE AHORA EN ADELANTE EMPEZARÉ A ACTUALIZAR LOS DOMINGOS ESTA HISTORIA.