Capitulo catorce.

Al haberse despedido con u beso de la castaña este vio como ella desaparecía mientras el agarraba su celular y leía un mensaje que Jungkook le había mandado hace poco.

“Te veo en quince minutos con Jimi y Taehyung en la plaza abandonada que está cerca de tu café favorito… Ahí un cambio en el plan”

Soltó una sonrisa mientras guardaba su celular en el bolsillo e su pantalón y se dirigía a es descuidaba y tenebrosa plaza a la que había sido citado…

Al ya haberse bajado de la micro corrió al otro lado de la acera llegando finalmente a la plaza donde se vería con sus dos mejores amigos

¿Cuál sería cambio?

¿Por qué le citaron tan de repente?

Se pregunto a si mismo l ver al de pelos color palta y al e cabellos azabaches sentados junto a un chico más alto al cual no le podía distinguir la cara debido a la mascarilla que este traía puesta, metió las manos en los bolsillos de su pantalón y llego junto a sus amigos saludándolos con un apretón de manos para después sentarse en una de las piedras.

- ¿Y qué es eso tan importante por lo que me hicieron venir a las nueve de la mañana? -

Jungkook miro un segundo a Namjoon para luego sonreír mientras miraba a Jimin, Taehyung y luego de nuevo fijaba su mirada en Namjoon.

- Con respecto a la apuesta… Bueno la verdad haberte enamorado de ella te pone en DEMASIADA desventaja, pero he encontrado una forma para repararlo, acuéstate con ella… Debes lograr que ella se te entregue y te salvas…-

Soltó sin tomarle atención al peso que tenían esas palabras… ¿debía acostarse con ella?... Rápidamente negó con la cabeza mientras desviaba la mirada hacia el suelo mirando sus zapatos (los cuales repentinamente era muy interesantes) escuchando las risas del de pelos color menta.

- Namjoon… Debes darte cuenta de que no estas en posición de negarte… ¿O se te olvido lo que pasara entonces con ella? … Sabes que si a Jimin se le da en gana la manda directo a Japón con el idiota de su primo-

Soltó en seco alarmando mas aun al de piel morena…

¿Enserio eran capaces de hacerle algo tan cruel por una maldita apuesta?

¿En verdad el la había enredado n estos juegos tan sucios?

¿Por qué tan repentinamente le resultaba algo muy interesante?

Se paro rápidamente ahora con una sonrisa totalmente falsa estrechando su mano con el de cabellos mentas aceptando esta tramposa jugada en la que él se hacía enredado.

- Al diablo, si fin al cabo es solo un acostó y ya…¿Que podría salir mal?

Alya estar dando las cuatro de la tarde el chico de piel morena se despidió de los cuatro chicos para luego sentarse unas bancas mas lejos mientras escuchaba una canción a través de sus auriculares hasta que diera ala hora en la que la castaña iba a salir…

¿Quieren saber algo?

Si bien estaba… ¿normal? Después de la idea que le habían comentado los chicos aun así no podía evitar sentir culpa por hacerle algo así a su mejor amiga en el mundo.