Encuéntrame

9.Primero yo y después tú.

DRAKE










 

Ella estaba ahí, sabía que estaba aún conmigo, que aún respiraba.

No siento nada por ella, ni siquiera la conozco personalmente , es mas, hace poco que nos conocemos y...bien diría yo que no salió como esperaba.

 

Aún así sentía algo..... Pena.

Simplemente me daba igual ella, yo solo quería lo que me pertenecía, pero por ahora tenía que estar ella sana y salva. Durante esos minutos en lo que esperaba a la ambulancia para que vinieran a por ella,me acerqué más a su cuerpo inmóbil que se encontraba en el pavimento de aquel suelo tan  frío, miré su rostro y durante unos segundos conectamos miradas y de la nada cerró los parpados y  sentía como poco a poco dejaba de respirar, y como se reducían sus latidos de su corazón.

-Niñata, tienes que aguantar, aún no te puedes morir, no sin antes yo haber conseguido lo que me pertenece!!!-le dije pegando un grito casi histérico.

La ambulancia llegó 30 minutos después. Conforme se bajaron del auto a los pocos minutos Noa ya estaba dentro y preparada para que se fueran con ella y

Veo como la gente baja de sus dichosos coches a meter sus narices donde no les llaman y encima sin mover un puto músculo por intentar ayudar. Como simples marujas.

Rodeo los ojos.

- Algún acompañante para entrar dentro de la ambulancia?-pregunto el médico de la ambulancia.

-Si, yo.- solté sin ninguna expresión de preocupación. Neutro.

 

 

 

 

 

5 MESES DESPUÉS......

 

 

 

Noa llevaba 5 putos MESES en el hospital, en esa jodida camilla, sin despertar y sin dar alguna señal de seguir viva o saber si ella podía estar escuchando algo.

Creo que ni las médicas le cambiaban las sabanas. Por dios si hasta parecía que iban a criar bichos ahí.

No iba mucho al hospital a visitarla. El mismo día que ella ingresó aquí a causa del accidente no la volví a visitar desde entonces. Simplemente me parecía ridículo y estúpido esperar a que despertará y diera ella señales de abrir sus ojos, ya que ese mismo día me dijeron los médicos que había quedado en estado de coma y que no sabrían cuando despertaría.

Podía ser días, semanas, meses e incluso años.

El mismo día que me llamaron y me avisaron de que ya había despertado, cogí rápidamente mis cosas y salí del lugar de donde me encontraba para ir a toda pastilla.

-Esta vez tengo que ir al grano, y conseguir lo que quiero.- pensé y asentí decidido.

 

 

 

- Noa, que bien que hayas despertado. Recuerda que tienes que reposar y no hacer ninguna locura.- le advirtió la doctora a Noa. Ella abrió sus ojos como platos.

Yo recién acababa de cerrar tras de mi la puerta para estar en la habitación de ella.

- Esta vez tengo que ir al grano- digo enfadado y sin tapujos. Me miró estupefacta y sin saber ella a lo que me refería.

Avancé tan rápido como pude dando 4 pasos grandes hasta llegar a donde se encontraba ella tumbada en su cama. La cogí del cuello, me miró enfadada, no respondía y eso me calentaba aún más.

cálmate y no seas bruto....- pensé y respiré unas cuantas veces para tranquilizarme y relajarme.

- Y... Yo nno sé de que me hablas- ella intentaba zafarse de mi agarre que la tenía cogida del cuello muy fuerte.

- ¿Que hiciste con ello? ¿Dónde lo escondes? maldita perra de mierda.- le abofeté tan fuerte en la cara que esta hizo que se girara tras el golpe.

- VETEEEEEEEE!!!!- dijo gritando, no sin antes escupir sangre de la boca hacia el suelo.

No sé cuando lo hizo, que ni me di cuenta de que ella había llamado a las enfermeras a través del botón de emergencias.

- No.... Noa?, Estás bien?- entró una enfermera y al verla se lo dijo.

La enfermera sin que le dijera ella algo, dedujo y adivinó lo que estaba ocurriendo, en cuánto hizo unas que otras miradas hacia mí y hacia ella, alternando entre nosotros dos.

-Que te hizo este chico? Noa? - Le preguntó. Noa no respondía, ella miraba hacia el suelo a algún punto fijo sin parpadear.

Llamaron a los guardias y me sacaron a la fuerza.

Casi tropiezo por culpa de que me impujaron. Nos encontrabamos en la entrada de afuera del hospital .

-Eyyyy no me toquen!!!, Estáis estirando mi camisa!!! Y es nuevaaaa par de imbéciles!!-
Ay que ver como está la gente de hoy en día, se piensan que pueden estar rompiendo camisas a lo diestro y siniestro, ajá, como si el dinero cayese del cielo.

Me fumé un cigarrillo. Lo tiré cuando ya se había consumido.

Saqué otro de mi bolsillo, abrí la caja de cigarros y volví a coger otro.

- A la mierda, apartaros de mi camino monos de feria.- caminé hacia ellos y les cogí de la cabeza y les estampé entre ellos dos, haciendo que se dieran entre ellos un golpe en la cabeza y cayeran inconscientes al suelo.
-Trabajo hecho.- me espolse las manos y caminé hacia la entrada.

De camino a la planta en la cuál estaba la habitación de Noa me topé con una persona que me parecia muy extraña, sentía que iba a pasar algo .

Antes de llegar a abrir la puerta de la habitación vi a cuatro enfermeras correr hacia mi y entrar por la puerta. No sin antes, haber escuchado a estos decir que llamaran al doctor.

A los pocos segundos, vi al doctor con los aparatos necesarios él corría para entrar a la habitación de Noa. Antes de que la puerta se cerrará por completo, se escucho un sonido procedente de allí dentro. Era muy sonoro.

 

 

 

¿Sabes lo peor? Procedía de una máquina.

 

 

 

 

 

 

La puerta se acabó cerrando y con esa simple acción término de escucharse el pitido.




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