Capítulo 10: Un amor eterno

Los años pasaron, pero el amor entre Lidia y Laura nunca disminuyó. Cada día, se amaban más y más, su amor creciendo y fortaleciéndose con cada desafío que superaban juntas. Aunque ya no eran las jóvenes que se habían conocido en el parque, su amor era tan intenso y apasionado como siempre.

Lidia, con su amor por los libros, continuó escribiendo. Cada novela que escribía era un tributo a su amor por Laura, una celebración de la vida que habían construido juntas. Laura, por su parte, continuó apoyando a Lidia en cada paso del camino, su amor por Lidia tan fuerte como siempre.

Un día, mientras estaban sentadas en su jardín, mirando el atardecer, Lidia tomó la mano de Laura y le dijo que la amaba. Laura, con lágrimas en los ojos, le dijo a Lidia que también la amaba. Fue un momento sencillo, pero lleno de amor y emoción.

Y así, Lidia y Laura continuaron su vida juntas. Una vida llena de amor y felicidad, una vida que prometía ser tan hermosa como el amor que compartían.