PROLOGO

Una vez escuché decir a una chica “cuando estas enamorada eres capaz de hacer cualquier cosa por esa persona hasta incluso dar todo de ti”, pensé que lo que decía era pura ridiculez hasta que conocí a Gabriel…

-Maldición, porque no ponen un letrero de que recién esta trapeado esta parte-estaba gritando a los 4 vientos tratando de levantarme ya que me había resbalado.

-Lo siento mucho Señorita, solo fui por el letrero porque no lo encontraba por ningún lado-al ver al chico que estaba con un bivirí transparente y que el overol de la parte de arriba lo tenía amarrado a su cintura me dejó anonadada con su gran cuerpo.

-Espere usted es La Gerente de la Empresa, perdóneme, en serio solo fue un segundo que me descuide-me decía juntando sus manos.

-Cuanto ti..tiempo piensas quedarte ahí parado, ven ayúdame-se acercó a mi muy rápido y sin mucho esfuerzo me levanto de un jalón, cuando toqué sus brazos se notaba que se ejercitaba ya que estaban duros, nuestros rostros quedaron muy cerca pero me alejé.

-Bueno… a la próxima intenta tener las cosas a tu alcance para que nadie más se accidente-hablé arreglándome.

-Sí, no se preocupe seré más cuidadoso en esto y gracias por no despedirme-le di una última mirada al conserje.

-No me agradezcas…-esperé a que me diga su nombre.

-Gabriel y usted…-me estiró su mano, dude un poco en darle la mano, pero mi interés en él me ganó.

-Jolie-me sonrió y por primera me sonroje…

Desde aquel momento ambos empezamos a salir, no me importó lo que pensaría la gente de nuestra relación, pero tenía cuidado con los paparazzi.

Me enamoré de cada detalle que él me hacía y de lo que pensé del comentario ridículo de la chica terminó siendo cierto cada palabra.

-Padre, sé que él no proviene de una familia rica, pero en serio lo amo, me pidió matrimonio, por favor déjame ser feliz -dije enfrentando a mi Padre para que acepte mi relación.

-Jolie, sabes lo que tu relación con un bueno para nada va a afectar a esta familia, dime, que beneficios nos va a traer o bueno… te va a traer? –mi prometido estaba a mi lado callado y con la cabeza baja.

-Eso ya no es de tu incumbencia y además no es un bueno para nada, Amor desde ahora eres dueño de la Empresa “J”- tanto como mi Padre y Gabriel se quedaron asombrados.

-Sabes que mi empresa también está a la altura con las demás y genera buenos ingresos, así que ahí lo tienes quieras o no me casaré y en esta semana te enteraras por algún medio que haré mi relación publica, vámonos- agarré de la mano a mi futuro prometido y salí de mi casa.

- ¡Jolie, regresa! - hice oídos sordos y ya dentro de mi auto hablé con Gabriel.

-El día de mañana haré los trámites para que seas Gerente- en eso el me tomo de mi cintura y con un solo movimiento me puso encima de él.

-Te Amo Jolie-sonreí y agarré con suavidad su rostro.

-Yo también- lo besé y no me importó estar en la cochera de mi Padre, me entregué a él.

Me enamoré tan perdidamente que le di mi Empresa, me cegó el amor, después de todo cuando estaba a punto de anunciar nuestra relación ya las revistas, periódicos y las redes sociales se enteraron de que el dueño de la empresa “J” pasó a ser de Gabriel, como la noticia estaba fresca decidí anunciar ese mismo día que estaba en una relación subiendo una foto a mis redes, pero lo que me detuvo fue…

-Amor, en una hora estaré en la Empresa, ¿ya desayunaste? -dije respondiéndole la llamada, estaba manejando para allá.

-En unos momentos lo haré y no te preocupes me dijiste que ibas a salir a despejarte un rato a la playa, anda ve-rodé mis ojos.

-Ya no me dieron ganas porque me acorde que día es hoy, ¿sabes que ocurre hoy verdad? -hablé emocionada.

-No amor-choque la palma de mi mano con mi frente haciendo referencia de “que torpe”.

-Es tu cumpleaños, cómo pudiste olvidarlo tú mismo-me reí.

-Con tantas cosas en la cabeza se me pasó, bueno te parece si lo celebramos esta noche quiero que te relajes porque te noté muy estresada esta semana- siempre pensando en el resto en vez de él mismo.

-Está bien si tantos insistes lo haré, entonces te prepararé una sorpresa para esta noche-en la llamada se escuchaba mucho ruido de la ciudad me causó extrañeza porque en la empresa no se escucha así, pero no le tome importancia.

-Okey amor, Te Amo-sonreí

-Yo igual- colgué y me estacioné en su cafetería favorita.

-¿Y desde cuando obedezco a lo que me ordenan?-dije saliendo del auto sonriendo, cuando estaba por voltear la esquina donde estaba la Cafetería escuché su voz y me detuve.

-Irina te cité aquí para poder pedirte que … ¿te gustaría estar en una relación conmigo? -espera que es lo que está diciendo.

-¿Y mi hermana, que harás con ella?, estas a punto de casarte -que caraj*s haces acá Irina.

-De Jolie no te preocupes, me acerqué a ella por ti, porque tú eres la que me gusta-aquella frase que salió de su boca partió mi corazón en mil pedazos.

-Ahora soy una persona importante en la ciudad, por favor acéptame-poco a poco empezaron a rodar lagrimas por mis mejillas.

-Está bien salgamos, pero en secreto y sí también me gustas- no puedo quedarme más tiempo aquí como una estúpida, me asomé un poco y los vi besándose, sin hacer nada di media vuelta y me dirigí a mi auto, conduje hacia la playa y ahí me desahogué, llamé a mi mejor amiga y le conté todo.

-Que imbécil, solo buscaba tu dinero Jolie y un puesto en la cima-hablo mi amiga sirviéndome una copa de vino.

-Eso te pasa por enamorarte del conserje, pero bueno ahora no es momento para mirar atrás, que ¿piensas hacer? - estaba mal porque me termino fallando la persona en la que más confiaba, pero no dejé que eso me derrumbara.