Inentendible existencia.

Él era un chico al cual fácilmente se le podría considerar un caso perdido. Su hobbie era jugar, con chicas, a los videojuegos, en la escuela para lograr ganar al que posteriormente terminaría haciendo su trabajo, a la vida en general, claro que, todo tenía su motivo, solo que nunca se había preocupado por contárselos a nadie, prefería dejar que siguieran pensando de él lo que él quería.
Se le daba fácil engañar a cualquiera, o eso pensaba él. Sobra decir que era un egocéntrico, podía ser insoportable o encantador según se lo propusiera, siempre conseguía lo que quería, o lo intentaba, ya que igual nada le importaba demasiado, pero tenía un orgullo considerablemente grande. Hasta que alguien se la puso un poco (bastante) difícil.
Debería alejarse, lo sabía. Pero, ¿lo haría?