Soy el tipo de persona a la que siempre le dicen qué hacer, pero también soy el tipo de persona que detesta que le digan qué debe hacer.
A veces pienso en abandonar el juego, pero no soy el tipo de persona que se rinde sin probar suerte.
No soy el tipo de persona que piensa antes de hablar o actuar.
Me describen como rara, diferente o peculiar, pero no me identifico con ninguna de esas etiquetas. Simplemente me gusta ser y actuar como soy, aunque muchas veces me refugio en una personalidad que no es la mía.
Detesto pedir ayuda y aunque me gustaría decir que estoy conforme conmigo misma, nunca he estado realmente cómoda con quien soy.
Seis luces alumbraron mi camino y me hicieron darme cuenta de lo bonita que puede ser la realidad.
Dicen que el hogar es donde yace el corazón; hasta hace unos años, el mío estaba enterrado bajo un sauce llorón, observando la vida pasar. Estoy eternamente agradecida de que esas luces desenterraran mi corazón.
Me enorgullece decir que conocí a seis chicas increíbles. No sé si fue suerte, casualidad u obra del destino.
Hace años viví una historia que no era mía, pero ahora estoy feliz de poder decir que al fin pude crear mi propia historia y soy el tipo de persona que alguna vez deseé ser.
Sueño con estar rodeada de esas seis luces toda la vida.
Aquellas que aman la saga de Harry Potter y que seguiría hasta el fin del mundo.
Las que son pequeñas, pero tienen un brillo muy fuerte.
Aquellas que aman sus deportes y a los animales.
Las que tienen unos rizos preciosos y un estilo de dibujo que me causa escalofríos.
Aquellas que aman las mismas series infantiles que yo y que hacen dibujos adorables en mi archivador y en mis hojas de apuntes.
Esas luces me salvaron y ahora soy el tipo de persona que vive porque quiere, no por miedo a decepcionar.
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Editado: 26.06.2024