Condenados a jugar

"Ya sabes, Yasha, trata de componer algo moderno, sea rock o más pesado.

— Lo intentaré, solo que mi perfil es clásico, o al menos pop.

"Lo entiendo, pero hoy en día está de moda rapear y rockear y cosas así.

"Está bien, escribiré algo así".

"Eres un martillo, te prometo una gran tarifa".

"Gracias."

La llamada fue interrumpida. Yasha, que amaba la música más que su vida, se ve obligado a inventar todo tipo de tonterías. Era muy introvertido, fuera de su rutina. ¿Qué puedes hacer con el mod para gobernar el gallinero? Tenemos que adaptarnos a todo tipo de admiradores de la modernidad. Para servir por un pedazo de pan. Y quieres crear una obra maestra como Paganini y tocarla en el gran escenario, con el aplauso de una gran multitud de espectadores.

Caminó lentamente por el parque y recordó su infancia. Su madre lo llevó a la escuela de música y él aprendió a tocar el violín por primera vez en su vida. Yasha era un estudiante talentoso, comprendía la música no solo con facilidad, sino con inquietud en su pecho. El niño soñaba con una carrera como violinista. Incluso se le dieron complejas propuestas y caprichos. Veía su futuro a través del prisma de sus sueños. Quería viajar a diferentes países, para ver las escenas famosas del mundo. A menudo veía la misma imagen en sus sueños. En el Gran Salón, se para con un frac y recibe una ovación de pie. Al grito de "Bravo maestro". Ni siquiera quería despertar de semejante celebración. Después de la escuela, no corrió, sino que corrió a la sala de música como loco.

Yasha hojeó las notas con tanto cuidado como si estuviera envolviendo a su hijo recién nacido. Para él, el violín era el llanto de un niño. No quería nada de su vida, solo tocar el violín. No era vanidoso, solo quería atención humana. Un viejo maestro solía decir: "Yasha, tienes talento, pero tienes que trabajar duro. El talento por sí solo no es suficiente, se necesitan ganas y perseverancia. El violín es una obra titánica que no todo el mundo puede hacer. Muchos abandonaron la carrera debido a la falta de perseverancia. Lo lamentaré si dejas la música".

El niño recordaba estas palabras para siempre. No había un día en el que no jugara. Los vecinos a veces se quejaban de lo mucho que podían jugar. Bueno, no mucho. Se disculpó tímidamente, pero siguió jugando. Y solo su amada madre lo entendió y creyó en su maravilloso futuro. Una vez que ganó una competencia, su alegría no tuvo límites. Su madre incluso lloró por su hijo. Pero no se puede hacer carrera en esta ciudad. Y no es fácil llegar a la capital sin conexiones. Y lo quiero tanto.

Ahora trabaja en una escuela secundaria y enseña música a niños. El salario quiere ser mejor, pero no le presta atención. Lo principal es escuchar los sonidos que agitan su conciencia. Anteriormente, Yasha trabajó en una escuela de música, donde estudió. Pero luego se cerró, por lo que se consideró innecesario. Pero hay muchas tiendas y boutiques.

Un joven caminaba por el parque, viendo caer las hojas. Y pensé en lo que podía inventar para estos peces gordos de nuevo cuño. En Internet, encontró un sitio web que ofrecía cooperación con jóvenes compositores. Estaba muy interesado en saber si podía salir de este agujero. Pero estaba decepcionado, necesitaban música moderna en un cierto estilo. No les interesaban los clásicos, exigían lo que escuchaban ahora los jóvenes.

Yasha había estado componiendo música durante mucho tiempo, pero era música clásica. Lo publicó en varios sitios web y foros. Fue elogiado por los conocedores del arte, pero nada más. Nadie quería interesarse por él. Es cierto que le escribió pidiéndole que lo escuchara en la Filarmónica. Le prometieron que estaban de acuerdo y que le devolverían la llamada cuando hubiera tiempo. Pero todo terminó en el silencio habitual.

Por lo tanto, decidió mostrarse a través de intermediarios al menos de alguna manera. Y el cliente me pidió que compusiera algo moderno. Sí, lo intentó, pero por alguna razón se las arregló para hacer algunas tonterías. Con los clásicos le resultaba más fácil. Y por alguna razón, las notas no coincidían con los motivos modernos. No, se le ocurrió algo, e incluso recibió una pequeña tarifa. Pero no tuvo mucho éxito en el blues, el rock, el rap.

Yasha incluso intentó hacer una nueva versión de otras canciones, pero resultó aún peor. Y así, deambulando por el callejón del parque, pensó en cómo hacerlo. No, no era el dinero lo que le preocupaba, sino el deseo de ser escuchado como músico. El tipo estaba entusiasmado con su sueño altísimo. Y a menudo se sentía desanimado por estas circunstancias de su sombría vida. Los escolares estaban sentados en los bancos y escuchaban música. Se interesó y preguntó cuál era la melodía. Lo miraron como si fuera un tonto y dijeron que era una canción genial de un artista nuevo.

Inmediatamente se animó y corrió a casa para recrearlo en partituras. Yasha rápidamente escribió nueva música de memoria. Y luego abrió un programa en la computadora e ingresó los datos en él. Era un programa gratuito para músicos donde podían grabar y tocar melodías. Parecía ir bien, pensó. Déjame escribir algo más, y entonces se dio cuenta. Durante esta velada, creó varias piezas de música electrónica, que ahora son escuchadas por jóvenes y adolescentes. Estaba contento, por fin empezaba a tener éxito.

Después de haber guardado estos archivos en un disco, el músico abrió el sitio web de los empleadores y se deshizo de sus obras maestras, a grandes rasgos. Y se fue a hacer café. Yasha estaba satisfecha, por fin tenía una idea y podría ganar dinero para un viaje al menos a una gran ciudad donde hay una sala filarmónica. Nunca había soñado con una capital. De repente, sonó el teléfono, corrió a la habitación y agarró su teléfono celular.