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"Esta es una historia que odio"

Mientras corría rápidamente por los pasillos de la universidad, logré ver cómo el ingeniero ya se encontraba subiendo las escaleras hacia el salón de clases.

Genial, y es él que valora la puntualidad, vamos pies ayúdenme, es mi primera clase de inglés (curso favorito, es que adoro los idiomas) y llegó tarde.

Mientras subía, me saqué la liga de la mano con la esperanza de poder atar mi cabello negro en una coleta y no entrar desalineada al salón de clases.

No sé si tuve suerte, pero el Ing. se entretuvo con un alumno que iba de salida y me dio tiempo, justo había un asiento adelante, me acomodé como pude antes de que el Ing. entrase y toda la clase lo saludará.

- Buenas tardes.

- Buenas tardes, Ing.

Me creerían si les dijera que es al único al que no le arman lío, es uno de los pocos de la vieja escuela, que es capaz de cerrarte la puerta en la cara sin contemplación, nunca hemos llevado un curso con él, pero eso algo que hemos visto y escuchado desde que ingresamos, no hay alguien que no sepa de él. Bueno cosas de ingenieros.

Llegó y yo estaba más emocionada por la clase que aterrada por la sombría expresión del ingeniero, como la mayoría de la clase.

- Hoy estoy con ustedes en este curso, la universidad no valora mucho el hecho de que sus alumnos puedan expandir sus horizontes con el idioma. Pero yo siempre voy más allá de lo que me piden, ya me irán conociendo.

Así, mientras todos palidecían, o la mayoría porque conozco a algunos que son muy buenos en inglés, mis ojos brillaban en serio debí haber estudiado idiomas, pero bueno, ya voy a mitad de carrera, luego me arrepiento, ahora disfrutemos la clase.

Todo fue con normalidad, al parecer el ingeniero va a trabajar con los 4 pilares, confieso que solo me desempeño bien en 2 de los 4.

- Okay, now we are going to practice the first mainstay this week, Reading, Is there one volunteer?

La clase se quedó en seco, el ingeniero habló en inglés y el tono que usó, sabían que preguntó algo, pero nadie lo había entendido o no por completo, a excepción de algunos, me incluyó, me alegro de tener base en idiomas y de haberme preparado, lo dijo rápido como un verdadero nativo.

Era leer, no dijo qué, así que por el bien de mis calificaciones levanté la mano, escuché que él adora las participaciones, te equivoques o no, "parece duro, pero es un buen docente", eso fue lo que me dijo Ari, una amiga de ciclo superior.

- Me, engineer. I can read.

- Okay, excellent.

Me paré y en ese momento me di cuenta de que la mayoría me miraba con ojos de agradecimiento, excepto algunos que rodaban los ojos, solo sonreí suavemente.

Me importa un bledo lo que piensen.

- Stand up please. Read this.

Señalo un texto corto, me gusta leer, me gusta el inglés, perfecto.

- Start.

- Hi, I am Antonella, I'm twenty years old and I'm studying gastronomy. My parents are Franz Villa and Melinda Lopez. We are latin americans and live in Perú. I have also a brother, he's fifteen years old. That's my family. Thank you

Terminé y me senté, escuché como murmuraban, siempre lo hacen, ya me acostumbré, llevo conviviendo con la mayoría de ellos durante más de 2 años. No me gusta destacar, a pesar de que sepa, en esta carrera, siempre se deben tener ases bajo la manga, porque nunca falta alguien que quiera pasarse de listo.

- Bien, bien, no esperaba que alguien pudiera entenderlo claramente, por ser el primer día. Bien, ¿Srta…?

Oh, está pidiendo mi nombre.

- Luna

- ¿Apellido?

- Sagastegui Mariell, Ing.

Vi una mínima expresión de sorpresa, fue fugaz.

- Oh, bien Srta. Sagastegui. Ya puede sentarse.

- Gracias Ing.

Tomé asiento y la clase siguió con el Ing. explicando la base del idioma y demás. Su clase terminó 30 min antes del cambio de hora y todos se retiraron, yo ya me iba, tenía que ganarme el sitio alejado de la sala de conferencias donde íbamos a tener la clase de Caminos I.

- Srta. Sagastegui.

Escuché la voz del Ing. y me detuve en seco, esto es raro, aunque eso no fue lo peor, medio salón volteó a mirarme por una décima de segundo, que vergüenza.

- Dígame Ing.

- Sígame, quiero conversar con usted.

Salimos del salón con la mirada de medio mundo clavado en nosotros, por eso odio la atención, solo lo soporto en las exposiciones, porque ahí sí necesito hipnotizar a medio mundo.

- Por supuesto, Ing.

Caminamos hasta la planta baja del pabellón, prácticamente nos dirigíamos a la sala de conferencias, excepto que en última instancia giro hacia la facultad de medicina.

- Srta. Luna, voy a ser directo, tú eres familiar del Ing. Nicolás.

Eso no me lo esperaba, pero bueno, que comience la función.

- Ing. Nicolás, ¿Se refiere al de Caminos?

- A ese mismo.

- No, Ing. Ni siquiera lo conozco. Pero ¿Por qué lo pregunta?

- A nada importante.

Puso una mirada extraña, que no sabría descifrar.

- Bueno, entonces, si me disculpa, me tengo que retirar. Buenas tardes.

- Buenas tardes, Srta. Luna

Lo dije en un tono suave, soy una buena actriz, además el Ing. me agrada. Caminé de regreso y me dirigí a la sala de conferencias, quiero sentarme atrás, muy lejos de la realidad.

Mientras caminaba, me preparé mentalmente para el momento de ingresar en esa clase y ver el rostro del Ing. Nicolas, mi padre.

Bueno, la mayoría podría adivinarlo fácilmente, si no fuera porque tomé el apellido de mi madre luego de la tragedia.

Lo único que compartimos son unos hermosos ojos dorados, mi madre los adoraba, decía que podía ver el sol en ellos, y claro que, debido a mis genes, mis dorados ojos son más claros, gracias a los ojos plateados de mi madre.

Regresando a la realidad, como decía, vivo con mis tíos, así que esta será la primera vez que me cruzaré con él después de haber dejado esa casa hace 4 años.