Solo Tu Puedes Verme

Capítulo 16

 

“Un sueño, un pensamiento, un deseo... ¿Puede volverse realidad?”

 

 

En cuanto rompí en llanto, me odie a mí misma aún más por llorar de nuevo...esto se ha vuelto una rutina de todos los días, que no se si me quedan más lagrimas para derramar, a este paso...en ese momento que quise volver a llorar seque mis lagrimas tanto como pude, junte mis brazos y piernas haciendo un pequeño caparazón y pensé en lo deprimente se ha vuelto mi vida en tan solo un par de meses... pero, vaya ¿Quién diría que mi madre estaría envuelta en una situación con este compañero de mi padre...? No quiero sacar conclusiones así de rapido, pues no se si mi madre realmente tiene algo con ese hombre...pero de no ser así ¿Por qué mi madre estaba tan nerviosa? Yo, quiero creer que no es nada, que solo se sorprendió. Aunque sé que no es así, tratare de fingir como si no hubiera visto nada pero si mi padre pregunta...solo diré que no estaba en casa o que no vi nada. Creo que es mejor mantener esto así, no quiero mentirle a mi padre pero ya suficiente tengo yo con sus peleas, si vuelven a pelear, me sentiré de nuevo culpable y ya no tengo espacio en mi mente para culparme aún más de lo que ya me culpo. Al final mi mente se convirtió en una gran bola de estambre sin fin y no puedo encontrar un hilo suelto para empezar a tirar de él, pero eso ahora no importa...lo que me preocupa es que mi intento de vivir una vida pacifica con mi familia, superar lo de Emma, evitar a Cristian lo más posible, no meterme en problemas, portarme como una buena estudiante e hija, soportar la separación de mis padres, todo parece ya tan inútil sin sentido alguno. Y si quiero pensar en alguien para culpar, solo me viene a la mente a mí misma que aunque es cierto, desearía que no fuera así...pero duele admitir que soy la razón de mis problemas, que yo misma me provoco mis problemas de cada día y todo empezó al hacerme amiga de Sophie, ¿Qué estaba YO pensando en ese momento? ¿Qué trataba de hacer? ¿Sophie solo era un instrumento más para yo poder olvidar a Emma? ¿Yo...trate a Sophie como un sustituto de Emma?... y a estas dos últimas preguntas yo respondí con un “Sí” fríamente como si ese fuera mi propósito al hablar con Sophie desde el inicio. Aunque yo siempre quise una verdadera amistad...dentro de mí sabía muy bien que no era posible, pero ahora ya no hay vuelta atrás, solo me queda seguir caminando hacía... —suspire no terminando lo que iba a decir pues no tenía hacía donde ir— ¿Hacía donde debería ir? ¿Acaso hay algo por lo que vale la pena seguir incluso para alguien como yo? Supongo... que para mí ya no hay más camino por el que yo pueda ir.

 

Al pensar esto sola en mi cuarto, o como yo lo llamo mi cueva, ¿Es esta clase de pensamientos que una niña de 11 años tendría? Claro que no...no es normal, pues si vives en una familia con amor, disciplina, cariño y respeto crecerás con una mentalidad alegre, sin temor a contar tus secretos a tus padres, pero si vives en una familia disfuncional, con problemas, gritos, peleas, discusiones, traiciones, separaciones y aún más, tu crecerás al igual que ellos siendo una persona inestable y disfuncional, aunque tuve de ambas familias un poco, yo alguna vez tuve una familia feliz y una vida saludable sin esta clase de pensamientos. Pero todo cambio, fue repentino y no lo vi venir, al principio cuando vi a mis padres pelear me asusté mucho e interferí en sus peleas tratando de calmarlos pero mi padre solo dijo: “Cristal, hija no estamos discutiendo ni peleando solo estamos hablando” Ahora me pregunto ¿Qué es exactamente hablar? Hablar para mi padre es pelear, discutir e incluso gritarse maldiciones o malas palabras de las cuales no estaba acostumbrada en ese tiempo, así que solo podía taparme los oídos y meterme bajo las sabanas de mi cama, imaginando la familia que solía tener.

 

Y pensar tanto...solo hace que me sienta somnolienta, en cuestión de segundos empecé a cabecear poco a poco hasta acabar acostada en el piso de mi cuarto, podía sentir como mis ojos empezaban a volverse pesados y cerrarse poco a poco y esto solo me causaba miedo pues no quería dormir por los sueños que había tenido últimamente, el sueño era una palabra que no podía siquiera pensar, no quería dormir, pero...mi cuerpo estaba tan cansado y mi mente tan aturdida que me di por vencida, cerré mis ojos y dormí profundamente. Al principio todo estaba tranquilo pues lo único que veía era una pantalla negra, que parecía ni tener un inicio ni un final, todo me parecía tan pacifico que parecía mentira...y efectivamente era mentira, pues al cabo de 10 minutos, abrí un poco mis ojos esperando encontrar mi cuerpo tendido sobre el suelo, pero en cambio pude ver el mismo horrible escenario en el que alguna vez estuve parada, en el mismo lugar y claro, en total silencio, aunque solo se podían escuchar mis pasos, ya estaba muy asustada pues no sabía cómo salir de mi sueño, no importaba cuantas veces pellizcaba mis brazos o cara, no despertaba en absoluto. Solo estaba parada en medio de un charco enorme que parecía mar y a la vez cristal, giré en todas mis direcciones pero no vi a “mi yo del pasado” y eso me había tranquilizado bastante y justo en cuanto solté un suspiro de alivio vi la silueta de “mi yo del pasado” enfrente de mi cara a unos pocos centímetros.

 

—¡Vaya! Pero si es Cristal del presente...! —exclamo con alegría la silueta—.

 

—¿Qué te trae por aquí? ¿A qué has venido? —me pregunto la silueta—.

 

—¿Qué me trae por aquí...? —le pregunte confundida pues no entendía su pregunta—.

 

—¡Claro! ¿Has venido por algo, cierto? —me respondió con un tono algo juguetón—.

 

Primero que nada... ¿De dónde viene esta amabilidad? Esto no es normal, y eso de que yo he venido por algo...? ¡Como si yo quisiera estar aquí por voluntad propia!...




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.