Capítulo 14

Viernes por fin después de una semana larga, Jayden y yo hemos decidido cerrar más tarde toda la semana, lo cual ha cumplido nuestras expectativas, aparentemente a la clientela le encanta pasarse por aquí por las tarde-noches. No entiendo porque el señor Cooper insiste en cerrar tan temprano, afortunadamente no se ha dado cuenta de que hemos modificado un poquito la forma de llevar las cosas, además de que Jayden se ha comprometido a surtir de lo necesario para operar, así que no creo que se pase por acá en un buen tiempo, además las ganancias han sido muy buenas, lo cual es muy benéfico para ellos, sobretodo en estos momentos. Lo único desventajoso para mí es que tengo que caminar a casa con muy poca luz de sol ya, pero, aunque Jayden ha insistido en darme compañía durante el camino, prefiero hacerlo sola.

Las farolas ya están encendidas y el trafico empieza a ser abundante, después de todo es verano, todos tienen tiempo libre de salir a distraerse o hacer cualquier cosa, añadiendo que es fin de semana. Las banquetas igual son muy transitadas a esta hora, y es una herramienta perfecta para usar como escusa y así evitar que Jayden haga doble camino de la cafetería a mi casa y luego de mi casa a la suya, además de eludir los sermones de mamá por estar fuera casi de noche y sola. Aunque hoy en especial no le dejaré tiempo ni de si quiera pensar en una palabra para sermonearme.

_ Mamá, papá, ya estoy aquí.

Escucho las pisadas de Benji bajar a toda prisa en cuanto termino de hablar, ha mejorado mucho a pesar de los pocos días que tiene aquí, ya se le ve más repuesto y cada día reluce más el brillo de su mirada, a pesar de los desprecios que a veces mamá tiende a hacerle. Me dirijo a la cocina con pasos que son casi brinquitos, veo con gracia como Bneji mantiene su “distancia” sentándose al pie de la entrada. Papá mira al portátil con atención, mientras mamá corta vegetales.

_ Buenas noches papá_ lo saludo dándole un beso en la mejilla_. Hola mamá_ profiero mientras la abrazo por detrás.

_ Hija, harás que me corte.

_ Pero cuanto entusiasmo_ expresa papá mientras se retira las gafas_ ¿se puede saber a qué se debe?

_ Bueno, yo creo que ya está por demás que le diga que día es mañana, ¿no?

_ Por supuesto que sabemos qué día es mañana.

_ Bueno, pues ya sé que seguramente ya tienen planes, pero…_ mamá deja de hacer lo que estaba haciendo, y ahora ambos me miran con suma atención_, pero les he hecho una reservación en un restaurante.

_ Pero… hija ya sabes que siempre lo celebramos los tres juntos.

_ Ya lo sé mamá, pero es solo una cena, el día lo puedo pasar con ustedes, además se merecen un ratito ustedes solos_ digo con una mirada picara hacia ella_ para que me quieren ahí de chicle ¿eh?

Desde que tengo uso de razón mis padres celebran su aniversario, cada año sin falta. Sin embargo, hasta ahora, siempre lo han hecho en familia, todos juntos, cosa que está muy bien siempre la pasamos genial, pero creo que ya es hora de que se den un momento para ellos y mamá se deje consentir ya que es ella quien cocina en esos días. Por otro lado, yo creo que ya fue suficiente escuchar su misma historia cada año. Pará su boda escogieron el mismo día que su aniversario de novios, aparentemente antes de serlo tuvieron una relación de amistad muy cercana por años, lo cual explicaría porque hasta hace poco insinuaban que yo podría tener algo con Jayden algún día, cosa que ya no han mencionado desde un día que realmente me hicieron enojar. Después tuvieron una larga temporada siendo una familia de únicamente dos.

_ Evolet, no tenías que gastar tu dinero en…

_ No, no, no, no me vengan con eso, yo mi dinero me lo gasto en lo que yo quiera, ¿siempre que les quiero hacer un regalo tiene que ser así? porque en ese caso yo tampoco quiero que me regalen nada nunca mas, ¿para que gastan su dinero en mí?, además…

_ Está bien, está bien_ me interrumpe papá con una sonrisa_ tienes razón, deberíamos estarte agradeciendo…

_ Esperen, esperen, esperen, antes que nada, ¿si les entusiasma la idea?

_ Ay, pero claro que si_ responde mamá con emoción dándome un abrazo.

_ Muy bien, entonces mañana los quiero ver saliendo por esa puerta bien guapos_ enuncio con una sonrisa de oreja a oreja, para después susurrar_ aquí entre nos el restaurante es un lugar muy elegante_ todos soltamos una risa sonora_ bueno, subo a dejar mi mochila y vengo a cenar.

El regocijo me llena el pecho mientras subo las escaleras, dejo mi mochila en la habitación para después bajar al comedor. Como de costumbre cenamos juntos, para entonces papá ya había cerrado el ordenador y se centra únicamente en el momento, a decir verdad, no podría ser de otra forma, mamá jamás nos dejaría utilizar dispositivo alguno durante la cena.

Por la mañana volvemos a desayunar todos juntos, pero esta vez increíblemente Benji es bienvenido a andar rondando por la mesa y como dudo que esta oportunidad se presente dos veces comparto de mi desayuno cada que puedo.

Antes de caer la noche vamos al Crecent Moon Ranch, donde hemos hecho un picnic en el que a final de cuentas mi ausencia es más que evidente, pues me la he pasado nadando en Oak Creek. He descubierto lo mucho que a benji le gusta estar en el agua, así que salir de ahí ha sido todo un reto, además hacia tanto que yo no entraba al agua que el tiempo se me ha ido volando.

Entro a la habitación de mamá, la cual está hecha un desastre, un montón de ropa por doquier, pero no hay rastro de ella, seguramente está en el cuarto de baño. Mientras sale me dispongo a acomodar un poco la gran montaña de vestidos sobre la cama, colocándolos en ganchos para después acomodarlos en el closet, mismo al que jamás pensé que le cupiera tanta ropa, hay muchas prendas que ni si quiera le he visto usar y otras que le veo más de lo que puedo recordar, pero hay uno que llama mucho mi atención.

La puerta del cuarto de baño se abre con lentitud, y diviso a mi mamá guapísima, con un vestido color antimonio tan largo que cubre sus zapatos de tacón, su pelo va suelto y acomodado en ondas.