Te lo diría como amiga

¡Hola! Te estaba esperando.
Sí, a ti. Gracias por estar aquí, por abrir estas páginas, por regalarme un momento de tu tiempo.

No sé exactamente por lo que estás pasando, pero sí sé lo que se siente estar confundido, tener miedo, sentirse solo o incomprendido. Yo también pasé por momentos así. No soy una experta, pero te hablo desde la experiencia, desde el corazón.

Tal vez no tengamos el mismo camino, pero en estas páginas caminamos juntas. Y eso ya significa mucho.

Agradezco que no te rindas. De verdad. El simple hecho de que estés leyendo esto habla de tu fuerza. Lo que estás viviendo ahora también puede ser inspiración para otros, aunque hoy no lo parezca.