Prefacio

Hay un pueblo, perdido entre cientos de kilómetros de bosque, a casi una hora y media de la ciudad de Salem, situado en la orilla norte del rio Tulatin.

Su nombre es Cherry Grove. Fue fundado más o menos en 1910 por un inmigrante sueco con un nombre tal vez no tan difícil de pronunciar, pero sí muy aburrido. Pongámosle Simón, ¿Les parece?, Bien.

Entonces Simón, llegó a Estados unidos alrededor del año 1880 y fundo la comunidad, quiso ponerle un nombre que se asociara con el cultivo de frutas, su principal opción fue "Appleton", pero otro lugar de Oregón ya tenía ese nombre. Entonces, ¿Qué hizo el gran Simón? Pues le pregunto a su hermana; ¿Qué nombre le podría poner a una comunidad en medio de la nada y que estuviera relacionado con el cultivo de frutas?, pues su gran hermana, tal vez le dio la única opción que se le ocurrió con tal de que su hermano la dejara en paz, así que sugirió el nombre de su casa en Minnesota, y fue así como se quedó "Cherry Grove". Hermoso ¿No creen?

Pero yo no estoy aquí para contarles acerca de orígenes de nombres o pueblos perdidos entre el bosque.

Estoy aquí para contarles una historia que tal vez sí les interese, o al menos les entretenga un poco. Es acerca de un grupo de personas que conozco casi tanto como la palma de mi mano. 

Pero como cualquier historia debemos comenzar desde el principio, y les hablo de Cherry Grove porque ahí fue donde todo comenzó.

¿Quieren saber otra cosa interesante sobre este pueblo?

En una de las paredes del patio de la escuela preparatoria, hay una leyenda. Es una pared común y corriente de un aburrido color blanco, es el lugar en donde los adolescentes rebeldes que no entran a clases van a fumar ya que saben que ningún maestro ronda por esos límites de la escuela. Aquella pared ha sido testigo de muchos actos que no vamos a describir justo ahora.

¿Qué es lo más interesante de esa estúpida pared?

Bueno, pues en todo el espacio, justo por encima de la desgastada pintura blanquecina, se encuentra escrito algo con un marcador permanente de color negro y una desprolija caligrafía.

Nadie sabe cómo fue que llego ahí, ni cuando, ni de qué manera, mucho menos saben quién fue el que tuvo el valor de escribir aquello o la historia que hay detrás de eso, a muchos ni siquiera les interesa saber lo que hay detrás:

¿Quieren saber que es lo dice? 

"Son demasiado idiotas como para saber que existe una vida fuera de este estúpido pueblo"

Definitivamente algo que no le haría gracia a un profesor si lo llegara a descubrir.

Y creo que ya pueden deducir de que va la historia que estoy a punto de contarles, ¿Les digo un spoiler?, vale la pena escucharla.