Febrero

Ángeles creía en los finales felices, las comedias románticas y los para siempre. Desde muy pequeña vio historias de princesas que encontraban al príncipe azul, que cumplían cada uno de sus sueños y que nunca le rompían el corazón, a medida fue creciendo, fue entendiendo que nada de esas cosas eran verdad y que lo más cercano a un príncipe lo vería por televisión casándose con una princesa o actriz de Hollywood.

Durante mucho tiempo su vida se basó en pelear contra sus deseos propios y la realidad que la rodeaba, pero un atisbo de magia y cuentos apareció a su vida al conocer a Juan Sebastián en una de sus muy tranquilos paseos por el parque.

Lo que comenzó con una charla llena de sentimiento en el parque termino en sonrisas, sueños y unas cuantas lágrimas.