Capítulo # 5
En la clínica.
Taisha estaba caminando por los pasillos tranquilamente, por suerte no había visto a Hans por ningún lado y esperaba no hacerlo.
—Dios mío, será una noche larga.
—Taisha, ¿qué haces aquí? —le preguntó Chad, acercándose a ella.
—Es que Molly no pudo venir, tengo doble turno —le comentó
—Qué mal, si quieres, cuando estés cansada vas a dormir un rato en mi oficina —le ofreció.
—Gracias, la verdad puede ser que me pegué un poco —le confesó sonriendo.
—Nos vemos —dijo él alejándose.
—Adiós —dijo ella.
La noche comenzó a pasar las horas lentas. Taisha estaba muy nerviosa, ya que Chad se había ido casi a las tres de la madrugada y no había nadie que la pudiera ayudar, si Hans comenzaba a perseguirla por la clínica.
—Uff qué noche, dios mío —dijo ella. En eso miró a Ellis que estaba allí parado en la puerta, se acercó a él—. ¿Pasó algo? —le preguntó asustada.
—Sí, Chloe, comenzaron a darle las contracciones y la traje para acá —le explicó.
—Ya, pero no le faltaba —dijo ella preocupándose.
—Lo mismo pienso yo, está adentro.
—Tranquilo, cuñado, todo saldrá bien, ¿pero en dónde está Aisha? —le preguntó a no verla a su lado.
—Está aquí —dijo él volteándose, pero no había nadie.
Taisha estaba asustada.
—¿En dónde está mi hija?
—No sé —contestó desesperado.
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Aisha caminando por los pasillos.
—Estoy asustada, ¿en dónde está mi mamá? —se preguntó ella al chocar con alguien.
—Hola, pequeña —dijo Hans, emocionado de verla de nuevo y detallarla bien.
—Hola.
—¿Y qué haces por aquí? —le preguntó extrañado que estuviera sola y menos a la hora que era.
—Es que mi tía, está a punto de dar a luz a mi primito —contestó mirándolo con miedo.
—En serio, ¿cuál Chloe u Olivia? —le preguntó, no sabía que estuvieran casadas o solteras.
—¿Conoces a mis tías? —le preguntó un poco asombrada.
—Sí.
—Tía Chloe, estoy buscando a mi mami —le comunicó ella.
—Mm, qué bien. Viniste con tu papi, ¿verdad? —le preguntó de una vez. Tenía que sacarse esa duda por completo.
—Yo no tengo padre —le respondió triste—. Mi mamá me dijo; que se fue de viaje antes que yo naciera y pues creo que todavía no ha regresado aún.
Hans estaba sorprendido sabía que ella era su hija, ¿por qué Taisha no lo había llamado para darle la noticia de su embarazo?
—Oye, ¿estás allí? —le preguntó a notar su ausencia.
—Perdón, mi nombre es Hans Johnson —dijo él sonriéndole.
—Hans que lindo nombre, eres muy guapo —le sonrió.
Hans estaba sonriendo.
—Gracias, ven vamos a buscar a tu mami.
—Sí, me cargas.
—Claro —dijo él cargándola con orgullo—. Vamos a buscar a Taisha.
—¿Conoces a mi mamá? —le preguntó inocente.
—Sí, y no sabes cuánto la conozco.
—Mi mami, me enseñó a no hablar con extraños, pero siento que no eres malo.
Hans estaba sonriendo y detallándole el cabello.
—Eres rubia, pero tienes color en tus mechones —dijo con cierta curiosidad.
—Mi mami dice; que de seguro en su barriguita no se decidía que color tendría y tengo dos colores.
Hans estaba asombrado con su pequeña, era tan divina y hermosa, tenía tanto de los dos que era perfecta. Tan hermosa y parecía una perfecta muñeca.
Taisha venía tan desesperada que no había visto a Hans con Aisha, hasta que miró bien y fue hasta ellos.
—Aisha —habló Taisha acercándose a ellos.
—Mami —dijo la pequeña feliz.
—La acabó de conseguir, te estaba buscando —le comentó Hans.
—Sí, mami. Va a nacer mi primito.
—Aisha no lo vuelvas hacer, me asustaste. ¡Quieres que me dé un infarto! ¡he! ¿dime? —le preguntó furiosa.
Aisha bajando la cabeza de vergüenza.
—Perdón.
—No la regañes así —le dijo molesto y bajándola de sus brazos.
Taisha estaba molesta.
—No te metas, no es tú hija —dijo seria y celosa—. Vamos Aisha.
—Oye, Taisha —dijo él serio.
Taisha lo ignoró y se fue con Aisha. Hans estaba que echaba chispas, tenía que hablar con ella urgentemente.
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En sala de espera.
—Todavía nada —habló Olivia impaciente. Había llegado porque su cuñado la llamo.
—No —dijo su cuñado.
El doctor acercándose.
—Familiares de Chloe Collins.
—Es mi esposa —dijo él acercándose con nerviosismo.
—Felicidades, ya nació el bebé. Está sano y su esposa está muy bien.
—Ya soy papá —dijo Ellis emocionado.
—Y yo tía de nuevo —dijo Olivia feliz.
Taisha se reunió con su familia con Aisha en sus brazos.
—¿Qué pasó?
—Ya nació —dijo Ellis feliz.
—En serio —comentó Taisha asombrada.
—Taisha es tu hermana —habló acercándose el médico a ella.
—Sí, Erick.
—Vamos para que lo conozcan —dijo él sonriéndoles.
—Vamos —dijo Taisha emocionada.
Todos se fueron a conocer al nuevo integrante de la familia.
Taisha abriendo la puerta.
—Hola.
Chloe con el bebé en sus brazos.
—Hola.
—Esta hermoso, ¿y cómo lo van a llamar? —le preguntó Taisha.
—Todavía no lo sé —dijo Chloe.
—Me encanta, está muy lindo, me hace recordar cuando nació Aisha —dijo Olivia nostálgica.
—Sí, es verdad —comenta Taisha.
El bebé tenía el cabello negro como su hermana y los ojos verdes como su padre, se parecía físicamente a su cuñado.
—¿Así era yo? —preguntó Aisha incrédula.
—Sí, más pequeña. Ya que naciste de ocho meses —explicó su madre.
—Sí, es verdad —confirmó Olivia.
—¿Lo puedo cargar? —le preguntó su esposo.
—Claro —dijo su esposa.
Chloe se lo dio con cuidado.
—Está hermoso —dijo Ellis encantado con su hijo.
—Se parece mucho a ti Ellis —dijo Taisha.
—¿Te parece? —le preguntó emocionado.
—Sí.
—¿Lo puedo cargar? —preguntó la niña.
Todos hicieron un silencio, no esperaban que la niña quisiera cargar al bebé.