Cruzada de Sangre - Extras

Extra 1

Parte que no se cuenta en:

"Cruzada de sangre" Rómulo Valverde (vida anterior de Víctor), el hechicero de ojos rojos, conocía a Emilia Capdeville (Catalina) desde antes de la Gran Guerra.

La bruja borró la memoria de Rómulo cuando lo encontró de niño. Haciéndole creer que luego de que su madre, una prostituta del barrio bajo, murió, él quedó abandonado completamente.

Que vivió en las calles mendigando agua y comida, siendo maltratados por todos al ver a aquel niño miserable y sucio.

Y aunque su infancia fue así, hubo un momento de felicidad que nunca recordó. Un día a punto de morir, luego de recibir varios golpes a palos por robarse un pan, una chica de 15 años se interpuso. Aquella de apariencia aristócrata, de mirada engreída y fría, le dio un par de monedas de oro al panadero para pagar lo que el niño había robado.

Se compadeció del pequeño humano, y desde ese día procuró buscarle un lugar donde quedarse y de alimentarlo. A escondidas porque su hermana (la futura madre de Marcos) la odiaba tanto que destruía todo lo que Emilia protegía. Fue el único momento en dónde Rómulo fue feliz en su vida.

Emilia, a diferencia de Catalina, era una vampira muy poco dada a mostrar sus sentimientos, pero con Rómulo fue cariñosa y hasta le sonreía. Hija de un vampiro de clase alta y una madre de baja casta, era discriminada por los suyos. Por eso cuando acompañaba a Rómulo era solo con él que podía sentirse más relajada y feliz.

Sin embargo, la bruja borró todos los recuerdos del niño referente a Emilia, y ni siquiera la recordó cuando la mató. En cambio, Emilia sí pudo reconocerlo justo antes de morir.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.