Δ EL CAMINO HACIA LA VERDAD

EUN SANG*

Al siguiente tuve que ir tratando de guardar la cordura… cuando llegué al hotel donde se hospedaba Namjoon estaban ya todos. 

-¿Por qué dices que quieres disfrutar cada momento?- Escuché preguntar a Jin. 

-Bueno...es que no me qued…- interrumpí a namjoon. *no puede revelar la verdad*

-¡Namjoon, llegué!- dije y todos me miraron. 

Luego de unas horas de viaje llegamos a una playa privada, estaba realmente genial. Cada uno se instaló en su cuarto de hotel, luego salimos a la playa, ya era noche así que optamos por hacer una fogata. Me senté en la arena al lado de Namjoon. 

-¿pensabas decirle la verdad a Jin?- pregunté

-Supongo, pero menos mal que llegaste...aun no estoy listo para confesarlo. 

-Sea lo que sea, te apoyaré.- puse mi mano en su hombro. 

JIN*

Estábamos sentados en la fogata hasta que note que t/n y namjoon hablaban muy bajito ¿de que hablaran? 

-oppa...tengo frío- dijo young rae.

-Ponte esto- dije dándole mi abrigo. 

-Pensé que me abrazarias-

-¿eh? perdón no te escuche.

-¿por qué estás mirando a namjoon y a eun sang?- preguntó- ¡¡oppa!!- gritó lo suficiente fuerte para llamar la atención de todos. 

-Young Rae ¿pasa algo?- pregunto namjoon. 

-Eun Sang ¿ podemos hablar un momento?- dijo young rae. 

Eun sang*

-¿podrias dejar de coquetear con jin oppa?- me dijo.

-¿yo?- señale con mi dedo- apenas cruzamos palabras..

-Sea como sea, jin oppa no para de verte, solo alejate de el, el y yo somos muy cercanos-amenazó.

-De qué estás hablando…

-¡Young Rae! ¿Qué estás haciendo? vamos- dijo Jin llevandosela. 

-Eun Sang- dijo Namjoon acercándose pero se cayó a la arena. 

-¡NAMJOON! ¿Estas bien?- lo ayudé a levantarse. 

-Tranquila, solo es un mareo. - sonrió.

-Cómo puedes sonreír...te llevaré a tu cuarto, vamos. 

Llevé a namjoon a su habitación y lo puse en el sofá. 

-Oppa...cada vez me preocupas más- dije sentandome en el suelo con las rodillas alzadas. 

-Seguramente son efectos secundarios, tranquila...no lo digas a nadie. 

-Lose, soy la única que sabe lo de …

-Si, eso mismo- me interrumpió. 

Al dia siguiente bajé a tomar desayuno, no habia nadie así que fui a la cafeteria del hotel. 

-Eun Sang...toma esta bebida- me sorprendió jin. 

-¿que haces aquí?

-¿tomando desayuno?- partió en risa. 

-Ahhh…

-Estas muy linda hoy- me alagó y se fue- *¿Por que mi corazón está palpitando fuerte?*

En la tarde namjoon quiso jugar en la arena, optamos por un juego con pelota. 

la cosa era que se tenía que lanzar la pelota a tu rival, tus compañeros varones tienen que protegerse. En este caso me toco con Jin…

-¡Cuidado!- me abrazó Jin para que no me golpee la pelota. - ¿estas bien?

-Eso debería preguntarte yo … 

-¡Oppa! vamos a comer algo- dijo young rae llevandoselo. 

Llegó la noche y todos se quedaron dormidos en la fogata, era la media noche y decidi llamar a mi madre, se que es tarde pero normalmente ella sigue despierta…

-omma…¿esta todo bien en casa?- 

-Sí hija, ¿qué estás haciendo?

-Justo ahora veo las llamas de una fogata, el cielo esta hermoso tambien, ¿viste la luna? está muy reluciente…aún recuerdo cuando la mirabamos juntas- mis ojos empezaron a cristalizarse- Te extraño mamá, de verdad me haces mucha falta junto con papá. 

-Oh mi niña...no te pongas triste, lo bueno es que cumpliste tus sueños, estamos orgullosos de ti- escuche llorar a mi madre. 

-Desncansa mamá- colgué- *me costó bastante colgar, mi madre y yo solíamos ser muy unidas pero la distancia nos separó*

-¿debes de extrañarlos mucho verdad?- escuché decir a alguien *Jin* 

-Si…

-Eun Sang, tenemos que hablar.

-Dejalo asi por favor..

-Te he extrañado estos dos años- se sentó a mi lado.

-¿por qué tuviste que aparecer cuando estaba a punto de olvidarte por completo? 

-No es así, la última vez no me dejaste explicarte. Nunca fue lo que te hicieronn creer. 

-Young Rae, solo preocupate por ella. 

-Ella no me interesa como mujer, la veo como una hermana por ...lo que quiero decir es que siempre fuiste tú, aquel beso fue una confusión, lo acepto, si hubo beso pero fue ella quien lo hizo, a partir de ahí le deje las cosas en claro. Te lo explicaré todo.  

-No puedo creerte.- dije con los ojos llorosos.

-Empecemos de nuevo.- respondió.

-¿eh?