Solo tú

25. TaeJoon

Me despierto con energía, me preparo mientras tarareo una de mis canciones y bajo la escalera bailando. Entro en la cocina donde están Jan y HoYung tomando un café y cojo un vaso para echarme un poco de leche. 

Mis dos compañeros me miran con una sonrisa en los labios al ver mi bailecito y me preguntan al unísono:

—¿Qué te pasa? ¿Por qué estás tan alegre esta mañana? 

—He tenido un gran sueño. ¿Quién falta por bajar? 

—JK. No quiere dejar sola a Elenor y NamYoon intenta convencerlo de que no le pasará nada. Lo cierto es que ella tiene razón. Está un poquito pesado y sobreprotector —comenta Jan dando un sorbo al café. 

Una idea se me pasa por la cabeza al recordar con quién he soñado, dejo el vaso vacío en el fregadero y subo para entrar en la habitación del maknae del grupo.

—Si no quieres dejarla sola, pregúntale a SuHye si se puede quedar hasta que lleguemos —le propongo con esperanza de volver a verla. 

—Qué buena idea. Gracias, TaeTae —me contesta Elenor con un guiño de ojo y una sonrisa en los labios. 

JK pasa su mirada de uno a otro con el ceño fruncido y deja salir la pregunta:

—¿TaeTae? ¿Desde cuándo tenéis tanta confianza? 

—Desde que vive en esta casa —respondo con las manos en los bolsillos y sin echar mucha cuenta a lo que dice después.

La editora se lleva el móvil a la oreja mientras hace la llamada a la escritora y le deja un beso en los labios a mi compañero para quitarle el ceño fruncido. 

Cuando la chica responde por la otra línea, Elenor le explica lo que sucede en español y los tres nos quedamos con cara de tontos al no entender ni una palabra de lo que dice. Después de colgar nos mira y nos informa:

—Viene para acá. 

Una gran sonrisa de oreja a oreja se forma en mi boca y la chica parece captar mi alegría, ya que me mira con una sonrisa traviesa y con sus ojos verdes clavados en los míos. 

—Está bien, entonces. Esperaré hasta que llegue. Podéis iros vosotros, yo os alcanzo más tarde —habla JK captando mi atención. 

—Yo le acompaño —confirmo con rapidez. 

NamYoon nos mira a ambos, niega con la cabeza sin poder creer lo que escucha y se marcha escaleras abajo, llamando a los demás para salir hacia la empresa de una vez. 

Mi compañero me observa con sus grandes ojos de cervatillo y los entrecierra para escrutarme. Me pone algo nervioso y salgo de la estancia después de informarle de que esperaré abajo. Oigo los murmullos de la pareja mientras bajo la escalera y me siento en el sofá escuchando música en mi móvil. 

***

Ha pasado media hora desde que Elenor ha llamado a la escritora cuando el guarda de seguridad se pone en contacto para saber si la deja entrar o no. Respondo con un gran sí y me voy a la puerta. La abro y observo a la chica mientras se acerca con sus firmes y elegantes pasos. 

Mis ojos la revisan de arriba abajo, observando con atención y memorizando cada detalle. Está preciosa lo mire por donde lo mire y creo que no me cansaría nunca de mirarla y perderme en esos ojos celestes como el cielo.

—Buenos días —me saluda al llegar a mí y quedarse parada en el segundo escalón que lleva a la puerta. 

—Gracias por venir. JK está un poco paranoico y no quiere que se quede sola —le explico entrando en la casa y alejarnos de los posibles mirones. 

—No hay problema. Qué más quisiera yo tener a alguien que se preocupe así de mí. Tengo a mis padres, pero no es lo mismo —comenta ella dejando el abrigo en el perchero de la entrada. 

—¿Tu novio no es así? —Pregunto sin que se note mi interés. 

—No tengo novio. En fin, supongo que están en la habitación, ¿no? —asiento con la cabeza al darme cuenta de la tristeza reflejada en sus ojos y la sigo—. ¿Cuánto tiempo ensayáis? —Quiere saber subiendo a la planta superior. 

—Todo el día, aunque es probable que también grabemos algunas canciones. ¿Tienes que irte a alguna hora? 

—No, solo es curiosidad.

—Podéis pedir algo de comida si no queréis cocinar —abro la puerta del dormitorio y pillo a la pareja mientras se besan. 

La escritora y yo nos incomodamos un instante, me disculpo por no llamar antes y JK saluda a la joven con una sonrisa tímida. 

—Cuida de ella en mi ausencia y no la dejes hacer ningún esfuerzo —le advierte con suavidad. 

SuHye asiente humedeciendo sus labios inconscientemente al ver los labios un poco hinchados de mi compañero por el beso. 

Aprieto los dientes al sentir celos de ese gesto, agarro a mi amigo del brazo, estrangulando mis dedos alrededor de su muñeca, y tiro de él después de despedirme de las chicas. 

—Vaya, no era consciente de la fuerza que tienes en la mano —me dice JK siguiendo mi rápido caminar hacia el garaje—. Hyung, me haces daño. ¿Qué te ocurre? ¿A qué viene tanta prisa? 

—Nos están esperando desde hace un buen rato. 



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En el texto hay: romance, amor

Editado: 12.05.2023

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