Capítulo 3

Sus ojos se humedecen,  aunque ya no llora cuando el recuerdo invade su mente la época navideña la pone sensible,  siente que ha perdido tanto que nunca podrá estar en paz durante la misma. 

Observa de nuevo las luces que se hacen visibles a medida que la noche avanza. Tiene que dejar ir el pasado pero no tiene idea de cómo hacerlo, Iván y Mara se casaron y diez años después siguen juntos,  tienen dos hermosas niñas y parecen una pareja feliz y estable.

Ella ha tratado de acercarse pero no se lo ha permitido, no quiere explicaciones estúpidas.

-Bela,  Bela,  otra vez aquí,  niña,  debes soltar todo eso que te carcome, perdonar no es un regalo a quien te hirió,  es a ti misma a quien liberas –dice su amiga Bernarda quien ha llegado y entro como siempre sin tocar,  se acerca a ella y la mira con cariño,  conoce todo lo que ha vivido ella,  su dolor.

-Berni hermosa,  no estoy pensando en nada,  solo estoy viendo todo el trabajo que gracias a Dios tenemos –dice tratando de despistar a su amiga y asistente

-no me digas, sabes yo también trabajo en una película, pero la tuya es mas muy mala,  deja de querer engañarme,  sabes que ese cuento no me lo trago – la toma por los hombros y la lleva a un espejo completo que ella tiene en su oficina y hace que mire su reflejo –se,  mi santa que has pasado por mucho,  has sufrido mucho,  pero esa te ha servicio para hacer de ti una mujer fuerte, decidida,  luchadora,  aunque todo parezca coincidir en esta época navideña pudo haber pasado en cualquier otra e igual la ibas a satanizar,  el tiempo es eso: tiempo

-Berni….yo…

-tu –dice Berni interrumpiéndola –debes dejar el tiempo correr,  debes dejar de esconderte,  debes darle una oportunidad a esa mujer hermosa que vez en ese espejo,  buscarte un novio, un amante, una pareja, lo que desees pero alguien que te acompañe,  que  te ilusione y si se termina en navidad volver a intentarlo.

La chica baja la cabeza,  sus ojos se humedecen –no quiero más perdidas –dice al fin –quiero todo eso que dices, pero realmente tengo miedo a intentarlo,  me aterra hacerlo.

-mira –la mujer la lleva a uno de los muebles de la oficina –empieza por aceptar todo lo que ha pasado contigo, habla incluso con tu amiga,  lo bonito de la navidad es que la gente está llena de buenos sentimientos y quiere mostrar su mejor cara,  hazlo tú también.  Escúchala, pero sobre todo ve pensando que aunque ella no tenga justificación para haberte traicionado no es algo que deba dañarte a ti, empieza a sanarte.

La chica se queda meditando,  realmente necesita estar en paz, darse una oportunidad vivir como una Grinch todas las navidades no le aporta nada.

-lo pensare –Berni aplaude en silencio con una sonrisa amplia –no te prometo nada,  así que nada de buscarme acompañantes, de invitarme a fiestas,  déjame ir a mi ritmo está bien??

-será como quieras –dice la mujer levantando las manos en señal de rendición

-sabes,  siempre he querido saber que fue de papa,  estos diez años no han podido borrar todo lo que siempre sentí por él,  su abandono destrozo a mi mama,  ella nunca se recuperó,  con el me gustaría hablar para saber qué cambio,  porque te digo que fue de la noche a la mañana. Fue algo tan extraño,  él era tan cariñoso,  vivía para complacernos, amaba a mama, nunca pude entender que fue lo que paso.

-si Dios así lo quiere te lo dejara saber,  asi que tranquila,  y ven,  siéntate, mira todos los pedidos que tenemos,  este año se duplicaron,  asi que ya sabes,  debemos contratar mas personal.

-Dios!!! Qué bueno,  esto es maravillo,  vamos a estar bien ocupadas, lo siento por ese esposo tuyo

-no lo sientas,  el ya pidió sus vacaciones y trabajara con nosotras como todos los años

-esa empresa volvió a contratarnos –dice Bela observando el listado de clientes

-cuál??? – Pregunta Berni acercándose – ahhhh, si,  ellos quedaron encantados con todo lo que preparamos el año pasado para ellos,  ese cliente nos lo refirió la gente de Seguridad Segura

-bueno pues vamos a hacerlo,  mañana nos reuniremos a primera hora,  según lo que veo,  empezamos el itinerario en cinco días.

-perfecto,  9:am te parece –dice Berni saliendo de la oficina –

-sí,  está bien esa hora,  Berni, 

-si??

-gracias,  sin ti,  francamente no sé qué pudiera hacer,  eres esa roca que me sostiene,  gracias por no rendirte conmigo,  sé que a veces soy insoportable pero estas ahí,  no sabes cuánto te quiero en verdad y cuanto más te valoro.

Sin decir nada se abraza de ella quien le devuelve el abrazo con cariño – sabes que lo hago porque te quiero igual y porque sé que eres un ser humano excepcional que ha sufrido mucho,  y aun así eses un sol, y ya, - dice limpiarse una lagrima que ha rodado por su mejilla- deja que me vaya voy a cenar con mi esposo antes de que arranque este torbellino de trabajo, por suerte terminamos el 23 y cada quien se concentrará en  su familia.

-ve,  ve mujer,  ese hombre te espera.