Hola saludos a mis lectores.
Embarazada por accidente .
Karla se atraviesa entre los dos —Mi amor no es lo que tú crees.
¡Tenemos una familia!,¿porque te ves a escondidas con este hombre? -- Leandro los mira con desprecio y se marcha,Karla corre detrás de él.
”Leo,¡por Dios!,no me ignores, todo tiene una explicación.“
¿Qué me vas a decir?,tu amas a ese tipo y a mi nada me miras como tu premio de consolación,soy un pendejo,¡quédate con tu amante!,a mis hijos no te los vas a llevar.
El hombre se mete en su auto y acelera el motor Karla lo sigue en su coche,al llegar a casa la discusión sigue su curso.
”Eres injusto conmigo yo me vi con Joseph para pedirle que nos deje en paz,le dije que te amo y que no te voy a dejar por él.“
¿Por qué te tengo que creer?,a las mujeres les gustan los tipos que les dan mala vida—Toma aire y prosigue—Todos estos años he tratado de hacerte feliz,soy un buen padre y esposo complaciente te hago el amor a diario y me imagino que tú nada piensas en el otro que te hizo llorar mucho y se complacía en humillarte.
Leandro abre el closet y saca una maleta.
¿Qué haces?,no te vayas.
'La que se va eres tú' .Dice al colocar la ropa de ella dentro con una mano toma la maleta y con la otra la arrastra. --¿Quieres a Joseph?,vete con él.
La joven se abraza a su rodillas y le pide perdón mientras llora—Leandro eres mi esposo,no me eches de tu lado,yo no te he sido infiel jamás.
El hombre no soporta verla llorar y su corazón se conmueve la levanta del piso y seca sus lágrimas —¡Perdóname mi reina te amo tanto que los celos me ciegan—Besa su rostro bañado en lágrimas,sus labios se unen en un ardiente beso,él hombre la tomó por la cintura y acariciaba su cuerpo para luego llevarla a la cama y hacerle el amor de manera salvaje.
Doña Gladis había oído los gritos de la discusión de la pareja y venía a intervenir por su hija su mano se quedó congelada en el aire para tocar la puerta al oír los gemidos de placer de la pareja,la señora sonríe y susurra moviendo la manos —¡Al menos mi hija está usando el cerebro!,¡adiós a Joseph!,ese Leandro se ganó a mi hija,sin duda la merece—La señora menea la cabeza y se va a atender a los pequeños para que la pareja tenga su privacidad.
En la cama los esposos hablan,ella se encuentra abrazada al pecho de su marido—Mi amor no vuelvas a dudar de mí.
'Entonces no hagas cosas buenas que parezcan malas,no quiero que tengas secretos conmigo.'
”Te lo prometo mi león.“ Ella sonríe y le besó al tiempo que piensa—Por poquito eso estuvo muy cerca.
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