Millones de personas

Un sonido de llamada sonó en toda la habitación, el todavía con los ojos cerrados empezó a buscar su teléfono con la mano.

Cuando al fin lo encontró puso el dedo en un lugar de la pantalla y lo deslizo para después ponerlo en su oido.

- Si?

Dijo sin más, esperó a que la persona del otro lado de la línea contestará, salió una risa de la otra persona y eso le hizo saber quién era el que llamaba.

- Deja de hacerte el maduro, Irás al partido de handball?

Habrío los ojos lentamente y vio por unos momentos el techo de su habitación, se sentó en su cama y vio el reloj de su habitación, 5:30 faltaba media hora para que el partido empezará.

-claro!! Tengo que ir a apoyar a...

Callo rápidamente al reaccionar que diréis, una risa sonó del otro lado de la línea, sabía perfectamente que diría, era su mejor amigo, como no conocerlo?

- Alístate que iremos a distraernos un poco.

Él solo uso un ajá para después colgar, abrió la puerta del closet buscando un pantalón de mezclilla negro, y una camisa de cuello blanca, al igual que unos zapatos cafés, aunque fuera a un partido no tenía porque dejar su lado formal y que le quedaba bien.

Tomo las llaves de su coche y bajo por los escalones de su casa para llegar a la planta baja cuando vio a su hermano menor con aquel aire de grandeza y su buena forma de vestir informalmente pero a su parecer era detestable y su chamarra color petróleo con un toque de amarillo no ayudaba.

-iras al partido?

Preguntó viéndolo mientras bajaba los últimos escalones, este solo asintió con la cabeza y siguió con dirección a la puerta, su hermano sonrió quería molestarlo y darle la contraria, como siempre.

- Escuché que terminaste con Daniel

Se quedó parado tomando

suavemente la manija de la gran puerta, su mirada en esa pequeña estructura color amarillo brillante,dejó salir un pequeño suspiro, su mente se concentraba en las palabras que decía su hermano.

El odiaba que su hermano se comportará de forma hipócrita como los del equipo de fútbol y la mayoría de los populares, eso había empezado desde que los dos estrato a medio superior, su forma tas estúpida de echarle la contraria.

-claro!!! Si quieres puedes ir por ella, agarrar las migajas de deja tu hermano mayor, que genial

Lo último lo dijo sin animos para después abrir la puerta y salir por esta lo más rápido que pudo, no pudo oír lo que su hermano le dijo pero no creía que fuera tan importante.

Habrío su coche, entró en el y se quedo pensando un poco en muchas cosas pero a la vez nada.

Prendió el motor y salió en dirección a la escuela donde sería el partido.

El cielo todavía se veía de azul claro pero poco a poco este se volvía azul rey, no habían muchas personas en la calle y el camino fue tranquilo sin tráfico, fue lo mejor para el.

Cuando llegó pudo ver a un montón de personas en las gradas.

Dejó su coche y salió de él en dirección a la entrada de del campo, pudo ver sin dificultad a su mejor amigo platicando con otros chicos, el se hacerlo sin más.

-hola! Ya llegó por quién lloraban 

Empezaron a reir, todos lo saludaron con un hola y sonrisas, había que admitir que cada uno por su cuenta eran un caos y juntos podrían hacer estallar al mundo entero.

-puedes decir que eres el más formal y todo pero.... Cuando te conocen eres un chico normal.

Hablo Issac un chico peli castaño con unas pecas en su nariz y unas cuantas debajo de sus ojos.

-vamos el saliendo de esta prisión va a gobernar una de las mejores empresas.

Dijo Luis un chico con el cabello peinado hacia atrás color rubio y piel perfectamente blanca.

-Mejor subamos antes de que nos ganen los lugares.

Su mejor amigo Leonardo lo había salvado, todos contestaron con un si y subieron a las gradas color verde.

- Escuché que ahí una nueva jugadora tal vez le quite el trono a... Daniel ya que dicen que es mejor jugadora como portera, defensa, lateral y que central wow se luce.

Hablo Emanuel viendo atento a la cancha pero dudando un poco al decir el nombre de Daniel.

-Yo escuché que Daniel empezó a salir con Kevin, ya saben el capitan del equipo de fútbol.

Hablo Axel mirándome para poder ver qué cara ponía pero la verdad no me importaba mucho, el irse con el capitan de fútbol que es más hueco que un jarrón de porcelana, no le molestaba en absoluto que estuviera con alguien inferior a el. Johan no contesto se quedó viendo a las jugadoras salir para empezar el juego.

- El veinticinco!!

Contestó Issac emocionado y apuntando a la chica de cabello café dándonos la espalda donde tenía el número 25 y de nombre decía "Dulce". Sonrió sin más, había encontrado a su presa.

Empezó el partido y al parecer lo que habían dicho era cierto jugaba bien, mejor de Daniel quien estaba del otro lado esquivando a las del equipo contrario y estar sola para poder anotar un gol.
El uniforme azul petróleo se les veía bien a todas pero solo dos chicas estaban en su atención.
Cuando estaban a pocos minutos de terminar el partido Dulce tenía la pelota estaba a punto de lanzar a Daniel cuando a Johan le ganó la emoción y poder hacer que Dulce le mirara por hoy decidió gritar.
- Tu puedes Dulce!!!